Bahía Blanca | Lunes, 29 de abril

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Asaltó un mercado que está frente a su casa

"Fue un momento horrible, porque el ladrón que amenazó con un arma a toda mi familia y a varios de los clientes, vive enfrente del comercio. Me asaltó, lo reduje, lo até, pero lo peor es que en poco tiempo lo voy a volver a ver... No tengo miedo, más bien desazón". De este modo, Damián Agustín Alarcón Riquelme (32), propietario de un mercado en el barrio Vista Alegre, repasó ayer el hecho delictivo registrado el lunes a la tarde, que terminó cuando, junto con su hijo adolescente, pudo reducir al peligroso delincuente armado que irrumpiera segundos antes con fines de robo.

 "Fue un momento horrible, porque el ladrón que amenazó con un arma a toda mi familia y a varios de los clientes, vive enfrente del comercio. Me asaltó, lo reduje, lo até, pero lo peor es que en poco tiempo lo voy a volver a ver... No tengo miedo, más bien desazón".


 De este modo, Damián Agustín Alarcón Riquelme (32), propietario de un mercado en el barrio Vista Alegre, repasó ayer el hecho delictivo registrado el lunes a la tarde, que terminó cuando, junto con su hijo adolescente, pudo reducir al peligroso delincuente armado que irrumpiera segundos antes con fines de robo.


 El frustrado ladrón no es otro que Alejandro Martín Borello (23), alias "Chuky", quien se iniciara en la senda delictiva desde su adolescencia, cuando fue protagonista de varios robos a mano armada en comercios. Y, ya de mayor, continuó en la misma actividad y fue atrapado en múltiples ocasiones, aunque llamativamente siempre logra recuperar la libertad.


 El nuevo hecho se concretó alrededor de las 14.30 del lunes, en el negocio ubicado en la calle Pampa Central 2351, llamado La Prosperidad y perteneciente a Alarcón Riquelme, quien inició la actividad comercial en el lugar hace unos ocho meses.


 "Estaba drogado, muy alcoholizado... Entró al comercio, me pidió una caja de vino y cometí el error de dársela. Después ya quería más, me dijo `dame todo porque te mato', hasta que un vecino lo redujo y se lo llevó", expresó el damnificado en declaraciones a un cronista de "La Nueva Provincia".


 Curiosamente, Borello volvió al local cinco minutos más tarde, esta vez con un arma larga.


 "Había chicos, tenía un arma y estábamos atemorizados. No sabíamos lo que realmente quería. Lo concreto es que volvió a salir del local y al rato regresó, hasta que no soporté más y decidí enfrentarlo", declaró el comerciante.


 El forcejeo se desarrolló a lo largo de algunos metros y Alarcón Riquelme fue auxiliado por su hijo de 15 años y por un vecino, quien alertó al teléfono de emergencias 911.


 "Lo até a una mesa, estaba mi hijo y un vecino. Llamamos al servicio de emergencias y se informó de lo que había ocurrido. En ese momento había dejado el arma afuera. Si este muchacho hubiera ingresado con el arma, no sé si estoy haciendo esta nota", sostuvo Alarcón Riquelme.


 Instantes después llegó una comisión de la seccional Quinta, que aprehendió al sospechoso --no sin esfuerzo, ya que se resistió-- y secuestró la escopeta con la que había pretendido asaltar el comercio.


 En la comisaría del barrio Noroeste se iniciaron actuaciones por "amenazas calificadas, tentativa de robo y resistencia a la autoridad", según se informó oficialmente.


 "Gracias a los vecinos se evitó una tragedia. Encima, amenazó verbalmente a una nena de seis años, y lo peor de todo es que pasó de ser un cliente más, a un delincuente que alteró la tranquilidad del barrio", dijo el comerciante.


 Por último destacó: "no sé si fui valiente, hice lo que me pareció que tenía que hacer. Trabajo dieciocho horas por día, me desvivo por mi familia y que una persona, que encima conozco, me haga esto, me da impotencia. El tema es el post robo, porque inconscientemente sé que lo voy a volver a ver".


 Mientras la policía investiga si "Chuky" Borello ha sido autor de otros hechos similares en la ciudad, el sujeto quedó a disposición de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 15, de flagrancia.

Algunas de sus causas




 Alejandro "Chuky" Borello registra numerosos ingresos en las comisarías locales desde hace varios años. Según constancias del archivo de "La Nueva Provincia", luego de cumplir la mayoría de edad, se le atribuyeron los siguientes delitos:


 * El 27 de diciembre de 2009, durante la tarde, lo aprehendieron luego de que intentara cometer un robo en la vivienda de Enrique Julio 1351, pero con tanta mala suerte que se cayó del techo de un galpón y se fracturó una pierna. Junto con él también fue arrestado su presunto cómplice, Facundo Andrés Pettorossi. El inmueble pertenece a Jorge Norberto Quintayé.


 * El 7 de abril de 2010, volvió a caer en manos de personal de la comisaría Segunda, esta vez imputado de proveer de armas a delincuentes juveniles. En su casa de Di Sarli 1215, se habrían incautado dos revólveres de calibre 22, supuestamente empleados en asaltos.


 * El 10 de octubre de 2010, Borello fue atrapado en la calle Enrique Julio al 1100, acusado de sustraer el estéreo de un Volkswagen Gol gris, propiedad de Oscar Fernando Vidales, estacionado en Di Sarli y Malvinas. En esa ocasión se habría resistido al procedimiento.


 * El 17 de octubre de 2011, lo atraparon por el robo de una motocicleta Honda Biz, de color azul, estacionada frente a un local nocturno, en Gutiérrez y Belgrano, de General Cerri. También en esta ocasión Borello se cayó de un techo, cuando pretendía huir de los policías que lo perseguían, en Alvarez Jonte al 300, de nuestra ciudad.


 * El 16 de diciembre de 2011, "Chuky" fue acusado de sustraer una cartera de cuero con documentación, del almacén ubicado en Mallea 89, ante un descuido del propietario, Abel Cirilo Acosta.


 * El 19 de abril de 2013, Borello, que estaba aprehendido en la comisaría Segunda, aprovechó un descuido de los guardias para escapar esposado, ignorando que en esos momentos se ultimaban los trámites para hacer efectiva --una vez más-- su libertad, luego de acusárselo de daño y amenazas, en un hecho ocurrido en la finca de Güiraldes 65.