Vandenbroele rechazó las imputaciones de su exesposa

Redacción de La Nueva.

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 El director de la Compañía de Valores Sudamericana (CVS), Alejandro Vandenbroele, negó ayer ser amigo o testaferro del vicepresidente de la Nación, Amado Boudou.

 La aclaración se conoció en el marco de la investigación judicial para determinar si hubo irregularidades en la quiebra de la ex Ciccone Calcográfica --hoy CVS-- y si hubo una recomendación oficial para que el Banco Central le contrate la impresión de billetes.

 A través de una solicitada periodística, Vandenbroele negó ser accionista o propietario de la compañía y rechazó las denuncias de su exesposa, Laura Muñoz. También desestimó ser oriundo o haber vivido en Mar del Plata, ciudad natal de Boudou, o ser amigo de la infancia del ex ministro de Economía.

 Otro motivo de aclaración fue la versión de que su prima, Guadalupe Escaray, haya sido novia del vicepresidente sino que la relación sentimental fue con el empresario José María Núñez Carmona, amigo de Boudou.

 Tras hacer un detalle de su currículum, con el objeto de explicar su procedencia, su trayectoria y su situación ante el fisco --desvinculándose de la acusación que le formulara Muñoz--, Vandenbroele explicó que la solicitada será su forma de comunicarse con la opinión pública.

 Para proteger la intimidad familiar, según expresó, decidió no otorgar notas periodísticas en medio alguno. (DyN)