Bahía Blanca | Martes, 30 de abril

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Matías Piñeyro tuvo su dulce revancha en el Campeonato Invernal

El piloto de Ingeniero White se había quedado con la espina en el último Torneo Estival de Micromidget, pero logró coronarse en la primera competencia del año con un andar sólido. Juan Andrés Vivallo / jvivallo@lanueva.com
Puño apretado. Matías Piñeyro brilló en el Campeonato Invernal de Micromidget. Irá por más en el verano.

Todo deporte tiene su revancha. Y esa fue la sensación que vivió Matías Piñeyro. Es que el pibe de la máquina Nº 2 se había quedado con la espina en el Campeonato Estival de Micromidget, pero se redimió en el Invernal, consagrándose de manera inobjetable.

“Fue una alegría grande ganar mi primer campeonato tras cuatro años de participar en la categoría”, señaló el ganador de la final del último domingo.

“Sinceramente, fue una revancha del Campeonato de Verano, en el que fui puntero hasta la última fecha, pero perdí el título por solo un punto y medio en la última final”, agregó el piloto de Ingeniero White.

El título fue el justo premio a una gran campaña, en la cual “Mati” hizo podio en siete de las ocho fechas, ganando tres finales, con dos segundo puestos e igual cantidad de terceros y fue cuarto en la única definición -sexta- en la que no subió al podio.

“No fue algo fácil. Todas las carreras fueron difíciles, ya que todos andan muy rápido. Hay mucha paridad en la categoría y nunca sabes a quien traes pegado”, dijo.

“De las finales, la que más me gustó fue la de la 7ª fecha. En esa carrera gané el campeonato y lo festejamos ese mismo domingo con un gran asado familiar”, recordó.

Consultado si la número uno del ránking, Yamila Laballén, lo había saludado, respondió negativamente.

“No me saludó, pero la mayoría se acercó a felicitarme. Hubo algunos que no lo hicieron y no sé por qué”, respondió.

Destacó que la clave de su logro radicó en el buen rendimiento del auto, el mismo con el que corrió el certamen anterior y que consiguió muy buenos resultados.

“Es el mismo auto con el que corrimos en el verano y, para este campeonato, no se tocó nada. Solo se le reparó la rotura que tuvo en la última fecha del Estival. Reemplazamos la parrilla derecha, un buje y se alineó la dirección. Y tuvo un buen comportamiento durante todo el campeonato”, comentó.

“Del mantenimiento o reparación se encargan mi papá y mi abuelo, pero generalmente nunca hay que hacerle mucho”, agregó al respecto.

Matías ya tiene la mira otro desafío: conseguir el 1 en el campeonato nocturno.

“La idea es encarar el próximo Estival con mucha tranquilidad, como lo hicimos en el Invernal. Hay que sumar la mayor cantidad de puntos en cada fecha para lograr pintar el uno”, concluyó.