Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

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Portezuelo del Viento: al final será el Coirco quien decida las normas de manejo

El encuentro contuvo discusiones, particularmente, de las delegaciones de La Pampa y Mendoza, que mantienen un conflicto desde décadas por el uso de las aguas del río Atuel, que hoy no llegan a territorio pampeano.
Los temas pendientes para dar vía al proyecto millonario de la futura presa se tratarán el venidero 2 de marzo en Bahía Blanca. / Foto:Los Andes

DAVID ROLDAN

droldan@lanueva.com

   Si algo quedó en claro en la reunión de hoy, en Buenos Aires, es que será el Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco) el organismo que determine las normas de llenado y manejo de la futura presa Portezuelo del Viento, a construirse sobre el río Grande, principal afluente del Colorado.

   El encuentro, cumplido en la subsecretaría de Recursos Hídricos, dejó pendientes algunas decisiones que se tomarían el 2 de marzo en Bahía Blanca, pero tienen más que ver con la forma que con el fondo de esta cuestión que resulta vital para dar vía libre a este proyecto millonario.

   “Lo fundamental es que se concluyó en que el Coirco dictará las normas”, aseguró a La Nueva. uno de los presentes en las deliberaciones.

   El ambiente contuvo ciertas discusiones entre algunos de los protagonistas, particularmente de las delegaciones de La Pampa y Mendoza, provincias que mantienen un conflicto desde décadas por el uso de las aguas del río Atuel, que hoy no llegan a territorio pampeano.

   “No obstante, se avanzó, tal como había ocurrido días atrás en Bahía Blanca”, se confió a La Nueva.

   Aseguró el informante que quedan pendientes algunos detalles que cada delegación analizará en su lugar de origen, para llevar las correcciones que crea necesarias al próximo encuentro.

   Ya en los días previos a la reunión de ayer tanto Buenos Aires, como La Pampa, Neuquén y Río Negro se habían puesto firmes en su posición de que sea el Coirco quien dicte las normas de llenado y manejo de la presa.

   Es que desde 1990 hizo lo propio con Casa de Piedra, hoy único regulador de la cuenca del Colorado, con resultados por demás positivos.

   Mendoza en su primera propuesta remarcaba que debía ser el Departamento de Irrigación de esa provincia el organismo encargado de esta tarea, tras lo cual de inmediato se fueron sumando las voces en contra.

   “Nosotros consideramos que Coirco debe decidir cómo se manejan las aguas de acuerdo con las necesidades de la cuenca”, sostuvo en horas previas a la reunión de Buenos Aires el ingeniero Marcos Aragón, gerente técnico de Corfo y delegado alterno de la provincia de Buenos Aires ante aquel organismo.

   En forma coincidente se manifestaron el ingeniero Fernando Curetti, titular del Departamento de Aguas de Río Negro, y Javier Schlegel, secretario de Recursos Hídricos de La Pampa y delegado ante el Coirco.

   Queda pendiente, para tratar en Bahía Blanca, otro tema esencial para el avance del proyecto Portezuelo del Viento y es la realización de un estudio de impacto ambiental de la presa sobre la cuenca.

   En principio, ese trabajo correrá por cuenta del Coirco.

   Portezuelo del Viento será la segunda represa reguladora de los caudales de la cuenca del río Colorado, sumándose a la única terminada, Casa de Piedra, que se ubica en la cuenca media.

   Portezuelo estará sobre el río Grande, que aporta el 72 por ciento de los caudales que recibe el río Colorado.

   El otro afluente importante es el Barrancas, que nace en la provincia del Neuquén.

   Ambos se juntan aguas abajo de la población de Barrancas, formando el Colorado que tiene su principal zona de riego en el valle bonaerense administrador por Corfo, donde están en producción unas 140 mil hectáreas.

   De llegarse a un acuerdo final sobre los puntos en discusión, será el Consejo de Gobierno del Coirco, compuesto por los gobernadores de las cinco provincias ribereñas, el organismo que tendrá que aprobar definitivamente las cláusulas en cuestión para que la obra de la represa inicie el camino de su realización.

   Se estima que, de no mediar grandes inconvenientes en su construcción, podría estar terminada en alrededor de seis años.