Boca le propinó una paliza a Bolívar y ahora va por Vélez
BUENOS AIRES (Télam) -- Boca Juniors terminó por alcanzar sin apremios, por el contrario con una holgura llamativa para su falta de efectividad de los últimos partidos, la clasificación a octavos de final de la Copa Libertadores, al golear anoche a Bolívar de Bolivia por 7-0, en cancha de Vélez, su próximo rival.
Con esta victoria y el triunfo de Toluca de Méjico sobre Cienciano de Perú, también como local, por 3-0 (dos goles de Carlos Morales, el primero de tiro penal, y Vicente Sánchez), los xeneizes deberán enfrentar en la próxima ronda nada menos que a Vélez Sarsfield, definiendo la serie de ida y vuelta como visitantes en el mismo escenario de ayer.
De esta manera el grupo 7 lo terminaron ganando los mejicanos con 12 unidades, seguidos por los boquenses con 10, Cienciano con 9 y Bolívar con 4 puntos.
Por su parte, el otro clasificado de la zona, el Toluca de Américo Gallego, será rival del Cúcuta colombiano en la ronda siguiente.
Claro que el cruce entre los dos equipos argentinos tendrá un atractivo adicional con este enfrentamiento decisivo entre los entrenadores Miguel Russo y Ricardo La Volpe, que estaban justamente en veredas opuestas hace menos de una temporada.
En cuanto a lo ocurrido anoche en Liniers, todo se le simplificó a Boca después de primeros 20 minutos en los que los bolivianos ofrecieron una heróica resistencia a partir de la gran tarea del arquero Joel Zayas.
Rodrigo abrió la canilla
Pero un gol del bahiense Rodrigo Palacio abrió la canilla que inundó de tantos la valla del atribulado conjunto boliviano, que atraviesa la peor crisis institucional y deportiva de su historia.
Por eso no fue necesaria la mano que le dio el árbitro paraguayo Ricardo Grance, al cobrar un penal por infracción a Juan Román Riquelme que no fue tal, pero no le importó a Martín Palermo para instalarse a 25 goles del récord que ostenta el legendario Francisco Varallo.
Después, cuando el primer tiempo expiraba, Palacio anotó su segundo tanto personal y el tercero de Boca, que así aventaba cualquier riesgo de eliminación más allá de lo que aconteciera en Méjico con Toluca y Cienciano (si los peruanos empataban podían eliminar a los locales).
Y la segunda etapa ya fue un camino llano para que Boca se floreara y pudieran anotar sus primeras conquistas oficiales con la camiseta de Boca Jesús Dátolo, una de las figuras xeneizes, y Bruno Marioni.
Entre un tanto y otro Palermo estuvo a punto de incrementar su cosecha personal (en el período inicial se perdió un gol sin arquero definiendo como un principiante tras una habilitación de Palacio), pero el defensor Carlos Tordoya se "anticipó" y venció su propio arco.
Así colaboró para que Boca le marcara la máxima goleada a un equipo boliviano en Copa Libertadores, ya que sobre la hora otra vez Marioni se anotó en la red.
La marca más alta hasta ayer había tenido lugar en 2000, cuando Boca le ganó por 6-1 al Blooming.
Y ahora, ya eliminados River Plate, Banfield y Gimnasia y Esgrima La Plata, los dos únicos equipos argentinos que siguen en carrera se verán las caras inmediatamente en octavos de final.