El volumen cosechado de trigo y cebada sufrirá una gran caída en toda nuestra región

Redacción de La Nueva.

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Hernán Guercio / hguercio@lanueva.com

   El Agrotour se viene desarrollando desde hace siete años por iniciativa de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, con el fin de realizar estimaciones a campo, de rendimiento y calidad previo al inicio de la cosecha, llevadas a cabo por especialistas en materia de granos, 

   En este caso, la última edición se llevó a cabo el 27 y 28 de noviembre, con la coorganización de la Cámara Arbitral de Cereales de Bahía Blanca.

   Las recorridas se realizan en forma paralela por tres circuitos productivos denominados Mar, Sierra y Pampa, en los cuales se recorren distintos establecimientos productivos del área comprendida en la zona de influencia del Puerto de Bahía Blanca.

   Los números y estimaciones a los que se arribaron, no hicieron más que confirmar los pronósticos que se venían realizando en los últimos tiempos: en nuestra región, la cosecha fina -que ya se está llevando a cabo- tendrá una fuerte caída en los números finales.

   Al finalizar los tres recorridos propuestos, se estimó un rendimiento promedio de 3.200 kilos por hectárea tanto para trigo como para cebada, tomando por base un muestreo de más de 200 lotes productivos. Estas cifras representan una caída del 26% y 35% -respectivamente- con respecto a los resultados obtenidos en la campaña pasada.

   Según la bolsa bahiense, esta fuerte disminución en los rindes estimados se debe mayormente a la falta de precipitaciones durante la etapa de macollaje de los cereales, a lo que se suma la obligatoria comparación con una campaña extraordinaria como fue la 2018/19. Por ello, la disminución de los rendimientos y superficie cosechable repercutirían negativamente en los números finales de ambos cultivos.

   La producción esperada de 3,08 millones de toneladas de trigo en el ámbito de influencia del puerto bahiense representaría una caída del 43% comparado con el volumen de la última campaña agrícola, mientras que las 1,52 millones de toneladas de cebada significarían una disminución del 53%.

   El circuito denominado Mar comprendió principalmente el sudeste de la provincia de Buenos Aires, incluyendo algunas localidades claves como Coronel Dorrego, Tres Arroyos, Necochea, Gonzales Chaves, Benito Juárez y Coronel Pringles.

   En este caso, el rendimiento promedio del cultivo de trigo se estimó en 3.800 kilos por hectárea, mientras que en cebada fue de 3.750 kg/ha, registrándose caídas del 25 y 30% -respectivamente- a los a los rindes estimados durante Agrotour 2018.

   La paridad en rendimientos promedios entre los dos cultivos se debe a que el trigo aprovechó de forma mas eficiente las precipitaciones del mes de noviembre.

   En cuanto al circuito Sierra, el rinde promedio en este recorrido comprendido por los partidos de Bahía Blanca, Coronel Pringles, General La Madrid, Olavarría, Tandil, Benito Juárez y Laprida, fue de 3.100 kg/ha para el cultivo de trigo, mientras que la cebada alcanzó 3.300 kg/ha.

   Ambos cereales presentaron una condición general de muy buena a buena en la zona norte, mientras que en el área sur el estado fue regular, e incluso se observaron lotes abandonados.

   En esta zona, la falta de precipitaciones durante la etapa vegetativa impidió el desarrollo de macollos, afectando el rendimiento potencial de los cereales. Se destacó la importancia y el impacto de un buen manejo por el efecto de la sequía, encontrándose grandes diferencias entre lotes dentro de un mismo ambiente agroecológico.

   Por su parte, el circuito Pampa comprendió cuatro tramos principales: Bahía Blanca, Macachín, Trenque Lauquen y Coronel Suárez.

   En este caso, la condición de los cultivos fue regular a buena debido al gran impacto de la sequía en la zona este pampeana y oeste bonaerense. En general, el rendimiento promedio de trigo y cebada para el total del circuito fue de 2.700 kg/ha (-27% con respecto al ciclo 2018/19) y 2.600 kg/ha (-39% con respecto a la campaña anterior), respectivamente.

   En general los cereales invernales presentan una fenología más avanzada que en los restantes circuitos, encontrándose un importante número de lotes con un avanzado grado de madurez e inclusive en condiciones de cosecha.

Qué pasó

   De acuerdo al informe, la campaña 2019/20 se inició con muy buenas expectativas y humedad en los perfiles durante la siembra.

   El área destinada a estos cereales invernales se mantuvo en toda la región. El trigo cerró la campaña con un aumento en la superficie sembrada del 3%, mientras que la cebada presentó una caída del 16% debido a precios poco atractivos y el alto stock de las malterías.

   En números, la superficie de trigo sembrada finalizó en 1,65 millones de hectáreas, mientras que cebada concluyó en 683 mil.

   Sin embargo, la sequía durante gran parte del ciclo vegetativo y reproductivo ocasionó una disminución del área con destino a cosecha. Los mayores daños por déficit hídrico se encuentran mayormente en el área correspondiente a la provincia de La Pampa, donde una gran parte del territorio se encuentra en emergencia agropecuaria.