Bahía Blanca | Viernes, 29 de marzo

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“Los jugadores deben entender que con la camiseta ya no se le gana más a nadie”

Olimpo acumula 6 derrotas al hilo, está último en el Grupo 2 del Federal A y su entrenador, Pedro Dechat, aclaró que para salir de tan crítica situación el equipo se debe amoldar a una categoría que no parece ser tan sencilla como en el mundo aurinegro creían.

 

Fotos: Jano Rueda- La Nueva.

Por Sergio Daniel Peyssé / speysse@lanueva.com

   ¿Qué le pasa a Olimpo?

   El Federal A se le está haciendo cuesta arriba. Perdió completamente el rumbo futbolístico, acumula 6 derrotas consecutivas, se encuentra último en el Grupo 2 y el tenso malestar de los hinchas con el plantel es cada vez más notorio.

   Muchos simpatizantes ya se dieron cuenta de que nada iba a ser tan sencillo como parecía, que el aurinegro no iba a estar de paso por la divisional, que con la camiseta, la chapa y la historia no iba a alcanzar. Otros no quieren ver la realidad, y despotrican contra la dirigencia y el equipo sin piedad ni contemplaciones.

   “Hay varios motivos que hacen que Olimpo esté en crisis, aunque el desconocimiento de la categoría es el que más ruido me hace. Y no lo digo solo por los jugadores, es cuestión de todos lo que, de alguna manera, están relacionados con el fútbol de la institución”.

   Así comenzó la charla con el técnico olimpiense Pedro Dechat, quien lleva tres cotejos al frente de un grupo que, parece, se acostumbró a perder.

   “El actual proceso arrancó con una gran ilusión, aunque por determinados factores sufrió averías y constantes cambios. Hay que entender que existen técnicos y jugadores para cada categoría, que no podés improvisar, y menos en un Federal A, la categoría más dura y la de mayor roce del fútbol argentino”, admitió el entrenador misionero.

   “Olimpo, por equipamiento, infraestructura y modo de pensar, está para otra cosa, muy por encima de un Federal. Pero se tiene que amoldar a una realidad a la que es difícil acostumbrarte cuando venís de tan arriba. Es así, no le demos más vuelta a la situación”, agregó el DT.

   —¿Olimpo subestimó la categoría?

   —Sería irrespetuoso asegurar que sí, porque no fui parte del armado de este plantel ni tuve tanto trato con los dirigentes para saber que pensaban al momento de encontrarse con el Federal. Olimpo cuenta con muy buenos jugadores, aunque hay descompensación en algunas líneas de acuerdo a lo que exige la categoría.

   “Este equipo está compuesto con futbolistas talentosos, de buena técnica, pero el Federal requiere de otras cuestiones. Podés tratar de jugar bien, pero a eso, sí o sí, le tenés que agregar toda la actitud para meter, rozarte y correr. El Federal es durísimo, pero hay que entender que con jerarquía individual o buenos rendimientos colectivos no alcanza”.

   “Estamos lejos de esa realidad que nos viene golpeando duro, pero no es momento de hacer un análisis sobre lo que está o lo que falta, hoy no ayuda. Para resurgir necesitamos un buen resultado. Ganando un partido nos permitirá entender donde estamos y nos hará pensar diferente a lo que lo venimos haciendo”.

   —Cuando terminó el partido en Viedma (derrota 0-1 ante Sol de Mayo), usted declaró: “Olimpo no es el Manchester United”. ¿Qué quiso decir?

   —Justamente lo que te estoy aclarando. En este torneo, el éxito se basa en correr, meter y jugar. Eso lo tenés que tener tan claro como aceitado, sino es imposible soportar el peso de una categoría de máxima exigencia, dentro y fuera de la cancha. Respeto a los jugadores de Olimpo porque quieren dar el máximo, aunque se deben acostumbrar a una divisional que parece que desconocen.

   —¿Qué les falta para acostumbrarse, van 13 fechas?

   —Ser realistas. A Sol de Mayo no le vas a ganar 5-0 porque sos Olimpo. Eso no existe más, en ninguna categoría del fútbol argentino. El jugador está pendiente de lo que dicen los hinchas o los medios, que lo ven de afuera y hacen todo más sencillo, pero se debe abstraer de eso. El fútbol de nuestro país está en decadencia, se niveló para abajo, y los jugadores lo deben entender amoldándose a la categoría donde están. Se terminaron los aires de grandeza.

   “Olimpo debe entender que con chapa e historia no se come a nadie. Hace rato que eso no es así, pero tampoco creo que los jugadores piensen eso, simplemente no pueden superar una cuestión mental que tiene que ver con la adaptación a la categoría. Estoy con ellos todos los días y me doy cuenta de todo. La presión de la gente por querer ganar como sea, de machacar que Olimpo tiene que ascender por el simple hecho de ser Olimpo, quieras o no repercute negativamente. Los hinchas siempre van a pedir y exigir, pero nosotros como grupo debemos estar por sobre las críticas y las opiniones maliciosas”.

   —Por lo que veo el problema es más mental que futbolístico. ¿Me equivoco?

   —Es un poco de todo. El ánimo está bien, aunque tenemos bajones futbolísticos porque no podemos superar enormes lagunas mentales. El equipo entrena bien y llega de la mejor manera a cada partido.

   “La semana previa a Sol de Mayo fue espectacular, con practicas excelentes y con mucho ritmo, pero en Viedma entramos a la cancha y no hicimos nada de lo que teníamos planificado. Fui muy esperanzado y volví totalmente desilusionado. Después del partido estaba re caliente y no quise matar a los jugadores, pero cada uno tiene que asumir lo que hizo. O lo que no hizo...

   —Usted dice que no “mató” a los jugadores con sus declaraciones, pero fue muy duro con el equipo en rueda de prensa. ¿Se arrepintió de lo que dijo?

   —Con lo que pienso no, tal vez equivoqué las formas. No di nombres de jugadores, pero algunos se sintieron agraviados y pedí las disculpas del caso. Soy sanguíneo, frontal y no me guardo nada; y no voy a cambiar ahora a los 60 años. Respaldo a mis jugadores, pero también necesito una devolución. Acá ya se fue un técnico y también me puedo ir yo.

   —¿Existe esa posibilidad en caso de una derrota frente a Desamparados el domingo (hoy)?

   —Es algo que deben definir los dirigentes. Cuando perdés 3 partidos seguidos es lógico que vos pienses mucho lo que querés hacer y los que te rodean te pregunten por tu continuidad. Mi idea es continuar, estoy preparado para revertir esta situación, pensando en 2020. Mi idea es poner el equipo a mi gusto en el receso, que se adapte a nuestras propuestas y nuestras ideas.

 

Apuesta al cambio

   —A Olimpo le convierten un gol y pierde el partido.

   —Tal cual. Ante Sol de Mayo mostró un poco más de rebeldía, pero nos hacen goles imposibles de creer. Los últimos dos partidos perdimos 1-0 con tantos inadmisibles para un equipo profesional. Se lo dije a los jugadores, lo charlamos, por eso te lo comento a vos: si pretendemos ser sólidos, si queremos ilusionarnos con ganar un partido, no podemos fallar en mínimos detalles, cometer descuidos infantiles. Es imposible pretender ganar si das tantas ventajas para que el rival te convierta.

   “Hace 10 años que trabajo con este Profe (Ariel Cóppola) y nunca perdimos 3 partidos seguidos en ninguna de las categorías que dirigimos. ¡Así que imaginate cómo estoy!”.

   —¿Por qué el cambio de arquero: Pablo Fernández por Villar?

   —Cuando la situación viene mal, genero cambios para encontrar una reacción positiva que nos permita sumar. No me tiembla el pulso, tengo en claro mis convicciones. En este Olimpo, para ganar es necesario cambiar.

   —En el receso se pueden traer dos refuerzos. ¿En que puestos sumará Olimpo?

   —Seguramente serán dos volantes; veremos. El plantel tiene muchos problemas de lesiones, y eso también nos liquida la cabeza.

   —Carlos Marczuk iba a ser su ayudante de campo, pero en su momento no vino por cuestiones personales o familiares. Sin embargo en la semana se convirtió en DT de Crucero del Norte, cuando, según tenía entendido, en Olimpo lo esperaban para el receso de verano.

   —Me avisó cuando ya había arreglado con Crucero. Me pidió disculpas, pero él estaba buscando dirigir. Los problemas familiares los sigue teniendo, pero está a 80 kilómetros de la casa.

   —¿Leandro Iribarren (su nuevo ayudante) lo sorprendió?

   —Sí, por el trato que tiene con los jugadores y por el conocimiento de los chicos que son del club. Me ayudó mucho desde que llegué. Me gusta mirar mucho para abajo y me apoyo en él para saber las características de jugadores de divisiones inferiores. Si en la pretemporada sube alguno al plantel profesional, será más por él que por mí.

   “Igualmente, los que ganan y pierden son los jugadores; el equipo se debe sacar el estigma de encima, no se tiene que acostumbrar a perder”.

   —¿Cómo se sale de esta complicada situación?

   —Con un cambio de actitud, afrontando las cosas, estando por encima de las opiniones de los hinchas, no tener miedo y saber afrontar las criticas. Nadie mejor que los jugadores sabe lo que pasa, ellos saben bien qué quieren y hacia donde deben apuntar, pero lo tienen que trasladar al rectángulo de juego. Con la camiseta no le vamos a ganar a nadie.