Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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María del Carmen Vaquero: “Disfruté todo lo que hice en la Universidad”

Vicerrectora durante ocho años lideró la subsecretaría de Derechos Humanos y fomentó, entre otras iniciativas, la licenciatura de Turismo.

Por Walter Gullaci wgullaci@lanueva.com

   María del Carmen Vaquero dejó su impronta en el ámbito universitario, donde además de vicerrectora durante ocho años lideró la subsecretaría de Derechos Humanos y fomentó, entre otras iniciativas, la licenciatura de Turismo.
   Hoy, ya jubilada, disfruta ser abuela en tiempos de pandemia y no deja de ofrecer sus miradas profundas sobre la educación, las políticas de género, el peronismo que profesa y otros matices que involucran a nuestra sociedad.
   Al cabo, una verdadera líder.

   1. “Arranqué como alumna en la Universidad Nacional del Sur, acá me recibí de geógrafa, fui la primer presidenta del Centro de Estudiantes de Geografía… Siempre participé de la política universitaria, no partidaria, más allá de que una tenga su ideología. Fui directora decana del departamento de Geografía. Tras mi paso por la Universidad del Comahue vine a Bahía con la idea de instalar la carrera de Turismo en la UNS. Me llevó bastante tiempo. Hasta que logramos instaurar la licenciatura, un hijito que amo mucho”.

   2. “Lo mío con el peronismo nace por una cuestión de sentimiento. Mi mamá (María Esther Boscardín), desde Villa Iris que es de donde provengo, viajó como reina del Campo a Buenos Aires y se sacó una foto con Perón. ¡Me crié con esa foto! Ella peronista, siempre hablando del estatuto del peón del campo, las jornadas de trabajo y las conquistas sociales, y mi papá, un ferroviario radical, muy antiperonista y gorila. ¡Una mesa bárbara en mi casa! O sea, la grieta existió siempre. Me acuerdo de muchas discusiones los domingos entre un tío y mi papá”.

   3. “Para mi Raúl Alfonsín, siendo radical, representaba lo que yo quería del peronismo como modelo. Y lo voté, lo amé y lo defendí. Llegué a preguntarle personalmente sobre aquella decisión del punto final (señala una foto en la que aparece junto al ex presidente). Me dijo: “Mirá hija, no me quedó otra. No te creas que me gustó”. Yo lo perdoné. Porque cuando se está en la gestión, y a mí me ha tocado, la mirada es diferente. Cuando vos no estás comprometido, y hablas sobre que hay que hacer esto o aquello, es distinto a cuando se gestiona y se hace sólo lo que se puede”.

   4. “Yo fui la primer vicerrectora de la UNS. No sufrí inconvenientes por ser mujer en ese cargo, pero de alguna manera lo sentía… Nosotros, en el ámbito universitario, no tenemos diferencias, por ejemplo, en cuanto a los sueldos. Pero debía demostrar permanentemente que era merecedora del cargo que tenía, aunque sin descollar demasiado. Había que tener un cierto equilibrio. Y todos los hombres que ostentaban un cargo se sentían con un derecho, diría paternalista, de aconsejarte a sugerirte, pero yo a ellos no”.

   5. “Durante un encuentro al que asistí entre mujeres universitarias de Latinoamérica, asumimos por entonces que las mujeres con cargos de rectoras y vicerrectoras no llegaban al 10 por ciento”.

   6. “Las mujeres, hay que reconocer, somos machistas, porque nos criamos en un ámbito machista. ¿Por qué son machistas los hombres? ¿Quiénes los crían? Las madres. ¿Y las madres qué somos? Mujeres. Y somos terribles y malas con las propias mujeres. En el caso de Cristina, por ejemplo, hay mucho de envidia. Es una mujer muy inteligente. Y a veces hace que la propia mujer se mire en el espejo y asuma cuánto le falta y cómo le gustaría parecerse”.

   7. “¡Disfruté tanto todo lo que hice en la Universidad! Ser docente, la gestión, y tuve la suerte que mi familia, sobre todo mi marido, me apoyara. Tuve que viajar mucho, incluso hasta a China, donde participé de un encuentro entre mujeres líderes en educación superior”.

   8. “Amelia, mi nieta, me tiene tonta. Yo me jubilé siendo vicerrectora, y luego seguí en la Universidad cuatro años más ad honorem como subsecretaria de Derechos Humanos. Había que reforzarla y encaminarla. Por suerte ganó nuestra lista Blanca y yo, encantadísima, trabajé a full. Hasta que luego perdimos otra elección y de pronto me encontré con que tuve que irme a mi casa. Se cortó. Igual seguí dirigiendo tesis, siendo jurado, asesorando en turismo, pero el regalo de Dios fue Amelia. Con esos ojazos iguales a los de su madre, me hizo ver que hay otra vida además de la Universidad”.

   9. “Sí, me estuvieron espiando (desde la Agencia Federal de Inteligencia). ¡Y cómo se habrán aburrido! Cuando me enteré a través de mi hijo (el economista Mauro Trellini), desde su trabajo en La Brújula. Me dio mucha bronca porque me retrotrajo a la década del ’70, donde amigos y conocidos desaparecieron. Había que dormir con cierto temor, quemar libros, sin haber estado en nada extraño. Sólo por aparecer tu nombre en una agenda te llevaban y desaparecías. Yo realmente pensé que aquellos métodos de espiarte no iban a volver nunca más. Está bien. No me sorprendió Macri. Si es un obsesivo que espía a su propia familia y empezó con esa práctica siendo empresario”.

   10. “Memoria, verdad y justicia es defender los derechos humanos, pero también trabajar en temas como la inclusión, los adultos mayores, el tema de la igualdad de género, la discapacidad, un tema éste que había que trabajarlo mucho para incluir en la Universidad a alumnos ciegos, sordos… Y capacitar a los docentes. De eso nadie habla. Tuvimos un alumno ciego en biología que es una eminencia. El mismo le enseñaba a los profesores la mejor manera de cómo había que enseñarle”.

   11. “Es conmovedor conocer a Estela de Carlotto. Siempre me generó mucho respeto. Es muy cálida, no hay venganza en ella. No sé cómo yo o cualquiera de nosotros reaccionaría si nos hacen desaparecer a un hijo”.

   12. “Soy una mujer agradecida a la vida. Siempre soñaba en mi pueblo con la posibilidad de ingresar a la Universidad. Por eso defiendo el ingreso irrestricto y gratuito. Si no hubiera sido así no hubiera llegado a ser universitaria. Además, soy una taurina tenaz. Siempre que me propuse metas, las cumplí. Y me encanta devolverle a la sociedad al menos algo de todo lo que me dio”.

   Vos también podés proponer un líder para entrevistar en nuestros próximos episodios. Escribí un correo a contenidos@lanueva.com con el asunto LÍDERES o utilizá el hashtag #UnLíderEnBahíaEs en las redes sociales junto al nombre del candidato.