Otros dos detenidos por el robo en una joyería
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Dos sujetos catalogados como "peligrosos" y que protagonizaron días pasados un cuantioso robo en una joyería de Mar del Plata, fueron capturados por efectivos de aquella ciudad y, según la línea investigativa que lleva adelante la policía bahiense, estarían vinculados con el audaz saqueo que sufrió a principios de septiembre pasado, el comercio del mismo rubro perteneciente a la familia Debernardi.
Así lo confirmó ayer a "La Nueva Provincia" el comisario Aldo Caminada, titular de la seccional Primera, quien se mostró optimista en lograr el total esclarecimiento del hecho, dos de cuyos autores murieron horas después en un accidente de tránsito (ver aparte).
El jefe policial identificó a los sospechosos como Carlos Daniel Hernández (33), alias "El Indio", quien posee dos pedidos de captura provenientes de juzgados de Coronda, Santa Fe, y de la ciudad de Neuquén, y Omar Antonio Sastre (43), apodado "El Loco".
Según la fuente oficial, ambos sujetos integrarían una banda de boqueteros y durante los primeros días de octubre pasado protagonizaron un cinematográfico saqueo en la joyería Schiffini, ubicada en Güemes 2774, de Mar del Plata. Luego fueron capturados en el marco de un operativo cerrojo.
En esa ocasión la policía incautó en poder de los individuos "un automóvil Ford Ka, varias amoladoras, barretas, cemento y otras herramientas de corte, que fueron utilizadas para efectuar el boquete en la joyería Schiffini", dijo Caminada.
"A partir de allí se judicializó el hecho y automáticamente los sujetos fueron trasladados a la Unidad Penal 15, de Batán. Comenzamos a trabajar en la línea investigativa conjuntamente con las policías de Neuquén y Mar del Plata", agregó.
El funcionario señaló que inicialmente las autoridades de la comisaría Novena marplatense, habían identificado a los ladrones como Carlos Giménez y José Luis Sastre, ya que ambos utilizaban nombres falsos para evadir a la justicia.
Caminada explicó que Sastre "utilizó la identidad de su hermano, que se desempeña como empleado municipal en la ciudad de Neuquén y no tiene ninguna relación con la actividad ilícita".
Sastre --quien cometió varios robos a mano armada y posee un amplísimo prontuario-- estuvo alojado en la cárcel de San Juan y luego de solicitar y conseguir la autorización de la justicia para ser trasladado a la Unidad Nº 11 de Neuquén, por razones familiares, se fugó mientras gozaba del beneficio de salidas transitorias. Cumplía una condena que concluirá a fines de 2018.
El mismo método
"¿Por qué llegamos hasta acá? Estos sujetos actuaban con el mismo modus operandi que lo hacía Roberto Wenzel, con quien se conocían de la cárcel de Neuquén, cuando los tres cumplían sus respectivas condenas", detalló Caminada.
Roberto Wenzel (38), alias "El Karateca", se había escapado de la prisión neuquina el pasado mes de julio y dos días después del robo en la joyería Debernardi, perdió la vida en un accidente de tránsito ocurrido en el kilómetro 595 de la ruta 3, jurisdicción de Coronel Dorrego.
En esa ocasión también falleció María Alejandra Gil (42). Ambos tenían domicilio en la ciudad capital de Córdoba y en el auto siniestrado llevaban parte del botín del robo en la tradicional joyería ubicada en la calle Belgrano 136.
Como se informó en estas columnas, el hecho se perpetró el 2 de septiembre último, pasadas las 10.30.
En primer lugar, los ladrones irrumpieron en el domicilio de Belgrano 132 --contiguo a la joyería--, donde reside un matrimonio de jubilados que fue reducido por la banda. Y luego, desde esa propiedad se realizó el boquete por el cual robaron del comercio dinero y joyas por un valor de varios miles de pesos.
"Esta gente trabaja permanentemente con identificación falsa, viven profugados de la justicia y en esta ocasión decidimos comunicarle la situación a la doctora Patricia Lande, instructora adjunta de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 1, a cargo del doctor Eduardo Quirós", dijo Caminada.
Esclarecimiento fortuito
El lunes 3 de septiembre a la tarde, tres personas fallecieron en el acto a raíz de un tremendo choque ocurrido en las afueras de Coronel Dorrego, y la policía estableció después que dos de las víctimas, identificadas inicialmente como Carlos Rolando Correa (35) y María Alejandra Gil, tenían vinculación con el robo en la joyería Debernardi.
Después se estableció que el hombre era, en realidad, Roberto Wenzel (38), quien se había escapado de una cárcel neuquina en julio.
El siniestro fue protagonizado por un Volkswagen Bora gris, dominio INZ 701, en el que la pareja transportaba gran parte del botín y que circulaba en sentido Bahía Blanca-Tres Arroyos, y un Toyota Corolla, de color blanco, patente KTT 161, conducido por Gumersindo Pereyro González (60), a quien acompañaba Elida Edith Musanti (55), domiciliados en Alberdi 2004, de Bahía Blanca.
Como consecuencia de la colisión, ocurrida mientras llovía copiosamente en la zona, además de Gil y Wenzel, falleció Musanti, mientras que Pereyro González resultó malherido y fue asistido en el Hospital Penna, para pasar luego al Privado del Sur.
En el baúl del Bora se encontraron alhajas, dinero y relojes que habían sido sustraídos de la joyería Debernardi y de la casa contigua.