Cómo operaba la banda que vendió hasta seis veces el mismo vehículo

Redacción de La Nueva.

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   Un aviso que publica la venta de un vehículo, el cobro de una suma de dinero como adelanto o pago total y, finalmente, excusas y hasta amenazas para acallar los reclamos de las víctimas que nunca recibirán sus rodados.

   La maniobra no es novedosa ni tiene ribetes desconocidos, pero le funcionó a un grupo de personas de origen gitano para -según sostiene la fiscalía en su acusación- estafar a 13 bahienses que pretendieron adquirir autos usados.

   Este accionar les permitió a los sospechosos apoderarse de más de 300 mil pesos a principios de 2015, a partir de la transacción de siete vehículos, uno de los cuales fue vendido en seis oportunidades.

   Hoy no hay registro de nuevas denuncias, pero la policía aconseja mantener la guardia alta para evitar el engaño. 

   En las últimas horas la Sala II de la Cámara Penal confirmó la prisión preventiva de uno de ellos,  Ariel Andrés Treico, quien está imputado de asociación ilícita, estafas reiteradas (11 hechos) y coacción agravada por el empleo de armas (dos casos).

   Los jueces no hicieron lugar a un planteo realizado por su defensor particular y ratificaron la resolución de la jueza de Garantías Nº 3, Susana Calcinelli.

   Por el mismo caso ya había sido condenado su hermano Ariel David Trico, en diciembre de 2016, a 4 años de prisión y en el marco de un juicio abreviado.

   Para el fiscal Gustavo Zorzano, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 10, también se encuentran involucradas dos mujeres, sobre una de las cuales pesa un pedido de detención y respecto de la restante una solicitud para saber su paradero.

   En tanto, los investigadores determinaron que otros dos hombres, que aún resta identificar formalmente, completan el cuadro de sospechosos.

   Treico era buscado por la justicia bahiense desde hacía cuatro años y en los últimos meses fue detenido en la provincia de Santa Fe, relacionado con una causa en la que se investigan estafas bajo otra modalidad: cuento del tío.

   La justicia de Garantías de esa provincia lo excarceló, pero a pedido de la fiscalía bahiense fue trasladado y quedó detenido en la cárcel de Villa Floresta. 

Modalidad

   Las estafas atribuidas a la organización se registraron entre el 31 de diciembre de 2014 y el 21 de septiembre de 2015.

   El caso más llamativo es el de un Fiat Palio que fue “vendido” en seis oportunidades, dos de ellas registradas el mismo fin de semana: 14 y 15 de febrero de 2015.

   Además realizaron estafas con las ventas de dos Renault Clio, una Peugeot Partner, un Chevrolet Corsa, un Renault Megane y dos Peugeot 306 y 307.

   Operaban en dos domicilios ubicados en Pampa Central al 700 y Holdich al 1700.

   La maniobra, según los investigadores, consistía en publicar avisos en medios gráficos y páginas de Internet.

   Describieron que si bien los valores de los rodados se correspondían a los del mercado automotor, una cuestión que atraía a las víctimas era la supuesta financiación que brindaban.

   Según los investigadores, para lograr la confianza de las víctimas, les exhibían la documentación de los rodados y hasta les ofrecían concurrir juntos al puesto de verificación, aunque en la mayoría de los casos lo hacían en horarios en los cuales sabían que el local estaba cerrado y no podían realizar el trámite.

   Posteriormente, con falsas excusas, consistentes en la necesidad de la intervención de gestores o escribanos para concretar las transferencias de los vehículos, se negaban a entregárselos a las víctimas, que ya habían cedido una parte o la totalidad del dinero correspondiente a la venta.

   Gran parte de los damnificados declararon que fueron a reclamar en varias oportunidades el cumplimiento de lo acordado y que siempre recibían excusas del mismo tipo, hasta que en un determinado momento los vendedores se ausentaron y les perdieron el rastro.

   Algunos de ellos lograron que los sujetos les devolvieran parte de lo abonado, aunque no la totalidad del dinero.

   Treico está acusado también de amenazar a dos personas que fueron a reclamarle por lo ocurrido.

   Esa situaciones se dieron el 13 de febrero y el 13 de marzo de 2015, cuando, según denunciaron, el sospechoso les exhibió un arma y los intimidó para que cesaran con su reclamo.

Identidades falsas

   Al momento del dictado de la prisión preventiva, además de la pena en expectativa, la jueza de Garantías valoró la existencia de peligros procesales, uno de ellos la posibilidad de fuga.

   Y cuando pidió que Treico permanezca en prisión hasta el juicio, Zorzano destacó que se mantuvo prófugo casi cuatro años, ya que en noviembre de 2015 se lo había notificado sobre su imputación en la causa.

   Tras esto, según describió, el gitano abandonó el domicilio que ocupaba y no se tuvo novedades de su paradero hasta que en junio de este año la fiscalía tomó conocimiento que había sido detenido en Santa Fe.

   Los voceros señalaron que en esa provincia se identificó como Alejandro Darío Treico, situación que quedó al descubierto al cotejar sus huellas dactilares.

   En este sentido, el representante del Ministerio Público indicó que “ha utilizado múltiples identidades con el fin de garantizar su indemnidad e impedir su identificación”.

   Dijo que en distintas etapas brindó tres nombres diferentes y en una cuarta dio su verdadera identidad, aunque con otro número de documento.

   Precisamente, en el reciente fallo de la Cámara se destaca que al dictarse la prisión preventiva de Treico, la jueza merituó "las dificultades que ha revestido dar con el imputado, ya que no siempre se presenta con el mismo nombre (no solo ante las posibles víctimas, sino también ante las autoridades)".

   A esto se le suman impresiciones en los domicilios aportados y el abandono de los mismos, agregado al secuestro de los vehículos involucrados en otras provincias.

Recomendaciones

   Autoridades policiales consultadas por “La Nueva.” hicieron hincapié en la necesidad de tomar ciertos recaudos antes de llevar adelante negocios de este tipo.

   Entre ellas, destacaron la importancia de verificar la situación legal del vehículo a comprar (informe de dominio, multas, patentes, etc).

   También aconsejaron no tomar decisiones o realizar adquisiciones en forma apresurada.

   En el mismo sentido, señalaron la conveniencia de concurrir junto al vendedor al registro automotor correspondiente para realizar el trámite de transferencia.