Unánime aprobación de "El otro" en La Berlinale
BERLIN (AFP-NA) -- El filme argentino El otro, de Ariel Rotter, protagonizado por Julio Chávez, fue recibido con aplausos este martes en la exhibición para la prensa del 57º Festival Internacional de Cine de Berlín.
La cinta relata la historia de Juan Desouza, un abogado de Buenos Aires que tiene que hacer un viaje por asuntos profesionales a la provincia de Entre Ríos, y que transforma radicalmente su periplo cuando decide tomar la identidad de otra persona y embarcarse hacia una aventura que lo ayuda a descubrir su mundo interior.
Durante los 83 minutos que dura el largometraje, Rotter realiza con el protagonista no sólo una expedición a otra vida, sino también un viaje al interior del propio personaje.
"Creo que en todos estos años he hecho filmes siempre sobre el mismo tema", declaró el director después de la proyección de la película, estrenada mundialmente en la Berlinale.
"Desde los primeros cortometrajes hasta El Otro se trata de la comprensión de qué hacemos con el tiempo limitado que nos ha sido dado", agregó Rotter, cuyo primer largometraje de ficción fue Sólo por hoy, estrenado en la sección Panorama del festival de Berlín en 2001.
Chávez fue muy elogiado por la crítica el año pasado por su papel en El custodio, de Rodrigo Moreno, que obtuvo el Premio Alfred Bauer (que lleva el nombre del primer director de la Berlinale).
Las otras películas programadas para la víspera eran la producción europea Irina Palm, de Sam Garbarski, que marca el gran retorno a la pantalla de Mariane Faithfull, y The Walker (fuera de concurso), de Paul Schrader, presidente del jurado internacional de esta Berlinale, con una pléyade de estrellas, entre otras Lauren Bacall.
La confirmación de Chávez
"La Berlinale quería más Julio Chávez y acá está El otro", aseguró Rotter, consultado por un filme que fue pensado, plano a plano, para el actor.
"Existían grandes temores, yo mismo pensaba que no iban a recomendarnos para la selección, habiendo, como hay, tan buen y tan variado cine argentino", admitió tras la proyección de la cinta.
Rotter se confesó consciente de que su filme "existe porque existe Julio" y recuerda que escribió "todos sus planos, todas sus escenas, pensando en los ojos de Julio, en que era una película sólo asumible con la mirada de Julio".
Dos años trabajó en el guión pensando en el actor, pero sin hablarlo con él.
"Cuando finalmente lo tuve listo, el día en que había apalabrado una cita con él la cancelé, por miedo. Si me decía que no, me quedaba sin película", comentó el realizador.
Diluidos los temores empezó la labor: "Sólo había que ensayar las partes en que él actúa con alguien. El resto era su propia mirada, su manera de hacer y entender el personaje. No podía ser de otra manera", añadió.
Hay mucho más. Rotter descartó que el estilo de El custodio y de El otro hayan acotado la mirada sobre el resto del cine argentino valioso.
"Argentina tiene ahora dos o tres entre los diez mejores directores del mundo", argumentó.
El otro es una coproducción argentino-francesa-alemana con apoyos varios, incluido el World Cinema Fund, creado por la propia Berlinale en 2004.
"No es que la Berlinale trate especialmente bien al cine argentino, es que eso es así en otros festivales, de ahí tantas producciones mixtas. El cine argentino es maduro, nuestra perspectiva es muy europea y eso facilita los intercambios", continuó el cineasta.
"Lo que se llama nuevo cine argentino es, en realidad, una confluencia de muchas miradas, de muchos estilos, donde felizmente hay mucho que elegir. Es, además, un cine muy competitivo, porque en la Argentina estamos acostumbrados a abrirnos camino a machete, por una mera cuestión de supervivencia", concluyó.