Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

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"La inflación se puede controlar, el problema es que no estamos empezando"

El economista Gonzalo Semilla dijo que para eso es necesario un "consenso político" y que "en Argentina no estamos acostumbrados a pensar en el largo plazo, vamos tapando agujeros constantemente".

Fotos: Pablo Presti-La Nueva.

   El economista Gonzalo Semilla dijo esta mañana que, de acuerdo a la bibliografía, la inflación se puede controlar "en seis, siete u ocho años", pero advirtió que en Argentina "no estamos empezando porque para eso se necesita un consenso político".

   "Cuando no hay buen manejo de tus cuentas y el plan económico se mezcla con decisiones políticas, el mensaje es de incertidumbre. Eso implica malas expectativas y el mercado toma sus propias decisiones. Eso viene pasando hace mucho", amplió.

   En un mano a mano con La Nueva., el jefe del Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca Argentina (CREEBBA) contó que "con respecto a la economía local tenemos una inflación cercana al 50 %".

   "En Argentina el año que viene está pronosticada una inflación del 48 % y de un 38 % para el 2023. El impacto de la pandemia es real, pero acá es un mal crónico que asigno al referente en un país que es el Gobierno, que es el que manifiesta el plan", señaló.

   En diálogo con el periodista Maximiliano Allica, Semilla recalcó que "en Argentina no estamos acostumbrados a pensar en el largo plazo, vamos tapando agujeros constantemente" y que es indispensable un acuerdo con el FMI para empezar a salir de la crisis económica.

   "Un acuerdo es imprescindible. El año que viene vamos a tener 20.000 millones de intereses a afrontar. No hay otra salida o vamos al default. Las partes se están acercando, pero ante una deuda tan grande, el Fondo va a monitorear todos tus movimientos; es natural. Y el gobierno actual tiene resquemores, no es tan sencillo pero se va a alcanzar. Esto va más allá de los dos años de gobierno que quedan, hay que pensar en el consenso", detalló.

   "El problema de las crisis en Argentina es que son muy agresivas, mucha gente cae en la marginalidad. Acá, ante el déficit crónico no tenés reservas y el mercado internacional no te presta. ¿Cómo es? El Gobierno emite y ese un problema porque eso es inflación", subrayó.

   "El ajuste tiene un costo de oportunidad muy alto, pero ¿quién hace el sacrificio? No se puede mirar a las clases media y baja, miraría hacia arriba", apuntó.

   El economista dijo también que "Argentina es uno de los países que más cantidad de impuestos tiene" y que "el 10 % de ellos recaudan el 90 % del total, el resto son chiquitos".

   "El tema es cómo me devolvés eso que pago, no se ve", puntualizó.

   Asimismo, sostuvo que el actual congelamiento de precios "es el plan más grande de los últimos tiempos", alcanzando a unos 1.400 productos.

   "Acá en Bahía fue muy alta la variación de precios hasta la tercera semana de octubre. Sucede que los empresarios se anticipan porque saben qué pasos va a seguir el Gobierno", afirmó.

   "Las grandes empresas, que tienen muchos productos, activan los productos que están por fuera del congelamiento. Eso termina pasando. Y otra cosa es el control, algo imposible. Entonces siempre hay disparidad", reparó.

   Por último, el profesional manifestó que "los argentinos estamos locos con el dólar".

   "Pensamos en dólares. El argentino no quiere ahorrar en pesos. La opción es ladrillos; el resto, o gasta el peso o compra dólares, pero cada vez son más caros...", sostuvo.

   "Hay una economía informal muy grande que no mira los distintos dólares, solo mira el blue y sobre ese hace transacciones. Y eso genera un desorden económico enorme", completó.