"Hay demasiada política, en el sentido de ideología, y lo que tiene que haber es ciencia"
El médico Conrado Estol analizó la situación sanitaria nacional.
El neurólogo argentino Conrado Estol cuestionó esta mañana por LU2 el manejo de la pandemia en el país y consideró que el estar llegando a las 100 mil muertes por coronavirus significa que "lo que estamos haciendo obviamente falla de alguna forma".
"Hay demasiada política, en el sentido de ideología, y lo que tiene que haber es ciencia. De hecho se determinó un comité asesor de 20 personas y no nos queda claro, a mí por lo menos, que sean ellos los que toman las decisiones y aconsejen al presidente", comenzó diciendo el médico.
Y agregó: "En el caso de Uruguay, todo lo que se hacía era consejo del grupo de científicos. Tiene que haber un liderazgo científico que aconseje a los políticos, porque cuando la política empieza a decidir, ahí empieza a mandarle ideología y aparecen problemas como los que observamos claramente en nuestro país".
Con respecto a la campaña de vacunación, sostuvo que "empezamos a vacunar el 29 de diciembre y a mediados de julio tenemos una proporción baja de la población con dos dosis y no con las vacunas más efectivas del mundo, mientras seguimos en la fila tratando de comprar".
En ese sentido, reconoció que "hay que celebrar que se cierra una compra importante de Moderna", aunque lamentó que "sigamos discutiendo sobre Pfizer y no se hable de Johnson & Johnson ni de Novavax, que se probó hace unas semanas como muy efectiva incluso contra variantes".
"La vacunación es lenta: siempre hubo entre dos y cuatro millones de dosis que no se aplicaban, con un promedio diario de 200 mil cuando deberíamos dar medio millón de vacunas por día, es decir, 15 millones por mes", aseguró.
El médico consideró que hay que "hablar de futuro porque uno siempre está a tiempo de cambiar, pero sepamos bien que el presente de 100 mil muertes era prevenible si se hubiesen comprado las vacunas adecuadas en el momento adecuado y se hubiesen aplicado de la forma adecuada; y en el mientras tanto, seguir testeando en la escala adecuada para identificar contagiados y aislarlos".
"El no haber hecho nada de eso explica las 100 mil muertes", enfatizó.
Siguiendo con la importancia del testeo, indicó que "Estados Unidos realiza una enorme cantidad de test sin costo y, sin embargo, solo el 2 % es positivo. En ese lugar donde se testea muy bien algunas personas infectadas quedan sin detectar, por lo tanto debe tener más que los casos que se informan. Pero en un país que no se testea en forma suficiente, como el nuestro, que solo hace 40/50 mil testeos por día cuando debería hacer de 500 mil a un millón por día, uno puede asumir que la cantidad de gente infectada no detectada es mucha más de la que se cuenta".
"Si en un país que testea bien debe haber dos o tres veces más infectados de los que se cuentan, en un país como el nuestro hay varias veces más", remarcó.
"Cuando veo que Israel está dando la tercera dosis de la vacuna, me preocupa; cuando veo que China compra Pfizer, es un mensaje; cuando veo que otros países muy vacunados están teniendo brotes por la delta y pasaron de informar más contagios a informar más hospitalizaciones y muertes, pienso que las personas a cargo de controlar la pandemia acá tienen que decir: 'Señores, en la Ciudad no vamos a liberar restricciones como acaba de hacer el jefe de Gobierno, vamos a hacer una campaña para decir 'en 2021 nos olvidamos de las vacaciones de invierno', y además vamos a escalar el testeo, acelerar la vacunación y comprar cada vacuna que se ofrezca en el planeta'", sostuvo.
E insistió: "Esas son las cosas que se podrían hacer para que el futuro sea mejor de lo que sería si seguimos este camino".
En otro tramo de la entrevista que se hizo en el programa radial Panorama, Estol aclaró: "Soy neurólogo, no soy experto, pero conozco todos estos datos por leerlos, están disponibles. Por eso no tengo duda de que la gente que asesora al Gobierno conoce perfectamente todo lo que estoy diciendo, por lo que solamente me queda pensar que no se la escucha. Por qué, por ejemplo, el Conicet no ha escalado la producción de testeo y se dedica a hacer un barbijo, es un problema de foco que no entiendo".
Por último, destacó la importancia de seguir con los cuidados mientras se continúa con la vacunación.
"La gente se ha cuidado bastante bien. Si hay grupos antivacunas, son pocos y no tienen mucha fuerza por suerte. La gente ha respondido al aislamiento en un contexto durísimo en el que no se veían resultados. Porque si uno responde y ve la cosecha, uno se siente parte de ese éxito y es una alegría; pero cuando uno responde a pesar del sufrimiento y el resultado es que esta semana vamos a ver 100 mil muertes, realmente es muy frustrante. Igual la gente ha respondido y lo único que queda es esperar que la vacunación avance hasta alcanzar algún grado de inmunidad grupal y cuidarse", afirmó.
Sobre ese último aspecto resaltó: "Que la gente sepa que el que se cuida bien, con el barbijo bien colocado y no juntándose en la cantidad que sabe que no se debe hacer, tiene baja probabilidad de contagiarse".