Mientras venden guantes y asesoran a los arqueros, hablan de amor y practican la “¡psicoterapia!”

Sergio Daniel Peysse

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Egresado del Instituto Superior en Ciencias de la Comunicación Social. Cronista de la sección Deportes de La Nueva. desde el 9 de octubre de 1995, especializado en fútbol. Entre 2002 y 2018 cubrió a Olimpo en Primera división. Trabaja en televisión y radio. Además, integró el equipo periodístico de "El Diario del Mundial", que se emitió en La Nueva Play.

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En el local “Toco y Paso”, donde la pilcha deportiva y las pelotas son pequeños actores de reparto frente al vedettismo exclusivo de todo lo que se ofrece para los arqueros, son pocos los que tocan para entrar y son muchos los que pasan y no se van.

“Por el negocio transita todo el fútbol de la Liga del Sur, algunos toman unos mates y se van y otros vienen a desangrar sus penas”, expresa, con cierto arrebato y mirando por el ventanal que da a la plaza de Villa Mitre, el precursor de la marca, Julio Waterloo Arias, hoy asociado comercialmente con su amigo y colega Fermín Ponte.

La puerta del comercio, emplazado desde sus orígenes (allá por 2019) en Rivadavia 1593, se abre y se cierra con un promedio no mayor a cinco o diez minutos. Está el que pasa a saludar, el que deja algo a las apuradas y el que, con semblante serio y preocupante, lanza un “tengo que hablar con ustedes”.

“Según el personaje, estamos evaluando de poner una barra de tragos, una sombrilla con reposeras o un sillón tipo diván para el psicoanálisis”, adelanta el actual golero de San Francisco con formación en el semillero de Villa Mitre.

“Son muchas las visitas al día, a veces perdés la noción del tiempo hablando de fútbol o de bueyes perdidos en algún lugar del mundo. No solos vienen arqueros, también otros jugadores, técnicos y dirigentes; la puerta está abierta para todos. Hasta hace unos días, el tema de la inundación fue inevitable, pero mientras no se hieran susceptibilidades, se puede hablar de política, religión y relaciones amorosas felices o prohibidas”, contó, sonriendo y con el mate tambaleando en una de sus manos, este arquero que muchas veces, y entre esas cuatro paredes, supo actuar de “Cupido”.

“El tema mujeres siempre trae cola, así que lo tratamos de evitar más allá de que muchos llegan enamoradizos de la persona equivocada”, disparó Fermín con cara de “Santo” protector.

Aunque me costaba volver para atrás por las barbaridades que escuchaba de boca de ambos, necesitaba saber si “Toco y Paso” funcionó como tal desde un principio.

“Arrancó como una tienda de ropa de hombres, hasta que nos sorprendió la pandemia y el hecho de no vender nada me hizo replantear ciertas cuestiones laborales. Costó volver, y como con Fermín, mi referente desde que empecé a atajar, somos como hermanos, decidimos armar un local que tenga todo lo que necesitan los arqueros, una alternativa que en Bahía no había”, explicó Julio.

--No se por qué, pero el arquero es como un “bicho” raro.

--Tal cual. Entrena solo, dicen que está loco y es al que más le apuntan a la hora de repartir culpas. Fermín tenía un local chico en Galería Americana, pero esto es otra cosa, estamos mejor que nunca, con mucha mercadería y tomando pedidos todo el tiempo. Comenzamos con seis pares de guantes en vidriera y hoy tenemos un stock de casi 300 y más de diez marcas.

“Además, con Fermín creamos la escuela FEDA (Formación y Entrenamiento de Arqueros), donde muchos alumnos buscan perfeccionarse para llegar al fútbol profesional. Nosotros, además, los relacionamos con el negocio y tratamos de asesorarlos en todo lo que podemos”.

En verano suelen sentarse al sol, en la vereda de la plaza, con lentes espejados y vestidos para la ocasión como si estuvieran en alguna playa del caribe.

“Este año vamos a agregar mesas y sillas para estar afuera y una heladerita con algún refresco. Mientras compras, te tomás algo, ¿no es una buena idea?”, preguntó Julito.

--Es excelente: un servicio más.

--Y para la barra de tragos, si no hay lugar lo hacemos. Al frente, contra la vidriera podría ir; tomás algo mientras mirás la gente pasar.

Al hueso

“Hay varios calienta-sillas, que si es por ellos se traen la cama y se quedan a dormir. Facundo Carnicero (ataja en Libertad) y el Profe Lucas Abraham pasan todos los días, pero el show lo hace Bruno Falcioni (actual portero de Sporting), eléctrico, `enfermito´del puesto y súper jodón. Viene a buscar algo y se queda charlando, de su vida, de sus sueños, de que le gustaría dar un salto a una categoría superior”, manifestó a su turno el “señor” Ponte, hoy como Entrenador de Arqueros en Liniers (Primera y formativas), San Francisco (Primera) y Sporting (formativas).

“Por lo general se arman verdaderas polémicas de fútbol, de quien juega bien, quien no está a su nivel, pero lo más duro son los cuestionamientos a los técnicos y a sus planteos tácticos. Es más, en esta semana empezaron los análisis de los distintos partidos de la primera fecha, tanto en la A como en la B”, declaró el cuidapalos que en 2019 y con 48 años se convirtió en el jugador más longevo de la Liga del Sur en disputar un cotejo oficial de Primera división.

“La lupa, por supuesto, la ponemos más en los arqueros, en como estuvieron y en los errores que cometieron”, acaparó quien lleva 16 años de matrimonio con la psicóloga Mariela Gerbino.

--¿Cuáles son las preocupaciones frecuentes de los futbolistas que vienen a hacer terapia con ustedes?

--Contestó Fermín: “Muchos arrastran problemas de parejas, otros no se llevan con los entrenadores y los menos hacen hincapié en lo económico, a que no les alcanza para comer lo que ganan en el club. La psicología ofrece un abanico de recursos para determinados contratiempos, pero como no somos profesionales no podemos ayudar con una solución a ese flagelo. Sí escuchamos, comprendemos y acompañamos a los amigos o colegas que confían en nosotros.

--Te escucho y no lo puedo creer.

--Hablamos mucho sobre la actual sociedad donde vivimos, y muchas veces los problemas no se originan por el fútbol, vienen de otro lado, y en eso tratamos de ayudar; para a que no decaigan, para que valoren lo que tienen y para que reaccionen y vivan la vida sin caer en depresión. Apuntamos a un todo, a lo general y no tanto a lo personal cuando el que se sienta frente a nosotros está en una encrucijada.

--¿Cobran la consulta?

--No, pero a los de más confianza les pedimos que golpeen con los pies. Unos bizcochitos, esas tortas materas o facturas, en ese orden, vienen bien para acompañar los mates o el café. Y si alguno se aparece con sandwichitos de miga, le damos el control remoto de la tele, activamos el aire acondicionado, le preparamos un trago y le prendemos velas a su alrededor...(risas).

Julio no tardó ni medio segundo en reaccionar: “Estamos gastando un kilo de yerba cada tres días, así que menos cortecitos elegantes en las peluquerías y más aporte a Toco y Paso”.

Y siguió con la ametralladora: “Algunos, por más que los pongas contra el paredón de fusilamiento, van a seguir entrando con las manos vacías. Ezequiel Alonso (el 1 de Huracán) pasa y nada, `Trapito´ Martínez habla mucho de él pero para el mastique naranja, y después hay profesionales (médicos, abogados y contadores) que vienen por intermedio de fulano o mengano, toman mate y no te dan ni un certificado para una orden de consulta”.

--¿Algún otro?

--Franco Agüero sale del entrenamiento de Villa Mitre y pasa todos los mediodías. No trae ni un grisín, una rata apestosa que venimos siguiendo desde cuando estuvo en Sansinena. Siempre pone una excusa, para él todas las panaderías están cerradas. O debe tener pantalón sin bolsillos por eso no lleva billetera. Ningún problema, está anotado en la lista negra.

Su socio, pensativo, exclamó: “Estaría bueno poner una barra de tragos y una sala con diván. Eso sí, Toco y Paso es como Las Vegas, lo que pasa acá queda acá. A veces publicamos fotos de las visitas en el Instagram del negocio, pero de ahí no sale”.

--Algunos no quieren ser fotografiados, ¿o me equivoco?

--Uhhh... Son varios. Muchos vienen enojados con la vida y empiezan a repartir de lo lindo; la del futbolista es una profesión donde existen los celos y los problemas de convivencia, ya sea en un vestuario, con alguna persona en particular o en el mismo plantel.

Hoy el local tiene todo lo que pueda llegar a necesitar un arquero: remeras térmicas, pantalones especiales, protectores inguinales, guantes, rodilleras y coderas para el Futsal, medias antideslizantes y hasta calzas ajustables al cuerpo.

Además, Toco y Paso vende la pelota oficial de la Liga (Ch1 Sports) y distintos balones para Futsal o Fútbol playa.

--¿Una anécdota que se pueda contar?

--Arias tomó la posta: Fermín, Nacho Torres (arquero de La Armonía) y yo nacimos el mismo día, el 1 de noviembre, y es un clásico venir acá, traer una torta y repetir la foto todos los años. Los tres somos arqueros y los tres nos juntamos desde hace una banda de tiempo ese día antes del mediodía. Ese momento es sagrado.

--¿Alguna historia de amor impactante?

--Fermín suspiró: “Uhhh... Acá no suelen entrar mujeres, pero se hace referencia a varias. Hay un arquero, que no voy a nombrar pero es “Carnicero” (¿no sé si la entendiste?), que está dando los primeros pasos en el amor. Se encuentra en una etapa avanzada, ya almorzó con ella al aire libre, ya se tomaron de la mano y va todo viento en popa. Nos cuenta todos, por eso, en cierta forma, somos parte de esa relación.

--¿Son de dar consejos?

--El más grande de los dos en edad no se guardó nada: “Solemos decir, por experiencia, `mirá, esto no te conviene´, o `no te metas con todo junto de golpe, lo mejor es el paso a paso´. Por ejemplo: viene un arquero que conoció a una chica hace dos meses y ya se quiere ir a vivir con ella. No me pidas el nombre porque no te lo voy a dar, solo te adelanto que vende botines y juega en Liniers. Y lo frenamos en seco, que no se apure, tiempo al tiempo...

--Pero a veces el amor es más fuerte.

--Pero la consciencia no. A los dos meses todavía es un “metejón”, no te podés ir a convivir, y menos que menos sacar un crédito de una casa a pagar en 20 años. Eso si es un crimen, ya se lo espantamos de la cabeza. No sabemos si tenemos la razón o no, pero ya con hablar mano a mano es una tranquilidad para el que viene con dudas en busca de certezas.