Importante rol del zinc en el sistema inmunológico
No es ninguna novedad que la salud está relacionada con la alimentación, a través de una cadena de fenómenos biológicos.
La Inmunonutrición es una disciplina que los estudia como componentes de una cadena de variables que parte de la disponibilidad de alimentos y pasa, en etapas sucesivas, por la ingesta de nutrientes, el estado nutricional.
Luego transita por la vulnerabilidad a las enfermedades, lo que marca la expresión clínica de la enfermedad y de ahí, a las consecuencias.
De cada uno de los puntos de esta cadena trató el Primer Simposio Internacional de Inmunonutrición que, organizado por las sociedades argentinas de Investigación Clínica, de Pediatría y de Nutrición, conjuntamente con la Confederación Farmacéutica Argentina (COFA), sesionó en la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires.
Lo abrió la presidenta del Simposio, doctora Nora Slobodianik, titular de la cátedra de Nutrición de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la UBA, recordando que la Organización Mundial de la Salud define la salud como el completo estado de bienestar físico, mental y social y no sólo la ausencia de enfermedades.
Dentro del ciclo de ponencias donde se habló de estado nutricional de la población argentina, de los hábitos alimentarios saludables en las diferentes etapas de la vida y de los trastornos de la conducta alimentaria.
También se analizaron los componentes bioactivos de la leche humana, la relación entre nutrientes (y, dentro de ellos, de los ácidos grasos esenciales) y la inmunidad; el rol de las vitaminas, hubo un espacio para los oligoelementos y dentro de ellos, cobró importancia el zinc.
Metales preciosos
Fue la doctora Mireille Dardenne, nutricionista del Hospital Necker de París, Francia, quien lo presentó como "un micronutriente esencial, necesario para el crecimiento, el desarrollo y la función inmune".
"Su deficiencia afecta la función inmunológica", dijo categóricamente.
Y recordó que participa en las reacciones catalíticas, las que aceleran o desaceleran los procesos del metabolismo.
Asimismo, sostuvo que el zinc está presente en los mariscos, hígado de ternera, germen de trigo, cereales, carne, huevos y productos lácteos y que, una vez ingerido, se deposita en el hígado, los riñones, los huesos, la próstata, los músculos y la retina del ojo.
"Para prevenir infecciones se recomiendan 20 miligramos por día, divididos en 3 o 4 ingestas", manifestó Dardenne.
También habló de los factores exógenos relacionados con la dieta que influyen en la absorción del zinc.
En ese aspecto, destacó como negativa la ingesta de alcohol.
Con respecto a los casos de manifestaciones subclínicas y clínicas de la deficiencia de zinc, recordó que la más común es el hipogonadismo en varones (secreción insuficiente de testosterona).
Afirmó que se puede intervenir con suplementación o mejorando la calidad de la dieta con fortificación, pero teniendo en cuenta que ninguna dosis sustituye el aporte de los alimentos.
Zinc e inmunidad
La doctora Dardenne enfatizó que el organismo requiere zinc para mantener el normal desarrollo del sistema inmunológico.
La deficiencia moderada-baja de zinc está presente en todo el mundo, especialmente en países en vías de desarrollo y, en particular, en mujeres y en niños, dijo.
Destacó, asimismo, el hecho de que se hayan comprobado efectos benéficos de la suplementación con zinc en infantes, niños y adultos mayores.
"El efecto del zinc sobre las embarazadas todavía está en estudio", afirmó.
Por su parte, la doctora Slobodianik, recordó que está demostrada la acción inmunomoduladora (activante de las defensas orgánicas) del zinc, tanto como la de diferentes nutrientes como la glutamina, la arginina, los nucleótidos, los ácidos grasos esenciales, el selenio, el cobre, el hierro, el magnesio, las vitaminas A, C, E y algunas del complejo B.
"En estos momentos, se está analizando la potencial acción inmunomoduladora de otros componentes de la alimentación, entre ellos los carotenos, la vitamina D, los prebióticos, probióticos y polifenoles", afirmó.
¿Cuánto necesitamos?
Según la doctora Mireille Dardenne, nutricionista del Hospital Necker de París (Francia), estos son los requerimientos diarios de zinc, según la edad, para el mantenimiento del sistema inmunológico.
La médica francesa aclaró que la suplementación no sustituye el aporte que hacen los alimentos que contienen zinc y que aún están en estudio los beneficios de este oligoelemento en las mujeres embarazadas.
Veamos:
* De 0 a 12 meses: de3 a 5 mg
* De 1 a 10 años: 10 mg
* Más de 10 años: 15 mg
* Adolescentes: 20 mg
* Adultos:25 mg
El zinc está presente en los mariscos, hígado de ternera, germen de trigo, cereales, carne, huevos y productos lácteos y que, una vez ingerido, se deposita en el hígado, los riñones, los huesos, la próstata, los músculos y la retina del ojo.