Alarma por un brote de sarampión: crecen los contagios que empezaron en un edificio de CABA
El último parte del Boletín Epidemiológico Nacional indica ya que hay 26 casos registrados en el país.
Los casos de Sarampión en el país aumentaron y hay alarma en Capital Federal y la provincia de Buenos Aires por la concentración de pacientes vinculados con esta enfermedad.
El último parte del Boletín Epidemiológico Nacional indica ya que hay 26 casos registrados en la Argentina, aunque la mayoría de los pacientes se encuentran principalmente en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y en la provincia de Buenos Aires (PBA).
Las autoridades detallaron que en ámbito porteño se confirmaron 11 casos, la mayoría en la Comuna 14, correspondiente al barrio de Palermo, “donde se detectó el primer caso de la cadena de transmisión, la cual se ha dado entre convivientes o contactos laborales”.
De acuerdo con el Boletín Epidemiológico, siete de esos 11 casos se relacionan con los dos primeros contagios detectados en febrero, que pudieron ser por vínculo directo, ya que cinco se encuentran en un mismo edificio; o a causa de transmisión comunitaria ocurrida en la zona o al compartir un espacio en un centro de salud.
Acerca de la situación de la provincia de Buenos Aires, indicaron que se registró un nuevo caso durante la última semana con nexo epidemiológico y de este modo ya son 14 los casos confirmados, todos por el momento en el conurbano, y se logró establecer el vínculo epidemiológico en ocho de los notificados.
La sumatoria entre Capital Federal y Buenos Aires da un total de 25 casos. El único paciente con Sarampión fuera del Área Metropolitana de Buenos Aires se encuentra en la provincia de San Luis: se trata de una beba de ocho meses, que no contaba con vacunación y que presenta antecedente de viaje a México.
El sarampión es una enfermedad viral, altamente contagiosa, que puede presentarse en todas las edades, en los cuales puede causar graves complicaciones respiratorias como neumonía y del sistema nervioso central como convulsiones, meningoencefalitis, ceguera, encefalomielitis postinfecciosa con retraso mental grave y trastornos degenerativos tardíos que no tienen tratamiento o incluso causar la muerte.
Se transmite mediante gotas de aire de la nariz, boca, o garganta de una persona infectada y el virus puede persistir en el aire o sobre superficies, siendo activo y contagioso por 2 horas.
Los expertos indican que no existe ningún tratamiento antiviral específico contra el virus, aunque sí puede prevenirse con la vacunación. (NA)