Murió el cineasta Rodrigo Espina, director del documental dedicado a Luca Prodan
Estuvo al frente de reconocidos trabajos relacionados con el rock nacional.
El director de cine Rodrigo Espina, fue hallado sin vida en su casa el pasado jueves y, por el momento, se desconocen las causas de su defunción. El autor de Luca, película de 2007 que ofrece una visión reveladora sobre la vida del cantante de Sumo, falleció a los 64 años.
La noticia conmovió al mundo del cine y el rock nacional. Espina estuvo al frente de reconocidos trabajos relacionados con la música argentina. Sin embargo, comenzó nada menos que como asistente de Luis Puenzo, en 1983, en la selección de actores para La Historia Oficial, ganadora del Oscar como mejor película extranjera.
El cineasta realizó videoclips como “Capitán América”, del grupo Las Pelotas, y otros para la banda Los Piojos, como el audiovisual que acompaña al tema “Bicho de ciudad”. Además, en 1986 filmó el cortometraje El Día que reventaron las lámparas de gas, protagonizado por Luca Prodan, Luis Ziembrowsky, Alejandra Flechner, y un elenco perteneciente al Teatro Parakultural.
En 2007 estrenó Luca, su primer largometraje, ganador de numerosos premios y visto desde entonces por más de 120 mil espectadores. Se trata de una película en la que invirtió muchos años de producción, con tres viajes a Europa y una gran cantidad de entrevistas a familiares, amigos, novias y compañeros de ruta de Prodan.
Realizado por la productora Barakacine y con la ayuda permanente de Timmy MacKern (manager de Sumo y amigo íntimo de Luca) y la familia Prodan, el es una suerte de biopic definitva del líder Sumo, que comienza con el relato del nacimiento del legendario cantante en Italia, sigue con su educación de élite en Escocia, los años rockeros en Londres y la llegada transformadora a Córdoba primero, y a Buenos Aires después.
La narración se va hilando con la voz en off del propio Luca Prodan (extraída de casetes que le enviaba a su gente en Europa, a modo de cartas), los testimonios, las canciones de su primera época como compositor (incluyendo algunas grabaciones inéditas) e imágenes de backstage que Espina tenía en su archivo personal.
(La Nación)