Cánepa se toma el rugby en serio

Redacción de La Nueva.

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 En su último año como juvenil, el rugbier Ignacio Cánepa tiene una lista de desafíos que cumplir antes de dar el salto de calidad que buscan sólo quienes aspiran a hacer del deporte un estilo de vida.

 Formado en Sociedad Sportiva, donde actualmente integra la divisional Sub 19, "Nacho" siente que si arregla un par de cositas (léase estudio-pasaporte), en cualquier momento se despide del ámbito local.

 "Me quedan dos materias del secundario. Estoy viendo si puedo meterlas. Si bien de momento la idea es estar acá, de darse la posibilidad de irme, me voy. Sea a Buenos Aires o al exterior. Estoy haciendo gestiones para sacar la ciudadanía italiana, para aprovechar cualquier oportunidad tanto ahí como en España", anticipa.

 De momento, otra cosa que le interesa es recuperarse de la lesión en el talón y volver a ser el jugador-sensación.

 "Si me entreno puedo dar más. Tengo que trabajar más, empezar el gimnasio y meterle. En mi división tenemos un buen equipo este año y veremos si podemos salir campeones. También quiero ver si, de vez en cuando, puedo estar en algún partido de Primera", dice.

 El pibe se agranda y está bien que así sea porque ya demostró algunas cosas. Por ejemplo, el año pasado fue capitán del seleccionado bahiense Sub 18 y además fue convocado por la Unión Argentina a la preselección nacional que trabajó en Córdoba.

 "Para mí fue como un premio por todo lo que había entrenado. Me vieron justito (por los seleccionadores de Los Pumitas). Había estado trabajando con Juan Pablo Becchina, el preparador físico de El Nacional, quien me entrenó muy bien", recuerda.

 Por si fuera poco, este año lo llamaron de la selección bahiense mayor para sumarse a los entrenamientos, cuando aún es segundo año de juveniles.

 "Me entrené un par de veces pero no fui más porque no creí que pudiera quedar, sobre todo porque era el más chico del grupo. Pero que me hayan tenido en cuenta me dio un golpe de confianza", expresa.

De aquí y allá

 A "Nacho" le preocupa la mentalidad con que se afronta el rugby en nuestra ciudad.

 "Cuando estuve en Córdoba me dí cuenta que en ese tipo de ciudades grandes, como Tucumán y Buenos Aires, se toma más en serio. Acá es cosa de que te vas a jugar un 'picado' con los amigos y te divertís. En cambio, en esos lugares tienen otra mentalidad, se entrenan mucho y además son 60 jugadores por división", opina.

 Sin embargo, distingue el progreso en la plaza local.

 "El rugby de Bahía está creciendo mucho y rápido, a pesar que los buenos jugadores se van a Buenos Aires o al exterior. Te podés quedar acá, pero es como todo. Cuando estuve en el trial de Córdoba me di cuenta que los jugadores de las uniones fuertes tienen una 'manito' que los empuja de atrás para llegar", sostiene.

 Por otra parte, si bien se desempeña como tercera línea, es número puesto para ser un potente tres cuartos.

 "Me siento más cómodo como tercera porque es la posición en la que jugué toda la vida, pero también me gusta hacerlo de centro. Para ser tres cuartos me falta ganar en experiencia y un poco de velocidad, que se puede trabajar con el gimnasio", opina.

 Por último, Cánepa confiesa que antes de hacer las valijas le gustaría llegar a integrar el seleccionado mayor de la Unión de Rugby del Sur. Y si bien aún necesita recuperarse de la lesión, mantiene la confianza intacta como para conseguirlo y cumplir con los objetivos de una carrera promisoria.