Prohibieron la venta de Yectafer Complex en Río Negro
VIEDMA (A) -- Debido a la detección de nuevas irregularidades y falsificaciones, el ministerio de Salud Pública de Río Negro decidió prohibir la comercialización y el uso del producto Yectafer Complex, medicamento similar al Yectafer Hierro Sorbitex que, por estar adulterado, en diciembre pasado causó la muerte de la viedmense Verónica Díaz.
El lote alcanzado por la medida provincial es el Nº 03100794. En este se habrían detectado ampollas que contenían Yectafer Hierro Sorbitex (cuya comercialización y uso fueron prohibidos en todo el país), a pesar de que el rótulo de las mismas no indicaba esto. El hecho es absolutamente irregular y suma un nuevo elemento de desconcierto y desazón a la causa.
La titular de la cartera de Salud rionegrina, Adriana Gutiérrez, indicó ayer que la decisión se tomó tras conocer el contenido del acta de inspección del programa de Verificación de Legitimidad de Medicamentos Comercializados, realizada por el Instituto Nacional de Medicamentos en la droguería Santiago Gavazza SRL, en diciembre pasado.
La funcionaria indicó que la resolución fue comunicada al Colegio de Farmacéuticos de Río Negro y a las federaciones médicas y de clínicas, como también a todas las asociaciones de profesionales. También se informó al ministerio de Salud de la Nación y a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT).
Gutiérrez aclaró que, al margen de que la medida se tomó ahora, desde el 16 de mayo último (cuando se registró un caso de intoxicación en Cinco Saltos que puso en riesgo la salud de la joven Angela Peralta) está prohibida la compra y el uso de cualquier tipo de Yectafer, sin importar número de lote o presentación.
Además, sostuvo que se dieron precisas instrucciones para que el departamento Farmacia retirara todas las cajas de Yectafer que hubiese en los hospitales.
¿Ocultamiento?
Gutiérrez señaló que la disposición se suma a la tomada en diciembre pasado por la ANMAT, que provocó el retiro del Yectafer Hierro Sorbitex (lote Nº 03100718) en todo el ámbito nacional, luego de que este medicamento adulterado provocara la muerte de la joven Verónica Díaz y complicaciones en la salud de otras ocho mujeres en Viedma.
Lo que aún no se alcanza a entender es por qué se tardó tanto en informar que también había sido adulterado un lote de Yectafer Complex, dado que las autoridades de ANMAT y la droguería Gavazza estaban al tanto de la existencia del problemas.
Los antecedentes de esta nueva medida
* El 23 de diciembre de 2004 se conoció el caso de Verónica Díaz, quien falleció tras recibir una inyección adulterada de Yectafer Hierro Sorbitex. La joven había recibido seis dosis en los días previos, a fin de combatir una anemia; la séptima inoculación, suministrada en el Hospital Artémides Zatti de Viedma, fue la que le produjo la muerte. Su deceso tuvo lugar en el Hospital Eva Perón, del partido bonaerense de San Martín, donde esperaba, en estado "desesperante", un trasplante de hígado.
* De inmediato se conocieron ocho casos más de mujeres afectadas. Ninguno fue fatal, pero algunas de ellas sufrieron hepatitis medicamentosa, pérdida de conocimiento durante varias horas y otras consecuencias graves.
* Ni bien se conoció el caso de Verónica Díaz, el interventor de ANMAT, Manuel Limeres, aseguró que los controles de la entidad "no están fallando" y que lo ocurrido había sido "un delito que derivó en homicidio, más que una falsificación".
* Todos salieron a expiar sus culpas. José Blanc, director técnico del laboratorio Astra Zéneca (que produce el medicamento Yectafer) afirmó que el hospital viedmense no era cliente directo de la firma, como también que sólo con observar el estuche y el contenido de las ampolla suministrada a Díaz se podía advertir que el producto era falsificado.
* José Pacayut, director del Hospital de Viedma, desestimó que en el caso haya habido mala praxis médica y descartó que la droga haya sido adulterada en el momento de su aplicación. "Yo apunto a la cadena de comercialización, en donde hay alguna cuestión que la Justicia está investigando", dijo.
* Desde Salud rionegrina se afirmó que la partida adulterada se había comprado en Bahía Blanca.
* La investigación quedó a cargo de la fiscalía especializada de Pesquisa de Medicamentos Ilegítimos, con el aporte técnico del ANMAT. Por esos días se ordenó retirar preventivamente del mercado el lote del producto.
* La pesquisa se inició en una droguería del conurbano bonaerense, luego de que la droguería Gavazza --de Santiago Gavazza, con sede en General Paz 85 de Bahía Blanca-- deslindara su responsabilidad con documentación en la que consta que retiró el hierro inyectable en otra droguería del conurbano.
* Por esos días --fines de diciembre de 2004-- también se conocieron nuevos casos de intoxicación en Entre Ríos y en Santa Fe.
* Parientes, amigos y vecinos de Verónica Díaz decidieron apuntalar la investigación de los hechos mediante la realización de marchas de silencio por las calles de Viedma. La primera se produjo días después del hecho; las siguientes, el 23 de cada mes.
* A fines de diciembre pasado se conocieron otros cuatro casos de intoxicación grave, esta vez en Bariloche y en Entre Ríos. Días después, se confirmó la muerte de la joven correntina Luciana Jiménez, quien había sido inoculada con Yectafer adulterado.
* El 8 de abril de este año, cinco médicos del Hospital Zatti prestaron declaración testimonial en la sede del Juzgado de Instrucción Nº 4 de esta capital, en el marco de la causa.
* En días siguientes declararon Graciela y Nicolás Díaz, los padres de Verónica; tres de las pacientes afectadas por el Yectafer; y los dos médicos que atendieron a Verónica Díaz en el Centro de Salud del Barrio Guido de esta capital.
* En mayo pasado, los investigadores habían llegado a la conclusión de que el Yectafer no salió de Astra Zéneca (la firma que fabrica el original), sino que fue elaborado por algún laboratorio "trucho" o insertado en el circuito de venta por algún empleado "infiel" (aquellos que intermedian en el negocio de los medicamentos).
* A mediados del mes pasado se conoció el caso de Angela Peralta, una joven rionegrina de 22 años, embarazada, que fue internada en grave estado en el Hospital Italiano de Buenos Aires tras recibir una inyección de hierro adulterada.
* El caso reavivó la polémica y el desconcierto, por cuanto el Yectafer Hierro Sorbitex había sido sacado de circulación más de cuatro meses antes.
* Por este hecho, el ministerio de Salud de Río Negro realizó una denuncia penal en el Juzgado Penal de Cipolletti y, el día 18 del mes pasado, cortó el problema de raíz: dispuso retirar de las farmacias de los hospitales públicos todas las ampollas de hierro existentes.
* El 22 del mes pasado, Angela Peralta y su bebé Maximiliano fueron dados de alta del hospital porteño en el que se encontraban internados, pero la investigación sigue su curso.