Elsa Calzetta: toda una vida al frente de un taller literario con sello propio
Palabriendo Palabruptas es un clásico que lleva 32 años. Un espacio de encuentro, creatividad y reflexión. Para muchos, la posibilidad de expresar y sanar a través de las letras. La UNS destacó a la escritora en 2017 por su aporte a la cultura local.
Licenciada en Comunicación Social egresada de la Universidad de La Plata. Docente en nivel superior. Redactora de La Nueva desde 2010. En LU2 Radio Bahía Blanca tiene la columna "Buenas buenas" y se desempeña como redactora creativa. Es especialista en cubrir historias humanas de superación. Además, es profesora de yoga.
A las personas que asisten a su Taller de Escritura Palabriendo Palabruptas que acaba de cumplir 32 años en nuestra ciudad -ya podemos decir que es un clásico-, Elsa Calzetta los llama “mis chicos”, quizás porque cuando se trata de compartir lo que se lleva dentro la edad desaparece y solo queda el amor.
En diálogo con La Nueva., la escritora (su último libro, Luna de siete caras lo presentó en el Teatro Municipal), Licenciada en Letras y mujer destacada de la ciudad por su trayectoria (mérito otorgado por la UNS en 2018) comentó su experiencia luego de tantos años de coordinar grupos de lo más heterogéneos.
-¿Cómo surgió el Taller de Escritura Palabriendo Palabruptas en nuestra ciudad?
-El taller literario quizá fue surgiendo como necesidad. Hablo de mi experiencia, creo que hace 50 años, quienes sentíamos deseos de escribir, compartir y crecer junto a otros no teníamos espacios habilitados o eran pocos y cruelmente selectos.
Entonces, desde hace unos años surgieron los talleres por esa necesidad de experimentar la escritura y lectura, y a la vez fortalecer la autoestima, bastante cascoteada por la famosa dicotomía letrados/iletrados.
-Hay otra dicotomía muy presente en las letras ¿escritor se nace o se hace?
-El escritor puede ser que nazca con una inquietud que debe descubrir al tiempo que crecen preguntas, reflexiones, dudas, críticas, censuras y autocensuras. No me gusta hablar de don, sino de necesidad. Todos alguna vez hilvanamos palabras aunque no llegaran a exteriorizarse. Palabras que nos atraviesan en momentos de contemplación o tristeza.
Cuando vemos por primera vez el mar o la montaña. Cuando muere un ser querido, cuando nos enamoramos, cuando muerde una disculpa o buscamos cómo hacer bien a los otros.
Los grupos que asisten al taller, en distintos días y horarios, suelen presentar a fin de año una Antología con sus escritos. La entrada a estos eventos es libre y gratuita. Para más información, Facebook: Palabriendo Palabruptas o llamar al 291 574 7666.
-Es decir que la necesidad de escribir surge muchas veces cuando algo nos desborda…
-Claro, cuando se hacen vacuas las palabras que nos transmitieron nuestros mayores. Es entonces cuando la semilla del escritor o escribidor, como decía Mirta Itchar, germina. Tener dentro del cuerpo una plantita que amenaza con convertirse en árbol es incómoda. Y por incomodidad necesitamos compartir experiencias, pasarnos "las figuritas difíciles". Surge la necesidad del taller donde cincelar nuevas formas de decir.
Es cuando renovamos bríos y metas, cuando nos animamos a dar el primer paso para subir una montaña, y perder el miedo al desafío.
-¿El Taller, por el hecho de ser un espacio grupal en donde se comparte algo tan íntimo como la escritura tiene el efecto de disolver o, al menos, aliviar la soledad?
-No estamos solos, somos un taller de escritura. Y frente al esfuerzo y a lo desconocido nos gana la alegría de pertenecer. Llevo más de 32 años en este camino y cada año siento el reto con el mismo temblor de la primera vez.
Los testimonios y experiencias de quienes transitan el Taller
“En el taller confirmamos que escribir es invitar a las palabras a recorrer nuestro mundo interior. (Celia Pérez).
“Cuando Elsa abre las puertas del taller, se abren otras puertas: entrega, amor, respeto. Ya desde el pasillo se siente el calor de hogar con un perfume a papel y tinta”. (Carla Palelli).
“Martes Amarillos, nuestro Taller Literario, es el lugar de encuentro, contención, reflexión, conocimiento y trabajo literario compartido, dando vuelo a nuestra creatividad e imaginación. (Adriana Montanini).
“Un pasadizo a un mundo de ensueños”, (Denisse Murray).
¡El taller es algo especial en todo sentido! (Graciela Álvarez).
“Un espacio donde con guía, contención y amor donde logramos plasmar en palabras lo que llevamos dentro”. (Virginia Broullon).
“Es un momento lúdico y a la vez de reflexión, para crecer como personas en el conocimiento de nosotros mismos, el respeto por el otro y la solidaridad” (Alejandrina Ripamonti)
“Espacio donde compartimos experiencias, emociones , imaginamos otros mundos y Elsa nos enseña a darles vida”. (María del Carmen Lucas).
“El taller es esto: leer y compartir algo que nos cruza a todos. El hilo que "nos cose" a todos como grupo en el placer de leer y escribir” (Sergio Salomón)..