Weiss fue uno de los grandes éxitos de la primera semana
BUENOS AIRES (Télam) -- El psiquiatra y escritor que incursionó en la terapia de las vidas pasadas, Brian Weiss, visitó Argentina para participar de la 35a edición de la Feria Internacional del Libro, donde brindó una charla sobre la técnica que lo hizo mundialmente conocido hace ya más de 20 años.
Su historia comenzó en los '80 con Catherine, una paciente con ataques de pánico y ansiedad, entre otras patologías, que se sometió a la hipnosis --herramienta utilizada para que una persona recuerde incidentes olvidados durante algún tiempo-- y en ese estado de relajación comenzó a describirle una vida pasada vivida en el año 1863 antes de Cristo.
Luego de esa experiencia Weiss no fue el mismo. Dejó de lado su parte académica y se lanzó de lleno a investigar sobre un mundo desconocido hasta ese momento: las regresiones a las vidas pasadas.
"No es cuestión de creer, sino de vivenciar una experiencia para comenzar a creer en que todos somos energía inmortal", aseguró Weiss.
"Vivimos en un cuerpo que es finito, pero nuestra alma es eterna y se reencarna en varias oportunidades con el deseo de aprender a amar".
"Mi abordaje sobre este tema es muy clínico. No tiene tanto que ver con creer o no, sino con pruebas", aseguró durante una entrevista, en la habitación de un hotel de la zona de Retiro.
El autor de "Muchas vidas, muchos maestros" dijo que escribe sobre las pruebas que reunió en su consultorio y en los seminarios que dicta en el mundo.
"Para los que son escépticos o muy críticos de mi método, les recomiendo que se animen a experimentar para ver de qué se trata y que luego saquen sus propias conclusiones", desafió.
De escéptico a creyente.
Graduado de la Universidad de Columbia y licenciado en la Facultad de Medicina de Yale, este terapeuta no creía en las regresiones.
"En los `70 perdí a mi padre y a un hijo. Sentía un gran dolor. Años más tarde llegó Catherine a mi consultorio y en una regresión me dio mensajes muy claros de ellos y eso hizo cambiar mi visión sobre ésta técnica.
"Experimenté en mi cuerpo la técnica nada más para saber qué sentían mis pacientes y allí me descubrí en una cultura muy antigua como sacerdote en una tierra que podría ser Babilonia o Asiria, quizás por el 800 o el 900 a. de C., era una persona muy poderosa, pero abusaba de ese poder por ambición", afirmó.
"En una segunda regresión me encontré siendo un sacerdote católico en Escocia, quizás en la Edad Media. Enseñaba sobre temas de reencarnación y espirituales. Fui torturado y asesinado por ese motivo. Me fui de un extremo al otro. En esta vida estoy buscando el equilibrio", aseguró.
Trabajo de una vida.
Sobre su aprendizaje en esta vida, el autor de "Lazos de amor" comentó con timidez que aún le queda mucho por trabajar.
"La vida de alguna manera nos atrae a la rutina y nos olvidamos de lo esencial. Ahora estoy trabajando en confiar en la sabiduría del proceso. Hay una inteligencia sobre este esquema.
"Para poder confiar en el proceso hay que estar lleno de compasión y paciencia porque se mueve a su propia velocidad y no a la que yo le quiero imponer. A veces me gustaría poder cambiar el mundo y tengo que dejar las cosas sigan su ritmo", agregó.
Sobre sus colegas que aún se niegan a experimentar este tipo de terapias, el psiquiatra aconsejó que lo hagan porque "da la chance de adentrarse en la psiquis de un paciente y trabajar en niveles muy profundos".
"Sé que el destino trajo a Catherine a mi vida. Tenemos libre albedrío. Yo podría haber dejado de lado esa experiencia, pero decidí estudiar en profundidad el tema, entender y ver cómo funciona para poder comunicárselo a muchas más personas", finalizó.
Alma inmortal.
Sobre la existencia de un origen de las almas, Weiss proclamó que "hay un origen para el cuerpo, pero no para el alma".
"Las almas son eternas, inmortales. Las personas estamos tan atrapadas en los conceptos del tiempo que nos cuesta mucho comprender que exista algo inmortal, eterno, fuera de tiempo".
"Somos energía que fluctúa entre un cuerpo físico y el universo para aprender, vida tras vida. Las almas cuando regresan a un cuerpo físico han elegido volver para aprender a amar", puntualizó.
"En la muerte física seguimos el aprendizaje en planos superiores, que en realidad son niveles superiores de conciencia. Volvemos una y otra vez con las personas que queremos. Nunca llegamos a separarnos de los seres queridos", aseguró en su obra "Los mensajes de los sabios".
Nacer por destino.
Weiss sostuvo en su obra presentada en la Feria del Libro que "no nacemos en nuestra familia por accidente ni por casualidad. Elegimos las circunstancias y preparamos un plan para nuestra vida antes de ser concebidos".
"El alma no puede dañarse jamás, en los abortos ya sean espontáneos o inducidos no es infrecuente que la misma alma ocupe el cuerpo de un hijo posterior de los mismos padres", cree firmemente el escritor.