Riera: "Fuimos un pueblo olvidado"
Las características de una población, cuanto menos, olvidada, parece quedar en el pasado para Bernasconi.
"La esperanza es que, en estos tres años y pico que nos quedan de gobierno, podamos revertir en forma definitiva la situación del pueblo", comentó el intendente municipal, Jorge Francisco "Nito" Riera.
"Este es un lugar que desde hace 30 años está olvidado, lo que ha provocado que sea considerado en decadencia con todo lo que ello implica", comentó.
"¿Por qué? No lo sé puntualmente, pero algo es seguro: nadie se preocupó por hacer las cosas medianamente bien. Por eso pretendemos cambiar este proceso. No quiero que cuando se cumpla el período de cuatro años me vengan a decir que estuve calentando la silla", explicó Riera.
Más adelante dijo que hay gente en el gobierno del doctor Carlos Verna que le está dando una "gran mano" para hacer resurgir a Bernasconi.
"Desde luego que los fondos para lo que estamos haciendo surgen de las arcas provinciales; de lo contrario, sería imposible. Con los ingresos de la comuna sólo podemos pagar los sueldos", explicó.
En la década del 70, el pueblo llegó a tener poco más de 4.000 habitantes. Hoy, el último censo oficial registra 1.640 personas.
Hace tres décadas, una gran parte de la población se concentraba en la colonia israelita Narciso Leven. En cada uno de sus campos, había varias familias. Pero cuando comenzó la devaluación de los sectores vinculados al campo, esa gente, al no tener otra opción en cuanto a mano de obra, se empezó a ir.
Por eso la instalación de un frigorífico ilusiona a todos. Y le da sustento al pedido de nuevas viviendas.
"No sólo las hemos solicitado por este emprendimiento, sino porque estamos con un déficit de 20 casas", aseguró Riera.
En Bernasconi prácticamente no hay viviendas para alquilar o vender, por lo que las 28 gestionadas (22 de ellas del plan Fonavi) serán vitales para cubrir la falencia.
La comuna también está elaborando bloques (lleva 7.000) para iniciar, antes de fin de año, la construcción de casas económicas.
Si bien la parte contable de la comuna está bien, hay antiguos compromisos que se siguen afrontando.
Uno de ellos, contraído en 1996, es con la Cooperativa de Servicios Públicos local. Se trata de una deuda de 35.000 pesos, la que se abona en cuotas mensuales.
La otra es más compleja y, por ahora, sólo se están pagando los intereses. La tienen casi todos los municipios pampeanos y es con el Banco Mundial (BM). Se originó por obras de gas, hace más de cinco años, y el monto original adeudado es de 320.000 dólares.
"El tema lo está manejando la Provincia, más que nada por la magnitud. Desde la municipalidad sabemos que es algo que jamás podremos afrontar", admitió Riera.
La imagen
A fuerza de obras, Riera le está cambiando la cara a Bernasconi. Y no se ruboriza cuando dice: "En nueve meses hicimos más de lo que habíamos prometido (en la campaña 2003)".
Entre otras tareas, confeccionó un plan acorde para que 85 familias puedan contar con gas natural; incorporó un odontólogo que, desde hacía años, la comunidad no podía sumar; está por concluir el alumbrado público en los tres kilómetros de acceso, comenzará esta semana con el riego asfáltico en las calles y reordenará el tránsito alrededor de la plaza principal.
De todos modos, lo que más luce es el edificio comunal. Y lo cuenta.
"Era un desastre. Por ejemplo, la puerta de ingreso principal estaba con una tranca y un candado, como si fuera la tranquera de un campo. Otra: cuando llovía, se parecía a una regadera. Esa era la comuna", dijo Riera.
Otra de las obras vitales para la comunidad es la conclusión del polideportivo, que ya tiene un presupuesto aprobado por 145.000 pesos. Con las nuevas tarimas, su capacidad será de casi 2.000 personas.
"Tenés que ser vos"
Jorge Francisco ("Nito") Riera siempre militó en el Partido Justicialista, pero nunca --dijo-- tuvo ambiciones políticas.
"Pero esta vez (por 2003) los compañeros me dijeron: `Tenés que ser vos'. Pregunté si estaban todos de acuerdo; dijeron que sí. Y acá estoy", comentó.
Asumió en diciembre último, después de haber triunfado por 110 votos (660 a 550).
"Si pensaba ganar? Sí, porque la gente necesitaba un cambio. Además, sostengo que en los pueblos chicos, si no tenemos la misma idea (política) que el gobierno provincial, logramos muy poco; es decir, subsistimos... Pero con la misma camiseta es más fácil llegar con éxito a los niveles de decisión", contó.
Acerca del gobierno nacional de Néstor Kirchner, el jefe comunal entiende que está bien encaminado.
"Hay que tener paciencia. Kirchner tomó una brasa caliente entre las manos y, por eso, es difícil pedirle soluciones en tan poco tiempo", comentó.
Riera nació hace 53 años en General San Martín, pero hace 22 que reside en Bernasconi.
Está casado con María Zulema Homann y ambos son los padres de Natalia (27) y Rodrigo (28). Juan Pablo, de 2 meses (de su hija), es el nieto que los desvela.
La cunicultura avanza
Al margen del frigorífico, la comuna de Bernasconi también está gestionando un crédito para que la cooperativa de cunicultura local se pueda ampliar. "Ya compramos un terreno en la zona este, porque donde estaban (los productores) ya era chico y, además, se encontraban muy cerca del pueblo", dijo el intendente Riera. En este momento hay nueve cunicultores, pero otros siete pretenden sumarse. En la cooperativa trabajan en sociedad para la compra de alimentos y venta, pero cada uno se maneja en forma individual en las naves.
Distancias
160 son los kilómetros que separan a Bernasconi de Santa Rosa. Lo mismo sucede respecto de Bahía Blanca, en ambos casos por la ruta 35.
Las razones del Plan Provincial de Activación Ganadera
La inversión de los productores locales, a partir de la instalación del frigorífico en su propia localidad, es otro motivo de seducción.
"Hoy en día, muchos chacareros no se quedan con 10 o 12 novillos porque dicen que, al final, los tienen que malvender en las ferias", explicó Riera.
"Pero si saben que tienen un frigorífico a 10 kilómetros, que les van a pagar al rinde y le `pueden hacer' 300 o 400 pesos más a un novillo, se preocuparán por invertir", agregó.
En tal sentido, la Provincia ya se ha pronunciado en apoyo al sector.
Se trata del Plan Provincial de Activación Ganadera, que es una continuación del programa ganadero --actualmente en marcha--, y está orientado a mejorar la eficiencia de los procesos productivos y a la manera de lograr una ganadería eficiente y de calidad.
También se propende a aumentar la faena de la producción ganadera bovina en La Pampa, ya que, en la actualidad, sobre un total de un millón de cabezas que proporciona La Pampa, se faena menos de un 25 por ciento en el territorio provincial.
Por medio de este plan, se espera llevar este porcentaje al 50%.
Según los productores de la zona marginal de Bernasconi, para llevar un novillo a 420 kilos, se necesitan 26 meses. Si se cambia la genética, en sólo 16 meses se alcanzaría ese kilaje.
"Estas son inversiones que la gente no está acostumbrada a hacer, pero que, con un frigorífico cerca, tendrá que considerar", comentó Riera.
Guillermo Rueda/Enviado especial a Bernasconi