Bahía Blanca | Lunes, 11 de agosto

Bahía Blanca | Lunes, 11 de agosto

Bahía Blanca | Lunes, 11 de agosto

Criminal, por herencia, a los 11 años

Un niño de 11 años, hijo del delincuente muerto Néstor "Sopapita" Merlo, fue entregado ayer a la Justicia por su propia abuela, tras permanecer cinco días prófugo en la causa que investiga el homicidio del ingeniero Miguel Petrucelli, ocurrido la semana pasada en El Palomar.


 BUENOS AIRES (Télam) -- Un niño de 11 años, hijo del delincuente muerto Néstor "Sopapita" Merlo, fue entregado ayer a la Justicia por su propia abuela, tras permanecer cinco días prófugo en la causa que investiga el homicidio del ingeniero Miguel Petrucelli, ocurrido la semana pasada en El Palomar.


 Las fuentes aseguraron que el chico fue llevado ante un juez de Menores de San Martín, quien tras identificarlo se lo entregó en guarda nuevamente a su abuela, mientras continúan las investigaciones del crimen.


 El niño, apodado como su padre "Sopapita", está acusado de haber participado de una banda de chicos que, tras intentar robarle el auto, asesinó de un balazo al ingeniero Petrucelli en un hecho ocurrido el miércoles pasado, en la puerta de la casa de la víctima, en El Palomar, partido de Morón.


 Por ese caso ya fueron detenidos un joven de 18 años y dos adolescentes de 14 y 15 años. Sólo el mayor de los tres, llamado Roberto Paredes, quedó imputado por el homicidio e indagado por el fiscal de Morón Fernando Bellido, a cargo de la investigación del crimen.


 Los otros dos son inimputables por ser menores de edad: uno quedó a disposición de un juez de Menores de Morón y el otro a disposición de otro magistrado de San Martín, ya que poseía otras causas anteriores.


 El crimen, según la investigación, se registró cuando el ingeniero de 48 años arribaba a su casa de La Pampa 1506 a bordo de Chrysler Neón y fue abordado por cuatro ladrones armados que llegaron en tres bicicletas tipo todo terreno.


 La mujer del ingeniero advirtió lo que ocurría, por lo que salió a la calle a pedir ayuda a los gritos. Eso motivó que los ladrones abortaran el robo, pero antes de huir dispararon varios balazos que impactaron en el cuerpo de Petrucelli, lo que le provocó su muerte.


 Desde ese día se comenzó a buscar a los chicos hasta que en Villa Pineral se detuvo a tres, pero el menor de ellos, de 11 años, nunca pudo ser atrapado, aunque ayer fue presentado ante la justicia.


 El jefe de la comisaría Cuarta de Tres de Febrero, comisario Carlos Penaglia, dijo que el hijo de "Sopapita" Merlo fue llevado ante la Justicia por su abuela.


 La mujer se presentó junto a su nieto en los Tribunales de San Martín y pidió hablar con el juez de Menores Nº 4, Carlos Gallardo, quien, tras identificar al chico, lo volvió a entregar a la abuela en guarda.


 El menor es hijo del fallecido Néstor Merlo, quien era el líder de La Banda de los Paraguayos de la villa El Mercado de Villa Pineral. A este delincuente lo apodaban "Sopapita" porque era alto, flaco, cabezón y "chupaba" grandes cantidades de alcohol.


 Merlo se convirtió en un mito del hampa el 10 de mayo de 1996, cuando fue asesinado junto a su novia María Silva por un quiosquero que les partió las cabezas a mazazos cuando intentaron robarle en su local de Villa Pineral.


 Al día siguiente, la vivienda del comerciante fue custodiada por más de una treintena de policías, debido a que allegados a "Sopapita" balearon el frente de la casa.


 Durante el cortejo fúnebre, sus amigos colocaron un porro de marihuana encendido sobre el féretro y despidieron sus restos efectuando decenas de disparos al aire ante la mirada absorta de periodistas y policías.