Bahía Blanca | Miércoles, 25 de junio

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Cómo dos hermanos con uniforme eran “escudos” de un narco

La Justicia ordenó que sigan presos un policía y un infante de Marina, detenidos en mayo en Punta Alta. Detalles y escuchas de una investigación que no se cerró.

El policía y el infante de Marina "protegían" a un hombre detenido con 43 panes de marihuana. Fotos: archivo La Nueva.

Hace dos años, mientras purgaba una condena por droga pero bajo arresto domiciliario en su casa del barrio Centenario, Punta Alta, Pablo Alexis Pelaitay fue detenido nuevamente: en su vivienda secuestraron nada menos que 43 kilos de marihuana en panes.

A esa altura ya estaba claro para los investigadores que "Papos" Pelaitay, a quien en 2021 le habían dado 4 años y 8 meses de condena por la tenencia de drogas para comercializar, contaba con protección, aún cuando en medio de la pandemia le habían dado el beneficio de la domiciliaria por un tema de salud.

La causa continuó su curso y se pudo estabelcer que dos hermanos de apellido López, uno infante de Marina y el otro policía, eran sus "escudos".

A Enzo Ariel y Jorge Fabián López les acaban de confirmar la prisión preventiva que vienen sufriendo desde mayo último, cuando cayeron en medio de múltiples operativos antidroga.

Un tercer hermano, el también policía Leonardo Gabriel López, fue arrestado en ese momento aunque en las últimas horas fue excarcelado.

Los detalles de la investigación y las escuchas que surgieron -y a las que tuvo acceso La Nueva.- son preocupantes sobre cómo operaba la protección a Pelaitay. Y demuestran un entramado con uniformados "infieles", que es más común de lo que se cree.

Romperle "la gorra"

"Tenía un laburito para vos", le dijo Pelaitay en una comunicación a Enzo López, el 23 de febrero de 2019.

"¿Vos eras mi matón o no? Vos te encargabas de pegarles a los guachos que yo no podía pegarle para no ir preso, pero dejá le meto dos tiros en la pata...", le remarcó, sin conocerse el destinatario de su amenaza.

Enzo López le respondió: "¿A quién querés que le rompa la gorra gordo, qué guacho te debe plata ahora...?".

Al día siguiente, Pelaitay insistió: "Amigo, haceme un favor y serás recompensado...pasa por la peluquería y decile a Mati que te mandé yo a buscar plata, a ver qué te dice, que yo estoy solucionando unos bondi o mandale chamuyo, corte como que yo estoy medio enfierrado, como que estoy buscando uno, estoy apretando a uno, decile, eh ... que ando medio alterado mejor que vayas vos porque si voy yo va a ser para cagada o algo así, asustalo...".

Enzo López contestó: "...bueno, bueno, aguantame, dame diez y voy y le caigo y bueno y le caigo de cheto fue se la re pudro, eh... me hago el loco yo, me hago como que estamos alterados los dos fue ... que se asuste fue, lo voy a asustar, ahora en diez voy para allá, gato me abrigo y voy para allá. Boludo, si hay que romperle la boca avisame, boludo, vos sabes que yo estoy con vos, anoche te hice la segunda y sabelo que hoy te hago la segunda de nuevo".

"Si no me querés ver preso haceme ese favorcito por favor, si voy lo voy a terminar matando y no quiero", remarcó Pelaitay.

Violento y amenazante

Para la Justicia quedó suficientemente acreditada la participación necesaria del infante de Marina Enzo López en el comercio de drogas (con penas de 6 a 20 años de prisión).

"Llevando a cabo conductas violentas y amenazantes, incluso mediante la utilización de armas, para obtener que sus compradores le paguen el dinero de las deudas que contrajeran por la compra de estupefacientes", sostuvo la Cámara Penal, con los votos de los jueces Gustavo Barbieri y Pedro Morán.

Las conversaciones han sido reconocidas como propias por el acusado, aún cuando les restó importancia y les dio otro sentido.

"Puede leerse que -en el marco de diálogos en los que se advierte que Enzo López se abastece de estupefaciente que le provee Pelaitay- que éste último le indica personas a las que debe amedrentar para que paguen las deudas", agregó la Cámara.

También surge de otra conversación, en marzo de 2019, que Enzo López ofrece sus servicios como "soldadito" para que Pelaitay se lo haga saber a un hombre apodado "Paisa".

Quedó plasmado que Enzo López, a su vez, reconoció algo más grave en las conversaciones: que había "retirado" al menos un arma de la Base para su cometido delictivo, aunque después lo negó en su indagatoria.

"Puede advertirse no solo la cotidianeidad de las conversaciones entre los dos sujetos, sino la permanencia en el tiempo de los diálogos sobre la necesidad de golpear gente o amenazarlos para obtener el pago, surgiendo clara la función de cobrador que se imputara a Enzo López", expresó la Cámara.

La Justicia también destacó "la necesidad" que reviste en comercios ilegales, como el narcotráfico, "contar con medios violentos" como los que cumplía Enzo López.

Y tomó como agravante su condición de infante de Marina y su "oferta" de armas que -según decía- "había sustraído del arsenal de la Base Naval", lo cual revela "alto grado de disvalor".

Su conducta

A Jorge Fabián López, uno de los hermanos policías, también le confirmaron la preventiva por su encubrimiento al negocio de Pelaitay.

Se le imputó no haber promovido la investigación, ni haber denunciados los delitos que conocía.

También hubo diálogos comprometedores, incluso con la apelación a engañosas palabras clave para confundir, en este caso ligadas a videojuegos.

"Amigo no me segundeas y le preguntas al Carri si tiene dos joystick por favor", le dijo López en una oportunidad a Pelaitay, porque dijo que "no le vende toda la cantidad " y que le pide que "por el precio mínimo complete el juego".

Pelaitay le dio a entender que ese supuesto vendedor alteraba la cantidad de droga, al responderle: "parece que editan los juegos".

Remarcaron que su función en la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) "impacta en la gravedad de sus conductas", porque esa dependencia tiene, dentro de sus competencias, "la de indagar y obtener información sobre delitos tal como aquellos sobre los que él tenía conocimiento".

Esa referencia de la Cámara Penal tiene que ver con que, al ser integrante de la DDI, el expolicía tiene "una importante función", justamente con el objetivo de desarticular "organizaciones y actividades delictuales y tareas de investigación criminal" de estas características.

Por ese motivo la Justicia entendió que no correspondía la excarcelación de los dos hermanos y decidió mantenerlos presos al menos hasta el juicio, teniendo en cuenta que la pena en expectativa no será de ejecución condicional.

Otro hermano, beneficiado

Tercero. A Leonardo López, hermano policía de los detenidos, se le revocó la preventiva y fue excarcelado, al no surgir que tuviera conocimiento de la comercialización de drogas.

Alcance. Sí se estableció que tenía alguna deuda por compra de droga para su hermano Fabián, pero sin referencias sobre otros "vendedores". Por otro lado, entró en la Policía en febrero de 2019, poco antes de mantener esas charlas.

Situación. Entendió la Justicia que no era necesario mantenerlo preso, aunque sigue ligado al proceso y con reglas de conducta.

Otros. La Cámara también revocó la preventiva de otros dos detenidos: Matias Vargas y Walter Rodríguez (imputados solo por tenencia simple de drogas).

Condena. A Pelaitay, en tanto, lo condenaron el año pasado a 5 años de prisión y esa pena se unificó con la anterior, para dictarle una sentencia única de 8 años y 10 meses, que actualmente cumple en la cárcel.