Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

Bahía Blanca | Viernes, 26 de abril

“Queda mucho por hacer por los trabajadores rurales”

El diputado nacional Pablo Ansaloni, representante de la UATRE, se refirió a las problemáticas del sector.

Por Pablo Andrés Alvarez / palvarez@lanueva.com

   Mejorar las condiciones laborales y erradicar el trabajo en negro en el sector agropecuario son objetivos que se fijó para su mandato Pablo Miguel Ansaloni, diputado nacional y representante de la Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE).

   Nacido el 9 de mayo de 1971 en Colón, provincia de Buenos Aires, Ansaloni creció junto a Gerónimo Venegas y Ramón Ayala, secretarios generales de ese gremio, recientemente fallecidos.

   “Mi compromiso es hacia sus memorias y con los trabajadores rurales, que hoy ven como sus derechos son vulnerados y, en su mayoría, son obligados a desempeñar labores en condiciones lamentables”, señaló a “La Nueva”.

   Según afirmó, ésta es una de las épocas más riesgosa.

   “Los trabajadores del campo no pararon nunca. Y en estos meses muchos trabajadores se tienen que trasladar de provincias para poder desarrollar sus labores. Y, lamentablemente, viven momentos dramáticos. Por ejemplo, en Mendoza, hace pocos días, más de 200 compañeros tenían que dormir dentro de los micros, a la vera de la ruta, por decisión de un empleador. Esas son imágenes bastante comunes en el interior del país, que se deben erradicar”.

   Ansaloni remarcó que, cuando se inició la pandemia, se realizó un trabajo en conjunto con distintos ministerios que dieron sus frutos. Pero que actualmente los controles se flexibilizaron.

   “En marzo, cuando se inició la pandemia, pudimos hacer un trabajo coordinado, con el compromiso de muchos gobernadores y los ministros de Trabajo, Transporte y Agricultura de la Nación. Pero ahora se complicó bastante, tanto por la necesidad de trabajar que hay como por la avaricia de algunos empleadores. Por eso son necesarios los controles, para que la gente pueda trabajar en forma segura y, fundamentalmente, con las condiciones necesarias”.

   El actual secretario general de la UATRE, José Voytenco, denunció hace pocos días que en nuestro país existen más de 500 mil trabajadores del sector sin declarar.

   “Lo venimos diciendo desde la gestión de Venegas, se repitió en la de Ramón Ayala y ahora lo ratifica Voytenco. Y es así. Nunca nos quisieron escuchar. Y lo peor es que trabajan en situaciones deplorables. Nuestro gremio siempre denunció estas cuestiones, haciendo mucho énfasis en lo que sucede en Corrientes, Salta, Jujuy o Misiones, donde abundan este tipo de cosas”, manifestó Ansaloni.

   Y agregó: “Yo soy miembro de las comisiones de Trabajo y también de Agricultura de la cámara de Diputados y lo digo permanentemente. Si lográramos erradicar los empleos en negro, no sólo de los rurales, nuestros jubilados vivirían mucho mejor. Una de las fallas del sistema, me parece, está allí”.

   Ansaloni añadió que la problemática no sólo radica en la situación de no blanquear a los empleados, sino también en las denigrantes condiciones de trabajo que se les imponen.

   “Específicamente, en el trabajo rural, no sólo es trabajo en negro, sino las condiciones, en muchos casos hacinados o durmiendo a la intemperie. Por eso, creemos que este es un buen momento para discutir el trabajo en la pospandemia. Y en eso se tiene que involucrar el movimiento obrero, con una mesa de consenso que involucre a todas las partes”.

   En ese sentido, señaló que se siente escuchado por el gobierno de Alberto Fernández, a través de Sergio Massa.

   “Con el gobierno se trabaja en equipo, tanto con los ministros de la Nación como de la provincia. El diálogo es muy bueno. Siento que muchos de los reclamos que hemos hecho sobre el sector rural se han canalizado y se trabaja para solucionarlos. No me olvido que fueron los trabajadores rurales los que me pusieron en esta banca y a ellos me debo. En ese sentido, queda mucho por hacer por ellos”.

   Ansaloni se refirió al futuro del gremio que lo vio nacer.

   “Con los fallecimientos de Gerónimo Venegas y Ramón Ayala perdimos dos conductores inigualables, que han hecho muchísimo por los trabajadores rurales. Lograron unirlos para que nuestro gremio crezca y pudiera representarlos de la mejor manera. En lo personal, fueron golpes muy duros, porque me formé junto a ellos. Incluso, con Ayala éramos nativos de Colón, así que la relación era casi de hermandad”.

   “Tenemos que salir fortalecidos de esta situación, buscando la unión institucional. Obviamente que será un antes y un después, pero han dejado el camino marcado. Ahora se debe legitimar la conducción a través del voto y luego encolumnarnos todos detrás de esa nueva figura, porque actualmente se están manejando con mucha arbitrariedad”.

   A su vez, señaló que deben estar preparados para la reactivación del sector agrícola.

   “Los trabajadores rurales en negro son nuestro mayor desafío. No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras ellos soportan arbitrariedades y condiciones de trabajo infrahumanas. Estamos muy esperanzados en que el sector agrícola crezca y se desarrolle en la pospandemia. Por eso debemos estar atentos para que los trabajadores sean reconocidos como se debe”.

   En ese sentido, Ansaloni presentó varios proyectos de Ley.

   “Hemos presentado distintos proyectos. Algunos para modificar artículos de la Ley 26727 que nos ampara, pero esta ley contempla estas problemáticas. El gran problema es que no se hace cumplir”, cerró.