Bahía Blanca | Miércoles, 24 de abril

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¡Una verdadera locura lo que hizo Villa Mitre para pasar!

El tricolor le ganó a Pilar, por 77 a 68 y se metió en la Reclasificación de la Liga Argentina.

Germán Andrés tuvo un feliz ingreso. Fotos: Emmanuel Briane-La Nueva.

Twitter: @rodriguezefe

Instagram: ferodrigiez_

 

Cuando la dirigencia ya estaba haciendo cuentas en caso de ganar el próximo partido y tener que viajar a Río Gallegos para enfrentar a Hispano, los jugadores de Villa Mitre demostraron mucho corazón, entrega y eso que no sale en las frías estadísticas, para meter un parcial de 14-0 en los últimos 5m06 y así vencer a Pilar, por 77 a 68.

De esta manera, evitó jugar otro partido de Play-in, clasificando a la Reclasificación de la Liga Argentina, donde enfrentará a Lanús, desde el próximo domingo o lunes, iniciando como local, en una serie al mejor de tres.

De arranque, tras un 0-2, el tricolor mostró su mejor versión, con una buena contención defensiva y leyendo dónde estaban las ventajas en ofensiva. Fluidez y pases para generar ataques limpios.

Con parcial de 9-0, se puso 9-2 la Villa. Claro que, en la medida que fue perdiendo dinámica se topó con sus propias limitaciones.

Si bien Bollo dominó el espacio aéreo, el tricolor no pudo correr, no tuvo demasiado gol perimetral y Pilar pasó al frente 15-14.

En la búsqueda de su conveniencia, Villa Mitre encontró respuestas en las piernas de Jano Martínez para poner en marcha el motor. Y Harina, contra una, dos y hasta tres defensas que le iban cambiando o saltando, se las ingenió para anotar, sobre todo, saliendo rápido de las cortinas.

Entre los dos anotaron 18 de los 20 puntos del primer cuarto: 20-19.

En el inicio del segundo período Jano hizo jugar a Duvanced y este respondió en cada aclarado en la pintura (6 puntos). El problema la Villa empezó a tenerlo atrás, porque la visita atacó el cesto con cortes por el fondo y también aparecieron Demogerontas –básicamente- y Marcon.

Mirá las estadísticas del partido

El tiro de Harina cada vez se fue ensuciando ante las desgastantes defensas y las variantes del tricolor quedaron limitadas al 1x1. Y ese no es su juego natural. Le cuesta. Por eso, mientras la visita se soltaba y mostraba variantes, el tricolor se trababa cada vez más, lo cual se reflejó en el 10-0 en contra, perdiendo el cuarto 26-15 y terminando el primer tiempo 45-35 abajo.

El complemento empezó a puro ritmo. Harina se topó con otro defensor a poco de iniciado el mismo y Villa Mitre, adelante, dependía casi con exclusividad de las corridas de Jano y lo que pudiera inventar en el aire para desafiar a los grandes.

Pilar, por su parte, crecía en su juego y tenía respuestas de los extranjeros Lowery y Demogerontas, para establecer la máxima 56-44, en 6 minutos del tercer cuarto.

La visita tuvo paciencia y mayor capacidad de juego, contra un Villa Mitre que esperaba las respuestas de Jano, lo que pudiera “robar” Duvanced y lo que pudiera darle Harina, quien encontró los primeros puntos en 7m50 de este período.

Cuando parecía que se desmoronaba, el tricolor sacó fuerzas desde lo más profundo, metió un parcial de 7-0 en 1m10 con una corrida y doble de Jano, más recupero de Andrés para triple de Harina y explotó el José Martínez: 57-60 al término del tercer cuarto.

Con mucho corazón, una defensa más pasional que táctica y todo el público a favor, la Villa completó un parcial de 11-0, pasando al frente en 1m10 del último cuarto.

Naturalmente, el desgaste se hizo sentir en el local, que sufrió un parcial de 8-2 y otra vez se vio abajo 68-63, restando 5 minutos.

Apostando a una defensa zonal, con dos triplazos de Harina y Andrés, más una corrida que terminó en doble de Duvanced cuando llegaba de tráiler, Villa Mitre clavó un parcial de 8-0 y pasó al frente restando 2m14: 71-68.

La visita sumó una y otra pérdida ante la defensa local, que esperaba el 1x1. Pilar se paralizó y el tricolor se potenció.

Un recupero de Jano que terminó en otro doble de Duvanced le dio 5 de luz y a partir de ahí todo fue a favor del local.

Con el reloj a favor y su gente que era otro jugador más, la Villa supo manejar los tiempos, la visita apeló a la falta, Harina mostró su mano, hizo 4-4 en libres y la fiesta fue total.

¡De locos!