La iluminación artificial en interiores

Redacción de La Nueva.

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 La luz artificial puede afectar la decoración y la percepción del espacio en general, realzando, atenuando o variando los colores, las formas y las texturas.

 A continuación, damos algunos consejos sobre el uso de iluminación artificial en interiores.

La luz en la decoración

 Tenga presente que, en muchos casos, con sólo renovar la iluminación se pueden lograr grandes cambios. A veces, los mismos pueden obtenerse con la incorporación a la llave de encendido de un interruptor de intensidad o dimmer, el cual permitirá crear diferentes climas con la misma lámpara.

 La iluminación interior puede ser diferente, dependiendo de la habitación a iluminar. Cuando pensamos en cómo iluminar un ambiente, debemos atender que debe tener un sentido de unidad con el resto de la casa.

 Organizar un esquema lumínico general requiere definir qué función, tanto estética como práctica, cumplirá la luz artificial en cada ambiente. La combinación de distintos tipos de luz en un mismo espacio (general, puntual, de ambiente o decorativa), que, además, enciendan de manera independiente, permite interesantes recursos decorativos.

 Debe procurarse que la luz general sea suave, evitando tanto el deslumbre como la falta indispensable para ver dónde caminamos. Los otros tipos vendrán luego, destacando alguna zona en particular o distribuyendo otras luces en áreas de trabajo o zonas de lectura.

El lenguaje de la luz

 La luz intensa provoca energía, la suave puede dar sueño. Un exceso de luz intensa puede producir deslumbramiento y con ello fatiga y dolor en los ojos. El exceso puede estar dado por varios factores, tanto por una mala colocación del artefacto como por un excesivo contraste entre luces y sombras.

 La luz cálida tiende a relajar y hacernos sentir a gusto; la luz fría nos tranquiliza.

Algunas ideas para elección de lámparas

 No hay que tener miedo de iluminar bibliotecas. Una biblioteca sin iluminar puede dar un aspecto oscuro al lugar. Puede hacerse mediante apliques externos que enfoquen directo a la biblioteca o con luces empotradas en su interior.

 Las luces de lectura o trabajo corresponde colocarlas a la izquierda, si la persona es diestra, o a la derecha, si es zurda. En ambos casos, es ideal acompañarla con una luz general suave, para evitar deslumbramientos.

 Las lámparas de mesa y de pie conviene comprarlas teniendo en cuenta la altura y volumen de los muebles. Las de pie suelen ser más flexibles, porque se pueden mover por la habitación o cambiarlas de lugar sin problemas. Utilice lámparas con brazos y/o altura regulables; esto les dará una mayor flexibilidad. Tenga en cuenta que las paredes, objetos, texturas y telas claras aportan luminosidad.

Características de la iluminación artificial

 La luz artificial puede afectar la decoración, realzando, atenuando o variando los colores, las formas, las texturas y el espacio. Por eso es importante conocer las alternativas de iluminación y sus principales características.

 Básicamente, existen tres divisiones fundamentales:
* Iluminación (general, puntual, de ambiente y decorativa).
* Fuentes de luz (incandescentes de filamento, incandescentes halógenas y de descarga).
* Sistemas de iluminación (directa, indirecta, semidirecta, semiindirecta y difusa).

Tipos de iluminación

 Es uno de los conceptos más importantes que se necesita conocer. Existen cuatro tipos básicos de iluminación. Se dice que el modo clásico de iluminar un ambiente es combinar iluminación general con puntual. Luego, se piensa en la de ambiente y decorativa. Tenga en cuenta que contar con distintos tipos de luz en un mismo espacio que enciendan de manera independiente aporta un poderoso recurso práctico y decorativo. Del conocimiento, la combinación y el buen uso de los diferentes tipos, obtenemos la mejor herramienta para planificar la iluminación de interiores.

Iluminación general.
Permite ver y desplazarse por un cuarto, sin molestia de sombras o zonas más o menos iluminadas. Generalmente, utiliza un punto de luz por encima del ojo, colgando del techo o en apliques de pared. Es importante que se pueda encender y apagar desde la entrada de la habitación.

 Cuando se planifica la iluminación general, hay que tener cuidado de no generar contrastes muy marcados entre habitaciones, siendo lo mejor una luz pareja para todos los ambientes; principalmente, en áreas de paso y escaleras.

 La luz intensa provoca energía y vitalidad. Un recurso excelente para manejar la intensidad es mediante un regulador de intensidad o dimmer.

Iluminación puntual.
Es un tipo de luz intensa y centrada que tiene por objeto iluminar un área de trabajo o actividad. Es un buen complemento de la decoración y acompaña la luz general. Para zonas de lectura y escritura, se utilizan lámparas de pie o mesa. Otros tipos de apliques de pared o luces en techo sobre una guía son útiles para áreas de preparación de comidas o de trabajo.

 La relación entre luz general y puntual se debe complementar buscando un equilibrio. Evitar, por un lado, el deslumbre y, por otro, la excesiva proyección de sombras.

 En baños y cocinas, la luz puntual es tan importante como la luz general.

Iluminación de ambiente.
Es un tipo de iluminación más teatral, orientada sólo a crear un cierto ambiente y que emite una luz insuficiente para iluminar una actividad. El diseño del artefacto o la forma en que proyecta la luz se elige antes que cualquier consideración práctica.

 Este tipo de iluminación puede estar dado por un efecto particular en la forma de colocar las luces. Un recurso interesante es utilizar reguladores de intensidad para convertir la luz general o puntual en luz ambiente.

Iluminación decorativa.
Se utiliza para realzar detalles arquitectónicos o iluminar especialmente un objeto, como pueden ser un cuadro, una escultura o una planta.