Bahía Blanca | Miércoles, 09 de julio

Bahía Blanca | Miércoles, 09 de julio

Bahía Blanca | Miércoles, 09 de julio

Un Emmy, un puntaltense y un documental sobre el equipo de fútbol más racista de Israel

El exfutbolista Darío Fernández tuvo participación en la película "Forever Pure", que ganó como mejor documental político.

   Una película sobre el equipo de fútbol más racista de Israel y de cómo reaccionó su hinchada tras la llegada de 2 jugadores musulmanes, ganó el lunes un premio Emmy; y entre el reparto del film hay un puntaltense.

   El film se llama "Forever Pure" (Eternamente puro), ganó en la categoría documental político y retrata la intolerancia de los barras del Beitar de Jerusalén cuando en 2013 ese club incorpora a 2 jugadores chechenos musulmanes.

   Y el puntaltense es Darío Ezequiel Fernzández (ex Olimpo y otros) que en ese año revistaba como mediocampista en el Beitar, y que durante la película tiene destacada participación.

 

   "No entiendo por qué esta gente es racista. Son judios, siempre sufrieron el racismo", dice Fernández en una parte del documental.

   "Y estos pobres pibes vienen de otro país a ayudarnos, a intentar jugar al fútbol y se tienen que comer toda esta mierda", dice Fernández.

   Fernández se refiere a los chechenos Gabriel Kadiev y Zaur Sadayev. Cuando llegaron al club, los integrantes de la barrabrava "La familia" los rechaza porque no aceptan árabes en el equipo. "Que alguien les diga que no somos árabes", dice uno de los chechenos al principio de la película, que se puede ver en Netflix.

   Cuando Darío Fernández llegó al Beitar, lo único que sabía del club era que tenían una hinchada muy fanática, pero se encontró con una cultura y religiones muy diferentes. Me tuve que adaptar a ver a los jugadores rezar antes de los entrenamientos —contó en una entrevista publicada por ole.com.ar— y ver a los chicos llegar a las prácticas vestidos de soldados y con ametralladoras, porque el servicio militar es obligatorio por 3 años."

   "Cuando llegaron [los chechenos] nos imaginábamos que iba a ser difícil, pero nunca en la dimensión en la que fue. La hinchada iba a los entrenamientos a escupir, insultar y tirarles piedras sólo por su religión. Todo era un caos, un grupo de hinchas puso una bomba, hizo explotar una molotov en el vestuario, provocando un incendio. Los dos jugadores tenían que estar las 24 horas con guardaespaldas. La hinchada dejó de ir a la cancha, pasamos de jugar con 20.000 personas a 3.000. Lo más curioso que me pasó en mi carrera fue cuando Kadiyev marcó un gol y al instante los hinchas nuestros empezaron a irse del estadio en repudio".

   El puntaltense recordó que llegaban medios de comunicación de todo el mundo a ver qué estaba pasando. Y que durante la filmación del documental, los seguía una cámara todos los días.

   Para Fernández, fue una temporada "muy estresante", porque pasaron de pelear el campeonato a salvarse del descenso en la última fecha contra el clásico rival árabe: Bnei Sakhnin.

   "Yo me quería quedar en Israel porque en la Argentina ya me habían apretado los barras, pero esto fue único. Lo único que hice fue apoyar a dos chicos que fueron humillados por una ola inmensa de racismo como yo no había visto", agregó.

   Antes de irse de Argentina, Darío jugó en Olimpo, Quilmes, Godoy Cruz y Chacarita. Ahora es entrenador de menores en el FC Dallas WTX (Estados Unidos), está casado con una israelí y tienen un hijo nacido en Jerusalén.

   "El fútbol no tiene nada que ver con la religión ni la política. Esto va más allá, es ser humano. En el documental, el dueño del equipo aclara que todo fue organizado por él, que sabía exactamente lo que iba a pasar y no le importó. Gaidamak dice que quería mostrar la verdadera cara de los hinchas del Beitar y lo logró. Eso costó el sufrimiento de estos chicos y el nuestro. Una locura", remató el puntaltense.