River empató 2-2 con Libertad y deberá ir a ganar a Paraguay

Redacción de La Nueva.

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 BUENOS AIRES (DyN) -- River Plate mereció largamente la victoria pero la gran actuación del arquero Aldo Bobadilla, dos "imposibles" goles de Carlos Bonet y su falta de contundencia, lo llevaron a tener que conformarse anoche con apenas un empate 2-2 con Libertad de Paraguay, al que tendrá que ganarle en Asunción después del Mundial si quiere acceder a las semifinales de la Libertadores.

 River ejerció el dominio durante casi todo el primer tiempo, pero Libertad se fue al descanso en ventaja. Al minuto de juego, los visitantes casi se ponen 1-0 con un zurdazo del peruano Martín Hidalgo que pasó apenas afuera. Pero después se replegaron.

 A los 5, una volea de Paulo Ferrari pegó en el travesaño. A los 8 ocurrió un grosero error del asistente Ednilson Corona y el árbitro Carlos Simón, al cobrar un offside tras un saque lateral.

 Farías siguió la jugada y anotó, mientras los paraguayos se quedaban parados tras el silbato del brasileño. Todo River terminó protestando, pero fue en vano.

 Sobre los 10, un tiro desde afuera de Jonathan Santana pegó en la cara externa del palo izquierdo. Tres minutos más tarde, Aldo Bobadilla sacó al corner un remate de Marcelo Gallardo. Todo era de River.

 Y si bien la presión millonaria mermó un poco, a los 23 Bobadilla volvió a exigirse a fondo para quedarse con un cabezazo de Gonzalo Higuaín. A los 27, el arquero, ya convertido en figura, tapó un frentazo de Farías. Y a los 33, el palo derecho le negó el gol, primero a Farías y después a Ferrari, quien remató desde ángulo cerrado.

 Parado para intentar lastimar con una contra, Libertad tuvo la fortuna de sobrevivir a siete chances claras de gol y a los 38 consiguió el 1-0 parcial, en una réplica perfecta que Carlos Bonet definió con una volea al ángulo. Un golazo.

 Y en el cierre de la etapa, los paraguayos estuvieron a punto de conseguir el segundo sobre los 44, cuando Christian Riveros quedó de cara al gol y Germán Lux le ahogó el grito en gran intervención.

 En el segundo tiempo, a River le costó generar juego asociado y Libertad no pasó tantos apremios como antes. Además, las veces que logró profundidad se encontró con un Bobadilla enorme. El arquero se lució a los 3 y a los 9, al tapar un remate de Higuaín y un cabezazo de Julio Cáceres.

 Viendo el desgaste de sus jugadores, Daniel Passarella mandó a la cancha a Víctor Zapata y Daniel Montenegro, para intentar torcer la historia. Lo tuvo Zapata a los 31, pero bobadilla rechazó al corner. Y al minuto siguiente llegó el 1-1: Montenegro capturó un despeje y convirtió con un violento disparo.

 El Monumental quedó aturdido en la jugada siguiente, ya que Leonardo Talamonti se equivocó feo al rechazar y la pelota, finalmente, llegó a Bonet, que puso nuevamente en ventaja a los paraguayos con una exquisita definición.

 River fue a buscarla hazaña y consiguió el empate enseguida con un cabezazo de Farías tras una confusa jugada, con pifia de Montenegro incluida.

 Y pese a la expulsión de Pusineri, River siguió buscando. Pero no pudo encontrar el gol y tras el Mundial, tendrá que ir a ganar el 18 de julio en Asunción.