Villa Mitre y la Liga Argentina: “Estamos en una etapa de reconstrucción”, dijo De Tomasi

Redacción de La Nueva.

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Por Fernando Rodríguez

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(Nota publicada en la edición impresa)

   Con un plantel renovado, uniendo fichas a medida que finalizan sus compromisos en otras competencias, y con más jóvenes que experimentados, Villa Mitre continúa su puesta a punto de cara a la próxima temporada de Liga Argentina.

   “Es una preparación muy atípica, muy distinta a las anteriores”, reconoció el entrenador Lisandro De Tomasi.

   “Todavía estamos con falta de personal, porque tenemos dos jugadores en el exterior y, también, entre los que contamos, salvo Jamaal Levy, Bruno Pallotti y Fede Harina, el resto son Juveniles y Sub 23, por lo que están abocados a sus categorías y a la Primera local”, detalló el DT.

   La competencia para la Villa comenzará el miércoles 19, con el debut como local ante La Unión de Colón, sin contar todavía para esa fecha con Javier Bollo y Alvaro Chervo, quienes se encuentran disputando actualmente las semifinales de la Liga de Ecuador.

   Mientras que durante la semana se incorporaron Valentín Duvanced y Federico Harina, quienes estuvieron participando del Metro (segunda división) en Uruguay.

   “Dentro de esta preparación, vamos alineados con la planificación y la búsqueda que teníamos hasta la fecha, también especulando con la fecha en la que podían sumarse los de afuera”, explicó Lichi.

   “Estamos adecuando las cargas para trabajar en conjunto con la primera local y con los chicos –agregó- porque no es cuestión de sobre exigir, sino de preparar y que se trate de un crecimiento en conjunto. Así se decidió al momento de encarar la temporada”.

  —El proceso de tener jugadores más jóvenes y que también están vinculados a la competencia local, ¿es más por obligación o por convencimiento?

  —Un poco de las dos cosas. Primero, es una elección del club como estructura de trabajo y, también, lo otro tiene que ver con que Villa Mitre siempre fue muy cuidadoso con el aspecto económico a la hora de competir a nivel profesional. Dentro de ese cuidado, siempre se acerca el personal acorde a las posibilidades, y las mismas, en este caso, las acepté yo como entrenador de la Liga Argentina y también Seba Acosta como técnico del torneo local. Esto demandó mucho tiempo de charlas y debate de ideas con Sebastián, porque tuvimos que unificar muchos criterios para poder llevar adelante prácticamente dos equipos. Realmente fue un desafío distinto que aceptamos los dos y hoy trabajamos de manera mancomunada.

   —¿Cuál es el balance en el más/menos de esta experiencia entrenando jóvenes que están en competencia local y trabajando con el plantel profesional?

   —Trabajando con la Liga tenemos muchos Juveniles y Sub 23, quienes están entrenando por primera vez con un plantel profesional, lo cual hace que ellos vayan incorporando hábitos y que también puedan entrenar ciertas cuestiones técnicas. La búsqueda está en poder brindarles oportunidades. Hemos tenido que hacer un recambio en el equipo y bajamos mucho la edad promedio. Entonces, si bien vamos a tener tres referentes del grupo para el día a día, las oportunidades para los chicos van a estar de acuerdo con el crecimiento.

   —¿Cuánto cambiará la fisonomía del equipo que estaba acostumbrado a presentar Villa Mitre?

   —Bajar la edad de los jugadores hace que generen distintas las energías. Vamos a tener dos aspectos innegociables, que tienen que ver con la agresividad e intensidad defensiva y con el correr con criterio, intentando ser un equipo dinámico. Tal vez, los últimos años veníamos jugando a otro ritmo. Esto tiene que ver con unificar criterios con la Primera local.

   —¿Este perfil de juego se adecua más a tu idea?

   —Siempre me sentí muy cómodo con los jugadores que tuve que dirigir.

   —Entiendo, pero también tuviste que amoldarte.

   —En ciertas cosas sí y en otras el equipo tuvo que amoldarse a mi idea. Soy partidario que si lo que rodea al equipo está basado en buenas personas, seguido de buenos profesionales, uno se siente cómodo dirigiéndolos.

   —Sí, me refería a lo estrictamente táctico.

   —Uno cuando dirige se adecua al personal. Hay entrenadores que persiguen su idea buscando contratar jugadores o, por ahí, intentan hacerlo con jugadores que, tal vez, no sienten lo que uno propone. Y ambas son valederas. También, hay entrenadores, como es mi caso, que intento adecuarme al personal que tengo. Hoy considero que la idea, y lo que debe hacer sentir cómodo al equipo y a mí, es la forma de juego que intentaremos buscar.

   —Van a tener dos bases como Jano Martínez y Bruno Pallotti de un perfil similar. ¿Puede ser contraproducente?

   —Ellos tienen una linda responsabilidad por delante. Uno porque es su primer año como mayor y se ganó otra posibilidad viniendo de recambio la temporada pasada, y el otro, porque es un juvenil que tendrá mayor responsabilidad en el juego. Considero que son características de juego distintas y que van a poder complementarse. También, vamos a poder jugar con doble base, algo con lo que ellos se sienten muy cómodos.

   —Claro, al momento de poner una pausa, con jugadores corredores, tal vez tengan que apelar a la doble la base.

  —Por eso insistía de intentar correr, pero con criterio. Va a pasar que en muchos momentos nos costará encontrar la pausa o tener lectura de algunas situaciones. Creo que por haber bajado el promedio de edad, tengamos que convivir mucho más con el error. Y será parte de nuestro trabajo estar apoyándolos y acompañándolos, porque así será el proceso. Hoy tenemos un base de 19 años (Jano Martínez); Pallotti, de 24; Duvanced, de 22; Nacho Alem, de 21 y Chervo, de 23. Sacando a Bollo, Harina y Levy, tenemos chicos muy jóvenes. Será una muy linda oportunidad para que ellos puedan medirse.

  —Imagino un equipo agresivo atrás y con bastante dinámica ofensiva, ya sin un referente. ¿Da el perfil para eso?

   —Una de las cosas de mi idea de juego, en el cinco contra cinco, es buscar el pase extra, algo que hicimos muy bien en temporadas anteriores y que intentaremos repetir, para buscar al mejor posicionado y no depender de acciones individuales. Vamos a tratar de consolidarnos lo más rápido posible dentro del torneo.

   —Dentro de esta renovación de plantel, ¿cuáles son los objetivos y lo que hablaste con los dirigentes?

   —Hoy estamos en una etapa de reconstrucción, hablando del equipo de la Liga, en la cual se apostó a tener jugadores más jóvenes, con la idea de darle la oportunidad que necesitan y que podamos contarlos para próximas temporadas. A la vez, el único ajeno a la ciudad es Chervo, en una muestra de que Villa Mitre continúa intentando defender las bases del básquet local.

   —En el grupo de trabajo te acompañan Andrés Larrasolo (asistente), Bernardo Montés (preparador físico), Luciano Huss (kinesiólogo), Facundo Rossi (utilero), Martín Martinese (jefe de equipo) y Ariel Carli (médico). ¿Haber cambiado gran parte del staff te genera un trabajo extra?

  —El trabajo pasa por transmitir ideas, formas de trabajo y hábitos. Uno de los cambios más importantes fue el horario de entrenamiento, porque ahora lo hacemos a las 9 de la mañana.

   —Tener raíces de Villa Mitre imagino que te ayuda a poder transmitir lo que significa, ¿no?

   —Me favorece en conocer ideas, saber de tiempos y dónde están las cosas. Villa Mitre es especial y la gente acá, más allá del tiempo que lleves en el club, te hace sentir como si fueras de toda la vida.