Suárez: tras las bombas de estruendo, aparecieron los “miguelitos”
La comunidad de Coronel Suárez aún continúa sorprendida por la aparición de clavos tipo “miguelito” en distintos sitios de la ciudad, hecho que está siendo investigado por la ayudante fiscal Lorena Villagra y el personal policial a cargo del comisario Ricardo Franssen.
Fuentes de la investigación señalaron que aún no han sido identificados los autores, aunque no se descarta que sean empleados comunales disconformes con la falta de respuestas del intendente Roberto Palacio a los reclamos de recomposición salarial del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM).
Los “miguelitos” -clavos de confección casera utilizados para pinchar ruedas de vehículos- fueron hallados durante el fin de semana en inmediaciones de la comisaría; la casa particular de la jefa de Inspección y Tránsito municipal, Melisa Soledad García; y la sede de la empresa a la cual la comuna le otorgó la recolección de residuos domiciliarios debido al conflicto con el STM.
(Elementos como estos fueron hallados en las calles de Coronel Suárez).
“Les pido razonabilidad”
Luis Francisco Ponce, titular de la firma de volquetes que se encarga de la basura, confirmó que la aparición de los clavos obligó a suspender el servicio, lo cual provocó que en algunas zonas de la ciudad estos recipientes colapsaran.
“Un empleado me avisó que habían desparramado miguelitos en la entrada del portón de mi empresa. Decidí avisar a Francisco Franco (subsecretario de Servicios Públicos) y él avisó a la policía”, contó.
“El sábado no pude atender ni siquiera a mis clientes. El domingo me llamaron para renovar los volquetes porque la ciudad estaba colapsada de basura. Yo sigo con mi trabajo. Les pido razonabilidad, yo no tengo nada que ver con el conflicto”, agregó.
El empresario -cuya empresa tiene unos 50 años- refirió que la única perjudicada por lo sucedido fue la comunidad.
También dijo que a raíz de lo ocurrido habló con Rubén Allende, secretario general del STM, y que el sindicalista se mostró sorprendido por la noticia, ya que -le aseguró- se opone a cualquier tipo de acción de este tipo.
Lesionado por una bomba de estruendo
La semana pasada Marcelo Andrés Carola Rucosky, empleado del área de Oncología del Hospital Municipal, denunció en la comisaría local que trabajadores municipales habían arrojado una bomba de estruendo y le habían ocasionado traumatismos en el muslo de su pierna izquierda e hipoacusia en el oído izquierdo.
Carola Rucosky, de 23 años, tuvo que ser asistido en la guardia del centro de salud, donde se constató el nivel de sus lesiones y se dio intervención a la UFIJ Nº 9 de Bahía Blanca.
La directora del Hospital Municipal, Marta Travería, repudió el hecho y criticó que se hayan arrojado explosivos en un sector en donde son atendidos pacientes oncológicos. (Agencia Coronel Suárez)