Nutrir pasturas, otro aporte clave para mejorar los sistemas ganaderos

Redacción de La Nueva.

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“Los sistemas pastoriles son muy complejos y la nutrición es clave para mejorarlos, no sólo en la biomasa área sino también en la nutrición de la raíz, que es fundamental para las pasturas y para la captura de carbono en el suelo”.

Lo aseguró la Ing. Agr. Mirta Toribio, del departamento de I+D de Profertil y miembro de Fertilizar AC, en el marco del Simposio Fertilidad 2023 realizado la última semana en el Centro Metropolitano de Rosario, en la provincia de Santa Fe.

Ing. Agr. Mirta Toribio.

Del panel relacionado con la necesidad de nutrir el suelo en el contexto de intensificación de los sistemas pastoriles para lograr mejores sistemas ganaderos, que moderado justamente por Toribio, también participó la Ing. Agr. Alejandra Marino, de la Universidad Nacional de Mar del Plata.

“Los sistemas pastoriles pueden ser más amigables con el ambiente, ya que permiten secuestrar más carbono y mitigar emisiones de los animales”, sostuvo.

Marino admitió que, aun cuando la ganadería es clave en la seguridad alimentaria, también es una actividad que está cuestionada por cuestiones ambientales.

En este sentido, aseguró que la fertilización de pasturas es una estrategia viable para mitigar el impacto ambiental de la ganadería.

“Se puede lograr a través de la planificación del manejo nutricional para optimizar recursos, ya que la actividad, además, redundaría en mayor producción y más rentabilidad.

En materia productiva, Marino graficó que las pasturas bien manejadas pueden aportar 12.000 a 15.000 kilos de materia seca por hectárea por año (kg/MS/ha/año).

Ing. Agr. Alejandra Marino.

“Sin embargo, en la región pampeana estamos produciendo 50 % del pasto, cuestión que no tiene que ver con la sequía que, según estudios, explica sólo el 20-30 % de la caída (en productividad), ya que el resto es por deficiencia de manejo y por la deficiencia nutricional”, explicó.

“En ese escenario, además, el abastecimiento de nutrientes es insuficiente”, agregó.

Marino apuntó, principalmente al fósforo y al nitrógeno, como los más limitantes, con la cuestión adicional de que esa deficiencia también afecta el crecimiento radical; por ejemplo, en el caso de la alfalfa.

“Así, en el caso del fósforo el agregado de fertilizante fosfatado suele incrementar su disponibilidad en el suelo, la concentración en las plantas y, consecuentemente, la producción de forraje”, aseguró.

Como guía, Marino indicó que una disponibilidad de P inferior a 18 ppm de fósforo Bray es insuficiente para abastecer el crecimiento de una alfalfa con producciones esperadas de aproximadamente 15 tn/MS/ha/año.

Por la positiva, con la aplicación de P, si se cosecha convenientemente, el forraje producido podría lograr una producción de 7 a 13 kg carne/kg por fósforo aplicado o 100 a 200 litros de leche por kg/P.

En el caso del nitrógeno, la especialista recordó que es el nutriente que, generalmente, más limita el crecimiento vegetal, por lo cual una dosis de 50 kg N/ha —aproximadamente 110 kg urea/ha— podría generar una respuesta de 17 kg MS por kg de N.

“Por otro lado, los nutrientes consumidos por el ganado vuelven al sistema en forma de heces y orina, situación contraria a lo que ocurre con el corte de las pasturas para hacer reservas, lo que genera una remoción de hasta 70- 80% de la biomasa aérea de las plantas sin retorno de nutrientes”, explicó.

“Esto debe ser tenido en cuenta al momento de planificar las estrategias de fertilización”, amplió.

El objetivo del manejo adecuado de suelos y nutrientes es limitar los procesos de degradación por procesos de producción y evitar pérdidas innecesarias.

Para armar ese plan, Marino recomendó hacer diagnóstico; controlar el aporte de fósforo para aprovechar adecuadamente el N mineralizado; aumentar tasas de crecimiento escalonando la oferta de forraje, que no todo el campo sea fertilizado de igual manera, y ajustar la dosis de nutrientes aplicados sin perder efectividad.

En otro lado del panel, la Ing. Agr. Elena Patrón de Rodó, de Uruguay, sostuvo que la ganadería pastoril intensiva mejora la fertilidad del suelo, además de que la pastura es el alimento más barato para alimentar a los vacunos.

“Incluso, puede ser un factor fundamental en la recuperación de la fertilidad de los suelos por incrementos en los contenidos de la materia orgánica del sistema”, dijo.

“El pastoril es un sistema sustentable ambientalmente”, aseguró.

Ing. Agr. Elena Patrón de Rodó.

En números, Patrón de Rodó describió que los fundamentos del sistema de 1.000 kilos de carne por hectárea, o 12.000 litros de leche por hectárea a pasto, se basan en que el forraje producido sea pastoreado directamente por los animales, que devuelven 90 % de lo consumido al lugar. También, que estas pasturas sean una mezcla de gramíneas y leguminosas, fertilizadas con los nutrientes necesarios para lograr 15 ton de M.S/ha.

Según comentó la especialista, corrigiendo los déficits de nutrientes se puede llegar a producir 4 o 5 veces más por unidad de superficie, tanto en materia seca, como en la productividad animal, con el agregado de que al aumentar la producción baja el costo de la MS (será de mayor calidad).

“El objetivo del manejo adecuado de suelos y nutrientes es limitar los procesos de degradación por procesos de producción, y evitar pérdidas innecesarias. Es decir, hay que apuntar a lograr un balance de nutrientes”, comentó.

En materia productiva, las pasturas bien manejadas pueden aportar entre 12.000 a 15.000 kilos de materia seca por hectárea por año (kg/MS/ha/año).

Para Patrón de Rodó, una buena nutrición significa la fertilización completa y balanceada de todos los elementos (N, P, K, S, Ca, Mg, B, Zn).ç

Además, alertó que la no reposición de nutrientes gradualmente acidifica el suelo, y disminuye la MS y el rinde del cultivo siguiente.

La expositora uruguaya propuso que el sistema de pastoreo permita utilizar la mayor parte del forraje producido (al menos el 80 %) bajo el formato pastoreo directo, con altas cargas, pero con una ocupación no mayor a las 24 horas con un uso del 80 % y que las deyecciones queden distribuidas en las parcelas pastoreadas.

Al gran suelo argentino, ¡Salud!

El Simposio Fertilidad 2023 se cerró —la última semana— con una concurrencia récord en el Centro de Convenciones de la ciudad de Rosario, en Santa Fe.

Fertilizar Asociación Civil, la entidad cuyo objetivo es promover el manejo responsable de la fertilización de cultivos, organizó el 16° encuentro bajo el lema Al gran suelo argentino, ¡Salud! Participaron más de 1.300 personas, a las que se les sumaron 1.000 visitantes a la transmisión virtual.

El auditorio de Fertilidad 2023 en el Centro Metropolitano de Rosario, Santa Fe.

Al finalizar el simposio, el director académico del encuentro, Dr. Fernando García, enumeró los mensajes que quedaron tras los dos días de disertaciones:

—Satisfacer la demanda futura de alimentos requiere de la intensificación sustentable de los sistemas de producción de cultivos. “Es un tema que vamos a tener que perseguir”, dijo García.

—La nutrición correcta tiene un rol fundamental para cerrar brechas de rendimiento. “No es la única razón, pero tiene un rol fundamental”.

—Usemos las bases científico-técnicas de la nutrición responsable. “Están disponibles”.

—El potasio ¿es el quinto nutriente deficiente? “Atención, ya aparece como problema en zonas de Entre Ríos y está instalado en Uruguay”.

—Existe una pila de datos. “Avancemos en análisis y aplicaciones”.

—Biológicos más foliares más especialidades mejoran eficiencias y complementan la nutrición de cultivos. “Animémonos. Hay que usar todos esos nuevos desarrollos y ver modos de acción y resultados para complementar nuevos formatos de nutrición y manejo”.

—La nutrición balanceada permite mejores sistemas ganaderos y ser mejores agricultores. “Nos queda mucho por avanzar en la producción de pasto y que eso se transforme en mayor producción ganadera, pero también avanzar en mejorar la producción de los cultivos que los siguen en la rotación”.

—En la campaña 2023-24 (y siempre), el éxito dependerá del buen diagnóstico. “Fue la gran premisa del simposio: diagnosticar es la clave del éxito”.

—La información local también es clave para el éxito de un programa de nutrición. “Esto es así porque las respuestas van a variar según la zona”.

“Quedamos muy felices por otra edición del simposio. Hubo una gran convocatoria de público y de prensa, y la participación de especialistas indiscutidos en el ámbito de la nutrición de cultivos de la región”, dijo la Ing. Agr. Ma. Fernanda González Sanjuan, gerente ejecutiva de Fertilizar AC.

Fernando García (izq.), María Fernanda González Sanjuan y Roberto Rotondaro.

“Pensamos este espacio para contribuir a alcanzar la mejor agricultura posible, que potencia la producción, genera alimentos de calidad y cuida el ambiente”, añadió.

El simposio tuvo como objetivo principal presentar y discutir conocimientos e información actualizada en el manejo de los nutrientes para una agricultura sustentable en lo productivo, ambiental y social. Durante dos días, 6 oradores internacionales y más de 20 referentes de nuestro país discutieron aspectos relevantes en cuanto al manejo de suelos y cultivos y a la aplicación de los cuatro requisitos de uso responsable de nutrientes: aplicación de fuente correcta en dosis, forma y momento correctos.

“Desde Fertilizar AC continuaremos impulsando diversas iniciativas tendientes a promover la correcta nutrición de cultivos y a destacar el rol clave que tiene la tecnología de fertilización para alcanzar un manejo eficiente y una producción rentable y sustentable a la vez”, aseguró Roberto Rotondaro, presidente de la entidad.
“Y siempre teniendo como eje central de todo nuestro trabajo la conservación del recurso suelo”, agregó. (Prensa Fertilizar AC).