Weyland
El caso de la conexión ilegal de agua en la casa del titular del Instituto Cultural de la comuna, Federico Weyland, tiene, al menos, dos aristas de análisis. Por un lado, el hecho en sí. En torno a este no se puede decir otra cosa que se trata de la comisión lisa y llana de una irregularidad por parte del ciudadano Weyland, que se agrava por su condición de funcionario público, si bien que ABSA se demore con las obras de extensión de la red domiciliaria podría ser un atenuante, que, de todas formas, no lo disculpa.
El otro aspecto a tener en cuenta es la continuidad del funcionario en la comuna. Weyland sigue en el gobierno por la voluntad del intendente Cristian Breitenstein, quien rechazó su renuncia, al considerar que no hubo nada demasiado grave. En este punto, el jefe comunal actuó de acuerdo a su convicción y a sus facultades por lo que será la opinión pública la que juzgue a futuro la postura asumida ante esta crisis.