Diputados: Cambiemos va por un resultado que no se da desde 2005
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La última vez que un partido político o un frente logró ganar 6 de las 11 bancas de diputado provincial en juego, en la Sexta Sección, fue en 2005. Eran los inicios del hoy extinto Frente para la Victoria, y el kirchnerismo parecía indetenible.
Pasaron 12 años. Hoy, en un contexto social, económico y político distinto al de aquel entonces, es Cambiemos -un frente que ideológicamente no tiene nada que ver con el FPV- el que va por el mismo objetivo en la región: 6 escaños en la Cámara Baja bonaerense.
La meta es ambiciosa, pero factible; sobre todo, si se tiene en cuenta lo sucedido hace apenas dos meses, en las primarias de agosto.
Ese domingo 13 la coalición que gobierna en la Provincia y la Nación cosechó más de 200 mil sufragios en la categoría de diputado provincial, casi la mitad de los 418 mil votos positivos que se emitieron en la Sexta Sección. Si hoy se dan guarismos similares, Cambiemos cumplirá sin problemas el objetivo de quedarse con 6 bancas y dejar a la oposición apenas 5.
La única forma que tienen los partidos opositores de evitar este escenario depende de dos factores: que Cambiemos pierda una buena parte de los sufragios que cosechó en agosto y, lo que no es menos importante, que esas adhesiones no se atomicen entre Unidad Ciudadana, 1País, FJ Cumplir y el Frente de Izquierda y de los Trabajadores, sino que se direcciones hacia una sola fuerza.
Para un último análisis queda la posibilidad de que Cambiemos logre 7 escaños. A priori, es un objetivo difícil, ya que el oficialismo necesitaría que Unidad Ciudadana o 1País pierdan una abultada cantidad de los votos que obtuvieron en las PASO (entre 22 mil y 24 mil) y que ninguno de esos sufragios vaya al FJ Cumplir (para que no llegue al piso de 38 mil votos necesario para acceder a una banca).
Cambiemos
El oficialismo pone en juego en estos comicios 3 bancas pertenecientes al intendente bahiense Héctor Gay (reemplazado por Rosío Antinori), Santiago Nardelli y el deroense Luis Oliver.
De los cuatro, Nardelli y Antinori van por la reelección. Se descuenta que el primero logrará el objetivo, ya que encabeza la lista seccional de Cambiemos; la legisladora, en tanto, ocupa el sexto lugar, por lo que depende, como mínimo, de que se repitan los resultados de las primarias.
Los primeros seis lugares de la lista de Cambiemos los completan la concejal tresarroyense Laura Aprile, el salliquelense Emiliano Balbín -nieto de Ricardo Balbín-, la concejal lapridense Anahí Bilbao y Néstor Résico.
Unidad Ciudadana
El kirchnerismo va por las 4 bancas que deja el justicialismo este año, que se encuentran en manos de los bahienses Marcelo Feliú y Gabriel Godoy, el suarense Ricardo Moccero y la pigüense Marisol Merquel.
Merquel y el camporista Godoy apuntan a la reelección desde el segundo y tercer lugar de la lista, la cual encabeza el ultra-k Carlos “Cuto” Moreno. Los tres, si se repitieran hoy los resultados de las primarias, tendrán una banca asegurada.
1País
El frente 1País pone en juego 4 bancas: 3 que provienen del Frente Renovador de Sergio Massa (ocupadas por la bahiense María Marta Corrado, el tresarroyense Pablo Garate y el montehermoseño Marcelo Di Pascuale) y una del GEN de Margarita Stolbizer (del saavedrense Rubén Grenada).
Con el caudal obtenido en las primarias, 1País apenas podrá renovar 2 de esos lugares. De ser así, el primero sería para Garate, quien encabeza la nómina, mientras que el segundo quedaría en manos de María Fernanda Bevilacqua, hija del intendente de Villarino, Carlos Bevilacqua.
FJ Cumplir
En las primarias el randazzismo quedó a menos de 8 mil votos del piso exigido para aspirar a una banca en la Cámara de Diputados.
Por ello el objetivo prioritario del justicialismo es llegar a los 38 mil sufragios en la jornada de hoy. Con esto, el exintendente montehermoseño Alejandro Dichiara podrá hacerse un lugar en la Cámara Baja.
De la performance de las otras fuerzas dependerá cuál de ellas resigna esa banca.
Un dato clave a tener en cuenta: el caudal de votos que pueda obtener Marcelo Feliú en Bahía Blanca y el efecto arrastre que tenga su candidatura a concejal sobre el resto de la lista.
De conservar o aumentar el caudal de votos que obtuvo en las primarias, Cambiemos batirá hoy un récord electoral en la Sexta Sección. Es que se convertirá en la primera fuerza política, desde 1983 hasta hoy, en obtener más de 200 mil sufragios en elecciones consecutivas.
Sólo en dos comicios generales se superó la barrera de los 200 mil votos en los últimos 34 años: en 1983, cuando la UCR se alzó con 201.588 adhesiones, y hace dos años, cuando Cambiemos se quedó con 203.190 votos.
Con ese caudal de sufragios, en 1983 la UCR accedió a 7 bancas de diputado provincial, mientras que en 2015 Cambiemos se quedó con 4 de los 6 cargos de senador provincial en juego.
En otros cinco comicios hubo partidos o frentes que estuvieron a menos de 20 mil votos de ese caudal para nada sencillo de lograr.
El más cercano fue el Frente Justicialista Federal, que en 1991 se alzó con 185.911 votos. Detrás se ubican el FPV (185.247 votos en 2011), otra vez el FJF (184.445 en 1995) y la Alianza (183.282 en 1997, y 182.297 en 1999).