Francella por tres, en cine, teatro y televisión
Actor de tiempo completo ya que actualmente trabaja también en teatro y en televisión, Guillermo Francella ocupa el principal papel masculino en la comedia ¡Papá se volvió loco!, escrita y dirigida por Rodolfo Ledo, donde su coprotagonista es la Pimpinela, Lucía Galán y que se estrena hoy en salas del país.
En el filme el actor encarna a un hombre común sumergido en una actividad laboral abrumadora, con una vida familiar definitivamente encarrilada, pero en un viaje de vacaciones al Caribe da un vuelco inesperado.
Los continuos gags hacen que las situaciones por las que atraviesa el personaje resulten desopilantes aún en los momentos de mayor compromiso emocional.
"Todo el tiempo me ocurren cosas algo extrañas en la vida cotidiana, como ocurre con el personaje. Cuando eso pasa las cuento y las aderezo de tal manera que genera la risa", comentó el actor.
Sin embargo, sostuvo que todo cuanto ocurre en la película puede ser vivido por una familia típica.
"Es un tipo que vive una meseta en su matrimonio después de muchos años de casado, con una esposa que está en la búsqueda de una segunda luna de miel y reavivar la pasión. Acepta viajar en una segunda luna de miel pero tiene miedo de comerse un plomazo y va con los cuñados para pasarla mejor.
"Pero le pasa algo a pesar de él, porque no es que es un pícaro ganador, que sale con chicas de manera cotidiana. Sin embargo cuando ve semejante belleza mulata se obnubila. Empieza a mentir y se mete en un baile del que no sabe salir", acotó.
Francella, modelo de padre de familia, reconoció que nunca escuchó a sus hijos decir "papá te volviste loco" porque nunca perdió su centro en la relación con ellos.
"Puedo tener reacciones impulsivas, de calentón, pero no significa perder los estribos y volverse loco. Mucho menos de la manera en que ocurre en la película", aclaró.
La coincidencia del título en dos de sus actuaciones cinematográficas: Papá es un ídolo y ¡Papá se volvió loco!, dio motivo a conversaciones con los productores pero a pesar de la opinión del actor primó el concepto de la producción en favorecer la visión que el público tiene del actor.
"Yo lo entiendo, me ven como familiero y me conocen desde hace mucho tiempo. Hace 24 años que hago teatro, cine y televisión, la gente me conoce mucho y sabe como soy. Llevo 18 años al lado de mi mujer, dos hijos adolescentes y una vida entera con ellos siempre al lado mío", reconoció.
Una estrecha relación
Desde sus comienzos, el nombre de Rodolfo Ledo estuvo muy vinculado a la carrera de Francella en todas sus versiones: televisión, cine y teatro. El director fue quien lo descubrió en 1980 en un casting, poco después lo dirigió en la primera obra de teatro importante que el actor hizo fuera del circuito comercial, Proceso interior.
Más tarde fue Ledo quien lo hizo debutar en televisión, en 1982, con un personaje con continuidad en Todos los días la misma historia y quien le dio la oportunidad del primer protagónico en De carne somos.
Luego siguió en 1997 el ciclo de Naranja y media y ahora se reencontraron en ¡Papá....
El humor ha signado toda la vida de Francella, con excepción de su vocación racinguista a la que el actor considera "más cercana a la tragedia".
"A veces no es que uno se dedica al humor. Cuando empezamos a buscar trabajo con la pretensión de vivir de la profesión, la suerte puede llevarte a participar en una comedia y si al productor le resultó efectivo te llama para otra comedia y se genera una continuidad no buscada al punto de quedar cautivo de un género.
"Después no es tan sencillo salir, yo los comprendo porque buscan la efectividad. Uno puede decir que no, pero tampoco abundan otros tipos de propuestas. A veces tenés ganas de hacer otras cosas pero no tenés la suerte de que te convoquen", se sinceró.
Sin caminos sencillos
Un actor cómico trasciende cuando encuentra su identidad distintiva en el vasto campo del humor y para lograrlo no suele ser sencillo el camino.
Francella tiene fama de ser un hombre "serio" fuera del escenario.
"Tal vez cuando era más pibe tenía un enorme sentido del humor en la vida y no paraba de estar a 20 centímetros del suelo porque era mi forma de ser y de vivir. Pero con el tiempo me volví más introvertido, más silencioso en reuniones", reconoció.
"En la vida no me gusta hacer lo mismo que hago cuando trabajo, ni sostener la misma dinámica. Si este reportaje se diera en otro contexto, lo haría más pausado, tardaría más en responder, pero ahora seguramente me van a hacer gestos para que termine y vaya a atender a otro medio. No tengo por qué mantener el mismo ritmo enloquecido las 24 horas", señaló.
Si bien no todos los años fueron tan vertiginosos, en este momento el actor protagoniza en teatro Los productores, en televisión la sitcom Casados con hijos y en cine la película que el público conocerá desde hoy.
A pesar del trajín, Francella reconoció que "siempre es muy gratificante hacer teatro y me moviliza mucho".
Desde las primeras épocas presentaba una obra todos los años, en Buenos Aires, Carlos Paz o Mar del Plata. Siguió luego un largo paréntesis desde 1993 a 2000 en que protagonizó La cena de los tontos y actualmente comparte con Enrique Pinti el rubro protagónico en Los productores.
"El teatro es lo más sacrificado porque no tenés ni sábado, ni un domingo, ni un feriado. Incluso traté de arreglar para grabar Casados con hijos los lunes y martes, pero lamentablemente no llego a completar los capítulos de toda la semana y tengo que usar también los miércoles", subrayó. (Télam)
Debut
1982 fue el año en el que el popular comediante debutó en televisión. Se trató de la tira Todos los días la misma historia.