Caricaturas francesas ponen más leña al fuego
PARIS -- Una revista satírica francesa publicó ayer caricaturas de Mahoma esgrimiendo su derecho a la libertad de expresión pese a la ola de indignación musulmana por una película anti islam, lo que obligó a Francia a reforzar la seguridad y ordenar un cierre de embajadas en unos 20 países.
Las caricaturas de la provocativa revista "Charlie Hebdo", una de las cuales muestra a Mahoma desnudo con una estrella en el trasero, desataron protestas en el Líbano, donde decenas de miles de simpatizantes de Hezbollah marcharon por una ciudad del sur del país y acusaron a Francia y Estados Unidos de "difamar" al islam.
En respuesta a la publicación, Francia reforzó las medidas de seguridad en representaciones diplomáticas, cerró de inmediato su embajada en Túnez y anunció que el viernes, el día de las plegarias --y las protestas-- en el mundo islámico, cerrará sus embajadas, colegios y centros culturales franceses en 20 países.
La decisión editorial de "Charlie Hebdo" ocurre luego de que más de 20 personas murieron en varios días de protestas y represión u otros hechos violentos en países islámicos desde Asia a Africa por la película "La Inocencia de los Musulmanes", y además vuelve a Francia un potencial blanco de nuevas manifestaciones.
Hasta ahora, la mayor parte de las protestas estuvieron dirigidas contra embajadas de Estados Unidos, ya que la película fue hecha en ese país por un realizador que vive en California.
Cientos de abogados de Pakistán que protestaban contra la película irrumpieron brevemente en la embajada estadounidense en Islamabad, Estados Unidos cerró un consulado en Indonesia por manifestaciones similares y cientos de personas quemaron esfigies del presidente norteamericano, Barack Obama, en Sri Lanka.
Pero las primeras protestas dirigidas también contra Francia se registraron en la sureña ciudad libanesa de Tiro, donde los decenas de miles de seguidores del movimiento islamista Hezbollah marcharon al grito de "Muerte a Estados Unidos. Muerte a Francia" y prometieron "vengar los insultos al profeta".
En Francia, además de ordenar los cierres de embajadas, la Cancillería emitió un alerta ante eventuales viajes advirtiendo a franceses en el extranjero que ejerciten la "máxima precaución" y que eviten grandes concentraciones de personas o lugares delicados, informó la agencia Europa Press.
La decisión de la revista sumió a Francia --que tiene la comunidad musulmana más grande de Europa occidental, con seis millones de personas-- en un nuevo debate sobre los límites de la libertad de expresión en una democracia moderna.
Una demanda por inicitación al odio fue presentada contra "Charlie Hebdo" horas después de emitir la edición de ayer, informó la Procuraduría de París. La Fiscalía no identificó al actor, pero medios locales dijeron que se trata de una organización siria con sede en Francia.
En Internet, unos hackers bloquearon la página web de "Charlie Hebdo". "Probablemente se trate de islamistas radicales", dijo una portavoz de la revista. (Télam).
En nombre de la libertad de prensa
La policía francesa reforzó la seguridad en los alrededores de la redacción del semanario "Charlie Hebdo", cuya antigua sede fue destruida en un ataque incendiario en noviembre de 2011 tras la publicación de una edición especial sobre el profeta del Islam.
El director de la revista, Stéphane Charbonnier, quien vive bajo protección policial desde el ataque a la redacción del año pasado, justificó las viñetas "en nombre de la libertad de prensa" y aseguró que "respetan las leyes de la República" francesa.
"Si nos hacemos la pregunta de si tenemos derecho a dibujar o no a Mahoma, de si es peligroso o no hacerlo, la pregunta que vendrá después será si podemos representar a los musulmanes en el periódico y, más allá, si podemos sacar seres humanos, etcétera", argumentó en un comunicado.
En Estados Unidos, el vocero de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que el gobierno de Obama no pone en duda el "derecho" de la revista a publicar las caricaturas, aunque aseguró que cuestiona la "conveniencia" de la decisión en medio de las protestas.