La novela continúa: los abogados apelaron y Djokovic se queda en Australia

Redacción de La Nueva.

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   Nuevo capítulo de esta polémica novela, aunque esta vez con los abogados del serbio Novak Djokovic como actores protagónicos, tras lograr frenar el pedido de deportación del jugador iniciado por las autoridades australianas en la víspera.

   Esto significa que el actual Nº1 del mundo, acusado de incumplir las normas del país al solicitar la exención sanitaria por no estar vacunado y de poseer documentación migratoria no válida, permanecerá en Melbourne hasta el lunes, cuando se tome una decisión definitiva.

   Djokovic fue trasladado hasta el Park Hotel de la ciudad citada, donde permanecerá encerrado en cuarentena a la espera de una resolución. La misma podría tomarse el próximo lunes, cuando se celebre una audiencia con las máximas autoridades de la Nación australiana.

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   La situación de Djokovic, reconocido por su postura antivacunas, llegó hasta el Primer Ministro de Australia. “Estamos a la espera de que presente las pruebas para respaldar su posición. Si no son insuficientes no se le tratará diferente a los demás y se irá en el siguiente avión a su casa”, afirmó Scott Morrison. 

   Después de casi siete horas desde su arribo al aeropuerto de Melbourne, las autoridades confirmaron su deportación por no haber justificado la solicitud de la exención sanitaria. Los abogados del tenista frenaron su salida y a esta novela todavía le quedan algunos días para conocer el final.

   Mientras tanto, lejos de poner paños fríos a la situación, el padre de Djokovic lanzó duras declaraciones de tinte político, dejando a entrever un supuesto conflicto diplomático con su hijo siendo instrumento en toda la cuestión.

   “Mi hijo se convirtió en un símbolo y líder del mundo libre, de los países y pueblos pobres que son oprimidos”, afirmó al sitio Telegraf. Además, agregó: “Es el Espartaco que no tolera la injusticia, el colonialismo y la hipocresía. Si no lo dejan ir, saldremos a las calles porque es una lucha de todos”.