Valeria Schapira, cupido de la web
Por Anahí González / [email protected]
"Siempre me preguntan si estoy en pareja", dice Valeria Schapira mientras asume una vez más la idea de que la gente sienta curiosidad por saber cómo le va en cuestiones románticas a quien desde hace algunos años da consejos sobre el amor y las relaciones entre hombres y mujeres (y que lleva publicados varios libros al respecto).
"Me pasa como a los psicólogos con sus pacientes, que quieren saber cómo les va en su vida privada", cuenta.
Va al grano y ahorra etiquetas. Está muy bien, conociendo a alguien.
Si el flechazo fue a través de la web, no lo sabremos; pero sí que esta escritora y multifacética periodista rosarina --que recaló en la city porteña hace ya diez años-- no duda en asesorar a quienes estén buscando un compañero o compañera acerca de cómo aprovechar las ventajas del on line y derribar ciertos mitos y prejuicios.
Experta en vínculos de Match.com, sitio de citas presente en 25 países --y con más de 60 millones de usuarios en América Latina-- Valeria asegura que encontrar el amor a través de este tipo de páginas es posible y hasta recomendable.
"Cuando querés una manzana vas a la verdulería. Entonces, cuando estás buscando pareja ¿por qué no hacerlo en un sitio de citas?", analiza.
De hecho, las estadísticas arrojan un 20% de casos de éxito, lo que significa que uno de cada cinco usuarios de Match.com consigue lo que estaba buscando.
"A algunos les lleva más tiempo, a otros menos; pero se puede dar. Mi amiga Inés, mi caso de éxito favorito, va por su segunda hija con un hombre que conoció de este modo", asegura.
La expanelista de Acoso Textual -programa de TV conducido por Horacio Cabak- insiste en que pese a que este tipo de búsqueda es válida y muy útil todavía hay muchos temores.
"Tiene lógica pensar que aquellas personas que han nacido con internet, cualquier pibe de 20 maneja como nadie la computadora, pero a lo mejor alguien de 30 y pico tiene más prejuicios y más impedimentos tecnológicos".
Sin embargo, según las tendencias, cada vez más gente que no es nativa digital usa estos sitios para encontrar el amor.
Valeria, quien se define como usuaria casi compulsiva de las redes sociales, sobre todo de Facebook y Twitter, no las recomienda para buscar un Romeo o una Julieta.
"No quiere decir que no puedas encontrar el amor por Facebook, porque las redes sociales son maravillosas; pero esta red no tiene como propósito específico la búsqueda del amor".
Sin embargo, en algunos casos, también las citas que se concretan en los sitios son del tipo touch and go.
"Hay de todo. Somos impredecibles. Saber qué motiva a cada usuario sería como descubrir el secreto de la Coca Cola en el amor".
Uno de los prejuicios más comunes es creer que quienes visitan estos sitios no están preparados para establecer vínculos cara a cara.
"No es así. Quienes buscan pareja por internet en algún momento tienen que encontrarse con esa persona. El on line es solo una ayuda en la búsqueda".
"Al tímido, por ejemplo, de repente, el WhatsApp le facilita un primer contacto pero en algún momento se va a dar el encuentro face to face", comenta la autora de Los muertos en mi placard, libro donde desnudó su historial amoroso y también su cuerpo, para el arte de tapa.
Las repercusiones fueron inmediatas. Y ella también respondió.
"Fue una reivindicación al cuerpo de la mujer común".
La Pochomanía en la red
Para Valeria, el fenómeno que se desató en la red a partir de que el jugador de la Selección, Ezequiel "Pocho" Lavezzi, se sacara la camiseta en público mostrando sus marcados abdominales y desatando la pasión de miles de argentinas, molestó mucho a los hombres.
"Algo les pasó, lo veo en las redes ¡Están furiosos!".
"Creo que están viendo que nosotras también podemos decir me gusta esto, quiero ir por acá. Es bravo".
Por su lado, parte de la platea masculina sostiene que las mujeres miramos a los tipos picarones, seductores y llenos de tatuajes, pero no los querríamos como maridos o nos quejaríamos por estos mismos rasgos.
"Haciendo la analogía con Guapas (ficción de Canal 13)ellos también se quejan de que las mujeres decimos querer un Donofrio --encarna al tipo comprensivo, abierto y respetuoso-- pero terminamos eligiendo un Francisco, que es el hijo de su madre de la tira".
¿Cosificamos al deportista y lo vemos solo como un objeto sexual?
"No lo creo. No veo al Pocho como un cacho de carne. Es atractivo, simpático, con cancha y talentoso".
"A ellos les molesta porque el resabio machista es signo de estos tiempos", remata la autora de Tengo 40 ¿y qué?