Loma Paraguaya: el barrio donde los sueños están rotos
Podría decirse, sin temor a equivocarse, que junto con los ferrocarriles ingleses desaparecieron, también, las aspiraciones de quienes soñaron a Loma Paraguaya como un sector de progreso y actividad industrial de alcance nacional.
Hoy quedan sólo algunos bosquejos de una época en la que se alcanzaron a trazar canchas de tenis, de golf y atletismo, como un claro incentivo para el desarrollo de su naciente comunidad.
A manera de ejemplo puede mencionarse la usina eléctrica, ahora desmantelada, que en el pasado alimentaba al tranvía y al alumbrado público, así como a numerosas viviendas, industrias y comercios.
Asimismo, "La Isaura", una de las empresas de petróleo más importantes de la ciudad a principios del siglo pasado, hoy representa uno de los principales motivos de discusión entre los vecinos, que aseguran que la refinería --a partir de 2000 en manos de Petrobras--, es la principal causa de contaminación ambiental en el área.
Sin embargo, la iniciativa por hacer del sector un barrio industrial dejó algo más que edificaciones desmanteladas y proyectos rotos.
De hecho, aún persiste cierta actividad productiva, por caso varias fábricas de muebles y de bombas inyectoras y elásticos que forman parte del paisaje urbano.
Así, tal vez no al ritmo que se esperaba, el barrio progresó a pesar de las adversidades.
Hoy cuenta con servicios de gas, agua, alumbrado y obras sanitarias cubiertos, aunque los vecinos esperan algunas mejorías en la materia.
Su oferta educativa se centra en la Escuela Nº 70 "Martín de Güemes" y en el Jardín de Infantes Nº 926, más un predio polideportivo que, a pesar de su falta de mantenimiento, significó una brisa de reactivación para una zona que parecía olvidada.
Contaminación. Los fuertes olores que se dispersan por el barrio son motivo de preocupación para los cuatro mil vecinos de Loma Paraguaya.
Según el titular de la Sociedad de Fomento, Miguel Alarcón, "hace tiempo que estamos inhalando las partículas que despiden las antorchas de Petrobras y sabemos que eso puede provocar cáncer. Acá, las dificultades respiratorias se padecen todo el año".
Según dijo, sus afirmaciones están basadas en un informe dado a conocer en febrero de 2009 por profesionales bahienses, en el cual se alertaba sobre la contaminación atmosférica provocada por las refinerías de petróleo.
El estudio se refirió a partículas, sólidas o líquidas, que debido a su muy pequeño tamaño, son inhaladas y llegan a puntos profundos de los pulmones, las cuales son imposibles de ser expulsadas por la respiración normal.
Incluso dijo que el informe especificó, además, que en condiciones climáticas desfavorables, los gases emitidos por la antorcha, en lugar de dispersarse en altura, descienden hacia el suelo (fenómeno llamado "fumigación"), afectando a los vecinos cercanos.
Visión a futuro
Más arraigadas en el componente social de Loma Paraguaya, las drogas son, según Alarcón, uno de los problemas principales de su agenda.
Asimismo, otro de los puntos que será foco de conflicto en el futuro está dado por la posible paso de una vía de transporte con destino al puerto, justamente donde hoy se levanta el predio deportivo de Loma Paraguaya.
Alarcón aseguró que esta decisión ocasionará problemas con los vecinos que están instalados allí y generará un importante impacto ambiental a causa del tránsito de camiones.
Agregó que la calle Pedro Pico registra el paso de 3.000 vehículos por día y que si a eso se suma la descarga de transporte semipesado, "el sector se verá saturado".
"Comparto la visión de progreso de la ciudad, pero tengo entendido que las únicas que se van a beneficiar son las grandes empresas".
Datos del barrio
* Alcance: entre Manuel Pedraza y las vías, Guayaquil, avenida Colón y Pedro Pico.
* Gas: casi cubierto
* Agua: casi cubierto
* Electricidad: deficiente
* Asfalto: no hay calles asfaltadas
* Obras sanitarias: deficientes
* Transporte: línea 504
* Instituciones: Sociedad de Fomento con salita médica, Centro de Jubilados, Escuela Nº 70 y Jardín de Infantes Nº 926.
* Actividades culturales: en la Sociedad de Fomento se ofrecen diversos talleres.
* Proyectos a futuro: disponer asfalto en algunas calles y reforestar.
Los vecinos tienen la palabra
* "No me gusta el barrio. Vine porque con mi marido hicimos una casa acá, pero nos encontramos con que el servicio de colectivo era pésimo y las calles están muy mal", Lorena Rodríguez, 33 años.
* "Llegué hace más de medio siglo, cuando el barrio era un potrero. No había luz ni agua y parecía que estaba viviendo en un desierto. Ahora cambió totalmente. Pero, a pesar de su progreso, aún faltan algunas comodidades", Sergio Reyes Montanares, 74 años.
* "De alguna manera el barrio quedó marginado. Posiblemente seamos los mismos vecinos los que no nos apoyamos ni formamos una organización con la cual podríamos haber mejorado nuestra situación con un poco de empeño", Robles Arnoldo, 65 años.
* "Tenemos necesidades urgentes como hacer un cordón cuneta para dar niveles a las calles de desagote. Cuando llueve no entra ningún auto, porque también faltan asfaltar aunque sea las cuadras de mayor circulación. Lo cierto es que con relación a la cantidad de años que tiene, el barrio podría estar mucho mejor", Salvador Reyes, 34 años.
* "Nací y pienso formar mi familia acá. Sé que la educación no es la misma que yo tuve, como tampoco se vive con la misma seguridad que antes. Pero, por ahora, es lo que me toca vivir", Adrián Barra Sáez.
Un siglo atrás. "Allá por la `Loma del paraguayo', así llamada porque en tiempos remotos tenía su vivienda de cueros y estacones un pastor de esa nacionalidad, cazador de perdices y patos, y no lejos del celebrado barrio del `Mondongo', pintoresca agrupación del criollaje "achurador", la empresa del Pacífico ha levantado una pequeña estación ferroviaria a la que ha llamado "Loma Paraguaya", a unos 300 metros de la usina eléctrica y su chimenea de 18 metros de altura". "La Nueva Provincia", 10 de enero de 1913