"Desde 2017 sabía que era espiado", dijo el docente de la UNS
La AFI presentó la denuncia en la Justicia Federal sobre la realización de actividades de espionaje ilegal realizadas durante el gobierno de Macri.
El docente de la UNS que fue habría sido observado por la Agencia Federal de Inteligencia contó que "desde 2017 sabía que era espiado".
Se trata del doctor Francisco Cantamutto, profesor de la UNS e investigador del CONICET en el Departamento de Economía y el Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales del Sur.
"Desde 2017 sabía que era espiado. Simplemente, no tenía registro público de esto y ahora se está debatiendo", le contó a La Nueva. sobre la denuncia presentada recientemente por la AFI en la Justicia Federal sobre la realización de actividades de espionaje ilegal realizadas por dicha Agencia.
"Ese año quise participar de la reunión ministerial de la Organización Mundial del Comercio, que sesionó en Argentina. Me comunicaron que denegaban mi participación como asistente, sin voz, sin voto, sin nada; simplemente para escuchar. Alegaron que incitaba a la violencia, algo que es falso porque profeso el pacifismo en todas sus formas", añadió.
"Más allá de la falsedad de la acusación —continuó Cantamutto—, la duda venía por saber de dónde sacaban la información".
En ese sentido, el docente señaló que hizo un pedido de un recurso de Habeas Data que "legalmente avanzó y la Cámara de Apelaciones me dio la razón para que el Ministerio de Seguridad me brindara esa información, aunque aún no me la brindó".
En tal sentido, la Universidad Nacional del Sur emitió un comunicado bajo la firma de su rector, el doctor Daniel Vega.
"El rector me brindó todo su apoyo, lo mismo hizo la decana del Departamento de Economía. Recibí un apoyo incondicional desde el primer minuto que esto se hizo público", contó Cantamutto.
"A mí me están espiando por realizar actividades que son mi trabajo. Me investigaron por hacer actividades de divulgación y académicas para entender la agenda de la OMC. Además, hay que tener en claro que el Gobierno se jactó de ser republicano, pero pasó por encima los contrapesos del sistema porque, sin ninguna orden de un juez, inició actividades de espionaje ilegal sobre la población y, en base a eso, tomó medidas que afectaron mi imagen pública", mencionó.
Francisco es hijo del exdocente y exdecano de Agronomía, el doctor Miguel Ángel Cantamutto.
"Todo esto expresa el bajo nivel de tolerancia ante opiniones distintas que tuvo el gobierno anterior. Una especie de limitación a la democracia. En mi caso personal tuve muchas actividades públicas conocidas tratando de entender cuál era la actividad que traía a cuento la OMC, cuál era la agenda, qué estaban discutiendo. Y, en todo caso, si había propuestas distintas. Esta actividad que es pública, y que forma parte tanto de lo académico, como investigador y docente, fue motivo de rechazo por parte del gobierno anterior. Expresa una baja tolerancia ante cualquier voz que expresara una opinión distinta", completó Cantamutto.