Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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"Nací en una ciudad que vive el básquet de una manera muy especial y diferente", dijo Manu

La 20 de los Spurs ya cuelga en lo alto del AT&T Center.

Fotos: Reuters y @DiegoMorini

   A la 1.07 de hoy, en el AT&T Center de San Antonio se descubrió la novena camiseta histórica de los Spurs y se trató nada menos que la 20 que vistió el bahiense Emanuel Ginóbili durante 16 temporadas.

   En un acto que se realizó en el centro de la cancha, junto a Manu estuvieron su esposa Marianela Oroño y sus hijos Dante, Nicola y Luca.

   Y acompañaron Tim Duncan, Fabricio Oberto, Gregg Popovich, Tony Parker y RC Buford.

   “En Argentina decían que no pasaba nunca el balón. Pero que quede en claro que no tenía ningún problema”, bromeó Tony Parker.

   “Único, esa es la palabra que voy utilizar para definirte”, elogió el base.

   Después llegó el turno del técnico Popovich.

   “Cuando Manu llegó a nuestras vidas le dije a Tim 'tenemos a este jugador que ha hecho un buen trabajo, debe hacerme el trabajo más fácil, tiene unas condiciones espectaculares'. Y Tim dijo 'sí, sí, perfecto'".

   "Llegó Manu, tenía una lesión en el tobillo. Lo sentamos y esperamos un mes. Cuando regresó, dijo Duncan: '¿Y éste quien es?”, recordó Pop.

   Y siguió con los elogios.

   “El equipo olímpico argentino fue uno de los mejores equipos que vi en mi vida”, Pop

   “Me convertí en un mejor técnico, porque me dediqué a disfrutar de verte jugar”, le dijo.

   “Fue la decisión más importante de la franquicia, sin él no hubiéramos conseguido todo esto”, destacó Popovich.

   Tim Duncan recordó los inicios de Manu en la franquicia.

   “Bowen le pegaba de lo lindo. Y nunca se quejó”, aseguró.

   Y fue directo a su corazón.

   “Fuiste un visionario; te anticipabas antes de que las cosas sucedieran”, le dijo Duncan.

   Después que hablaron los acompañantes, pasaron un video y el estadio coreó: “Olé, olé, olé, olé... Manu, Manu...”.

   Y él tomó la palabra.

   “Quiero reconocer de donde salí y la suerte que tuve”, destacó Manu.

   "Muchas personas brillaron en el camino, para poder alcanzar todo esto. Nací en una ciudad que vive el básquet de una manera muy especial y diferente. ¡Yo no pedí nacer ahí!", dijo.

   Manu se quebró al momento de dirigirle la palabra a sus padres, agradeciéndoles la libertad que le dieron para dejarlo elegir el camino.

   También, sonrió hablándole a sus hijos, a quienes les dijo que si lo venían llorar era de alegría. Mientras que resaltó la figura de su mujer, a quien consideró fundamental en su carrera.

   Tuvo un párrafo para los hinchas argentinos presentes en el estadio y para todos los que estaban mirando por televisión, agradeciéndoles las noches que permanecieron despiertos hasta altas horas para seguir los partidos.

   Mientras que se dirigió a los compañeros de la Generación Dorada.

   “Sabíamos que ganando la íbamos a pasar muy bien, pero perdiendo íbamos a fortalecer nuestro vínculo”, opinó.

   Después de una noche cargada de emoción, Manu reunió a familiares y amigos, para la última foto, más íntima, ya con el estadio despoblado.