Abdo, entre Ramón Díaz y Rivero
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El presidente de San Lorenzo de Almagro, Carlos Abdo, admitió ayer que luego de asumir en su cargo debió elegir entre el entrenador, Ramón Díaz, y el volante Diego Rivero, quien finalmente se marchó a Boca Juniors, porque la relación entre ambos "estaba rota".
"Cuando llegamos al club debimos elegir entre Rivero y Ramón Díaz. La relación estaba rota y es algo que podría haber solucionado la anterior dirigencia", comentó el máximo dirigente de la entidad de Boedo.
En el torneo Apertura 2010, el director técnico separó del plantel a Rivero y en el receso veraniego lo declaró transferible, por lo que se marchó a Boca en un trueque en el que Matías Giménez llegó a San Lorenzo.
El último sábado, jugando para Boca, Rivero marcó uno de los goles con los cuales su nuevo equipo goleó por 3-0 a San Lorenzo.
"Rivero es un gran jugador, pero si el otro día jugaba mal seguro que todos decían menos mal que lo dejaron ir. Esperemos que juegue bien porque tiene un contrato con San Lorenzo y a fin de año puede volver al club", sostuvo Abdo.
Por otro lado, el presidente de San Lorenzo aceptó que buscará incorporar un volante ofensivo, aseguró que se rescindió el contrato del delantero uruguayo Sebastián Balsas y adelantó que harán lo propio, unilateralmente, con el colombiano Leonardo López.
Por lo tanto, quedarán habilitados próximamente dos de sus incorporaciones, el uruguayo Juan Manuel Salgueiro y el paraguayo Pablo Velázquez.
El plantel retomará este martes las prácticas en la Ciudad Deportiva del club, y quedará a la espera del debut en el torneo Clausura, el sábado 12 de febrero frente a Gimnasia y Esgrima La Plata.
Rusculleda quiere inhibir
El volante Sebastián Rusculleda evalúa inhibir a San Lorenzo de Almagro por una deuda que tiene el club con él, tras haber sido marginado del plantel por el entrenador Ramón Díaz.
Según explicó Marcelo Lombilla, representante del futbolista, Rusculleda buscó asesoramiento en Agremiados sobre cómo proceder ante este inconveniente.
"Un peso o un millón es plata. Si le deben que se lo paguen", fue la sentencia del apoderado de Rusculleda.