La esclerosis múltiple no lo frenó: levanta peso y es Campeón Mundial en Las Vegas
Le diagnosticaron la enfermedad cuando tenía 14 años. Hoy, dos décadas después, el pigüense Martín "Coco" San Felice, se consagró número uno en categoría especial, en Levantamiento de Potencia, en EE.UU.
Martín San Felice, alias Coco tiene 34 años y desde los 14 convive con la esclerosis múltiple.
Con los denominados brotes de esta enfermedad degenerativa y crónica, puede tener distintos síntomas como temblores en el cuerpo, falta de equilibrio y disminución de fuerza, entre otros. Sin embargo, esto no lo frenó.
El pigüense acaba de ganar el Mundial de Levantamiento de Potencia, o Power Lifting, en Las Vegas, EE.UU. levantando 215 kilos, casi tres veces su peso corporal.
"Cuando me detectaron la esclerosis, me dijeron que tenía que hacer actividad física, porque cuando te quedas quieto, esto te gana", contó.
"Empecé el gimnasio y agregué la competencia como un plus siempre tratando de superarme", dijo.
Hace 7 años ininterrumpidos que participa de las competencias nacionales e internacionales.
El año pasado obtuvo el 8º puesto en el Mundial de Hungría y antes se consagró Campeón Argentino y Campeón Sudamericano (Brasil, 2016).
"No me importa salir primero. No quiero ganarle a nadie. Estar en el segundo mundial de levantamiento de potencia, siendo paciente de esclerosis múltiple es un logro personal. Una locura. Estoy más que feliz", dijo.
Martín aconsejó mirar hacia adelante.
"Si no hubiera hecho eso no estaría en Las Vegas. No digo que todos levanten pesas pero que hagan un deporte y no se queden quietos", señaló.
Este año se anotó en Categoría Especial porque por su enfermedad no estaba en en las mismas condiciones que un atleta de 82 kilos, que es su categoría, sin problemas de salud.
Por la medicación que toma y los síntomas que le quedaron tomó esta decisión.
"Ganar en Las Vegas es más que una medalla o un trofeo: ojalá esto le sirva a un montón de gente con esclerosis múltiple u otros problemas", dijo.
Así empezó todo.
Cuando tenía 14 años se despertó una mañana con el pie dormido. Y luego al otro día, y al otro. Sentía como si le apretara una media. Y le dolía la cabeza.
Sus padres, intranquilos, lo llevaron a varios médicos y, finalmente, en la Clínica Fleni, de Buenos Aires, llegaron al diagnóstico.
“Esta enfermedad de mierda no me va a vencer”, dijo Martín, al escuchar al médico.
Y cumplió.
Para alguien con su enfermedad es un desafío enorme competir a este nivel en una disciplina de fuerza en la que debe levantar el mayor peso posible en tres movimientos.
En este momento, Martín “Coco” San Felice, está paseando por Miami.
Su papá, Miguel Ángel, contó sobre sus logros.
“Solo quienes lo conocemos sabemos los esfuerzos que hace”, dijo.
“Va al gimnasio dos horas por día, con lluvia o con dolor de cabeza”, dijo.
La enfermedad ataca al sistema nervioso y no tiene cura. Sin embargo, Coco recibe una medicación paliativa. Esta medicina tiene un costo de 270 mil pesos mensuales, que cubre la obra social (Ioma).
“Tiene tanta garra. Te imaginás como estamos sus papás, super chochos”, confió.
“Para este viaje, hicimos todo a pulmón, tuvimos dos o tres sponsors, amigos del alma, y el resto lo juntamos nosotros”, comentó.
Martín hizo su primer torneo en Santa Rosa , La Pampa, en 2011, porque allí están sus coach Mariela Ortellado y Leticia Bertotto, dos destacadas a nivel mundial.
“Coco está bárbaro, trabaja como empleado municipal, algo que le dio mucho empuje, porque en un momento parecían todas malas”, destacó.
San Felice comentó que la familia sostiene un muy buen vínculo con la Asociación de Esclerosis Múltiple de Bahía Blanca.
El Mundial
Los padres vieron la competencia en directo, por televisión, a las 8 de la noche.
“Nos lloramos todo. Como dice él, entre tantas banderas, poner la Argentina en primer lugar es una emoción terrible, una experiencia única”, señaló.
“Es muy disciplinado. Tiene una dieta especial. Con su personalidad, con su manera de ser el tipo se la bancó. Se bancó algunos brotes que tuvo. La medicación lo único que hace es frenar la potencia de los brotes y espaciarlos”, dijo.
Martín "Coco" San Felice: un atleta especial, un ejemplo para tantos pacientes que hoy luchan por salir adelante.