Por primera vez en quince años, no se esperan nuevas inversiones chinas en Bahía
Mientras que los pequeños almacenes padecen la competencia contra los poderosos supermercadistas asiáticos, estos aseguran que no atraviesan un buen momento y que además de no esperar nuevas instalaciones, muchos de los que están ya piensan en irse del país.
Federico Moreno/ [email protected]
Santiago Vecchi, proveedor de servicios inmobiliarios y comerciales a comerciantes chinos desde hace más de una década, explicó que el panorama para estos no es el mejor.
“Contando todo el partido actualmente son un poco más de 90, el último está por abrir en O’higgins al 300, pero después de ese no hay ni proyectados ni presupuestados, algo que nunca había sucedido”.
Sobre los motivos del freno inmigratorio y de inversiones, el abogado fue tajante: “Se debe a la situación del país, por un lado el consumo desacelerado tiene un impacto inmediato en las ganancias, y por otro la devaluación hizo que si antes ellos ganaban 10 dólares a fin de mes, ahora están ganando 5. Y ellos tienen deuda en China, aclaro que con privados, no con el Gobierno como se dijo históricamente, e imaginate que si antes debían $100 ahora deben $200”.
Santiago Vecchi.
“Yo trato de explicarles que esto después se acomoda, pero ellos no entienden cómo se va a acomodar si el dólar nunca bajó. Se quieren ir antes de que el dólar llegue a 70. Y nosotros los argentinos por ahí llegamos al dólar a 70 y en unos meses lo naturalizamos. El pánico entre los chinos está muy instalado, mientras que antes no tenían ni miedo ni dudas. Era un negocio de mucho laburo y mucha ganancia, hoy tenés unos 15 que si pueden venden ya mismo. Otros ya lo hicieron y se volvieron a China. Hoy son gente endeudada que no sabe cuántos años va a demorar en pagar la deuda”.
“Si los chinos subsisten ante esta crisis es porque no venden autos de lujo, sino comida y productos de primera necesidad. Es un negocio que ya no rinde lo que rendía, si vos tenés toda una familia afectada a un solo comercio, ya no sé cuánto negocio estás haciendo. Ellos hacen el esfuerzo pero para hacer una diferencia, no para ganar sueldo de empleados”.
Para colmó, según Vecchi, en épocas duras como la actual, “Fisco, Ministerio y sindicatos parece que solo trabajan para los chinos ahora. Sabiendo la malaria que hay, en el centro no controlan nada, porque a una mujer que vende pulóveres en Alsina y paga 50 mil pesos de alquiler, no le podés caer con una determinación de DGI porque se debate entre cerrar o no y la arruinás. En cambio a los chinos les tiran a matar, con todo lo que no les tiran a los argentinos, sin piedad”.