Posse le pidió a Sanz que vaya de vice en la fórmula con Macri
El intendente de San Isidro, Gustavo Posse, se mostró ayer con el presidente de la UCR, Ernesto Sanz, en un almuerzo en Pinamar del que participaron dirigentes y legisladores radicales de la provincia de Buenos Aires.
Posse almorzó con el senador y precandidato presidencial del Frente Amplio UNEN un día después de que éste asistiera junto con el líder del Pro, Mauricio Macri, al acto organizado por la AMIA y la DAIA para honrar al fallecido fiscal Alberto Nisman.
Posse, de extracción radical pero alejado desde hace tiempo de la UCR, viene pregonando la idea de unir "a toda la oposición" y en las últimas semanas, tras el pase de Francisco de Narváez al Frente Renovador y el inminente arribo de Martín Insaurralde a ese espacio, tomó distancia de Sergio Massa.
Entre ellas, sostuvo que el exintendente de Tigre sufre una caída en las encuestas de precandidatos presidenciales, que "podría ir de vice de Macri" en una fórmula conjunta y que el jefe de Gobierno porteño y el gobernador Daniel Scioli están "en un nivel superior" al del tigrense por estar al frente de Ejecutivos provinciales.
Posse quiere ser el candidato a gobernador bonaerense del Frente Renovador, pero para ello deberá enfrentarse en internas con otros cinco precandidatos, Darío Giustozzi, Felipe Solá, Jesús Cariglino, Mónica López y De Narváez, a quienes podría sumárseles el intendente de Lomas de Zamora, Insaurralde, todavía dentro del Frente para la Victoria.
Un deseo
Según publicó ayer el portal lapoliticaonline.com, Posse le transmitió a Sanz su deseo de que comparta la fórmula presidencial con Macri, pero el líder de la UCR, más allá de sus deseos interiores, sabe que primero debe pasar por una serie de etapas partidarias, por ejemplo la próxima convención nacional en Gualeguaychú, que otorgará o no la libertad de hacer alianzas electorales con otras fuerzas.
El interés de Posse, y de muchos radicales del llano, de lograr una fórmula conjunta con el Pro es evidente.
El arrastre de Macri en las PASO, que mide mucho más que Sanz, obligará a ceder innecesariamente terreno al partido de la Capital en las listas distritales que terminen por conformarse entre las fuerzas aliadas.
Algunas versiones indican que, en caso de que Sanz no vaya de vice de Macri, Posse se inclinaría por ser el candidato amarillo en provincia. Incluso, Horacio Rodríguez Larreta podría avalar esta jugada.