Bahía Blanca | Jueves, 02 de mayo

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Denuncian a Nazareno Goyak por un posible intento de abuso sexual

Poco antes del accidente en Mitre y 11 de Abril, en otro sector de Bahía quiso subir a una chica de 20 años a su Audi, según la denunciante.
Fotos: Rodrigo García-La Nueva.

   Nazareno Goyak suma denuncias en su contra. Ahora se supo que el padre de una joven con domicilio en el barrio San Martín lo acusó de haber interceptado a su hija mientras conducía el Audi, poco antes del accidente en Mitre y 11 de Abril y con supuestos fines sexuales.

   Agostina Catalán, de 20 años, relató que aproximadamente a la 0.30 del viernes 2 se retiró de su vivienda con el fin de ir a buscar ibuprofeno a la casa de una amiga para su hijo de 4 años, que tenía fiebre.

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   En ese marco, Goyak frenó el coche de alta gama ante su presencia, en la intersección de las calles Brickman y 25 de Mayo.

   “Vi que dos autos pasaron corriendo picadas muy rápido por 25 de Mayo. Era un Audi de color plateado, con los vidrios polarizados, y un Mercedes azul. Otros testigos se pararon en el medio de la calle para ver los coches, que siguieron hasta Tierra del Fuego, doblaron y bajaron por Pueyrredón”, detalló la víctima.

   “Yo ya volvía caminando de la casa de mi amiga y, cuando los del Audi doblaron en Brickman, me vieron, frenaron, hicieron marcha atrás por esa calle y me siguieron”, continuó.

   “Vení, hermosa, subí que no te va a pasar nada. No tengas miedo”. Ese fue el consejo que recibió Agostina del conductor del Audi.

   El acompañante -según la denuncia- abrió la puerta de su lado para que la chica subiera. “Adentro había dos o tres más”, amplió.

“Fue desesperante”

   “Cuando quise cruzar de vereda, el conductor aceleró como para atropellarme con el auto, entonces crucé rápido la calle y fui otra vez para lo de mi amiga a los gritos. El tipo me siguió, chocó contra el cordón y me volvió a seguir marcha atrás, por eso le empecé a gritar a mi amiga desde la reja de su casa para que me auxiliara. No me salía la voz por el miedo que tenía. Fue desesperante; no aguantaba más”, continuó diciendo la entrevistada.

   Las cámaras de seguridad de una heladería y de un negocio de venta de motos, ubicados en Brickman al 700, registraron el incidente.

   Si bien las videocámaras de ambos comercios captaron imágenes del hecho, solo desde la heladería accedieron a facilitar el soporte fílmico a la familia Catalán.

Antecedente cercano

   Carlos, padre de Agostina, radicó la denuncia correspondiente en la comisaría Primera, adonde a la joven se le exhibieron fotografías y reconoció el Audi de Goyak. Hasta ese momento la familia desconocía lo sucedido con Dana Lucía Guiglioni.

   “Tengo mucho miedo y no quiero ni salir a la calle; mi mamá me tiene que acompañar a llevar a mi hijo al jardín de infantes porque tengo ataques de pánico. Para peor, 8 días antes de esto, en la misma esquina, me taparon la boca, me agarraron de los pelos, me tiraron al piso y me robaron el teléfono celular”, finalizó Agostina.

En la causa, así como en la del choque, tomó intervención la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 2, a cargo del fiscal Eduardo Zaratiegui.