Bahía Blanca | Domingo, 28 de abril

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Gastón Whelan: "Dudo que en otro club les dediquen tanto a los jóvenes"

“Ganar un campeonato es el resultado de entrenar los días libres y de mucho sacrificio. Esto te da un plus para seguir adelante”, agregó el capitán de Bahia Basket.
Foto: archivo-LN.

Néstor, el papá de Juan Pablo Vaulet, se despidió de su hijo y se llevó, bien guardado, el premio MVP.

“Cuando estaba festejando se me vino a la cabeza todo lo que pasé. Cuando tocás fondo necesitás ponerte más duro que nunca”, señaló Juampi.

Su real participación en la Liga lo había marginado un poco de la categoría inferior.

“Hacía mucho que no jugaba la Liga de Desarrollo. Ayer (contra Boca) se me complicó más, porque hacía tiempo que no jugaba en esta categoría. Hoy entré a disfrutar”, dijo.

El capitán, Gastón Whelan, mostró claridad y madurez.

“Estoy orgulloso con el equipo. Formamos una familia, donde existió confianza en el otro y entrega de cada uno. El cuerpo técnico le dedicó tiempo y estuvo siempre a disposición. Dudo que en otro club le dediquen tanto a los jóvenes como a nosotros”, destacó.

Uno con raíces bien bahienses fue Lucio Redivo, que sumó un título a dos Provinciales y un ascenso con Pacífico.

“Ganar un campeonato es el resultado de entrenar los días libres y de mucho sacrificio. Esto te da un plus para seguir adelante”, admitió.

“Uno en la vida tiene que plantearse objetivos. Se resignan un montón de cosas a diario”, aclaró, mientras lucía colgada una de las redes.

Máximo Fjellerup encolumnó a su familia detrás de sus sueños. Todos dejaron Tres Arroyos para radicarse en Bahía.

“La verdad que fue un alivio. Cocinarme y limpiar era complicado, je. Tenerlos conmigo es muy importante. En Bahía ya me siento como en mi casa. En lo deportivo, me noto mejor físicamente y técnicamente. Entrenando con Mauro, Pepe y el Puma aprendés o aprendés. Y le agradezco mucho al equipo, porque son compañeros y amigos”, destacó Maxi.

Ariel Ramos se transformó en un jugador importante.

“Fue fundamental la confianza que me tuvieron mis compañeros. De a poco fui tomando tiros diferentes. Pero nunca pensé que iba a hacerlo de tres puntos. ¡Está bueno jugar de afuera!. Se lo debo a Mauro, Pepe y el Puma”, destacó el mendocino, de 2m02.

Otro de la provincia del vino, Martín Fernández.

“Hoy la metí. Lo importante era ganar. No sentí presión, pero haber arrancado con un triple me dio mucha confianza”, reconoció.