Bahía Blanca | Jueves, 04 de septiembre

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El pescado subió su precio hasta un 80% por sobre los valores de 2002

Un público cauteloso y que por momentos prefería tomar nota antes de decidir su compra se advertía ayer en algunos hipermercados, donde se exhibe pescado fresco para su venta. Para los comerciantes, la actitud es totalmente lógica, si se tiene en cuenta que los precios de los productos del mar aumentaron entre un 60% y un 80%, en promedio, con respecto al año anterior.
El pescado subió su precio hasta un 80% por sobre los valores de 2002. Deportes. La Nueva. Bahía Blanca


 Un público cauteloso y que por momentos prefería tomar nota antes de decidir su compra se advertía ayer en algunos hipermercados, donde se exhibe pescado fresco para su venta.


 Para los comerciantes, la actitud es totalmente lógica, si se tiene en cuenta que los precios de los productos del mar aumentaron entre un 60% y un 80%, en promedio, con respecto al año anterior.


 Los argumentos más repetidos para explicar las subas tienen que ver con la calidad de commodity que tiene el pescado argentino, su altísimo nivel de exportación --superior al 90%-- y, obviamente, el nivel de la paridad de nuestra moneda con respecto al dólar.


 Los aumentos más notorios se advierten en el filet de merluza (entre $7,50 y 8,70 el kilo), corvina entera (de $5,20 a $7,50 el kilo) y filet de gatuzo ($8,50 el kilo).


 El impacto de la devaluación sobre los precios internos también tuvo el efecto de incorporar el bacalao de Noruega a la lista de artículos que los argentinos dejaron de consumir, y que un conocido candidato presidencial se esmera en usar políticamente en su favor.


 Su precio de venta al público pasó de $17,50 el kilo, en 2002, a $60; "un costo que nadie estaría dispuesto a pagar", aseguraron ayer varios comerciantes a este diario.


 En su lugar, algunas empresas salieron a ofrecer filet de bróttola nacional, que podría llegar al público a $30 el kilo, aunque la propuesta también fue desechada.


 "La gente ve los precios y se espanta, aunque después de la primera impresión opta por tomar nota y comparar", señaló ayer el vendedor de un supermercado.


 En cuanto al origen de la mercadería, la mayoría proviene de Mar del Plata, aunque ayer comenzó a ingresar a la ciudad pescadilla y corvina desde Monte Hermoso.


 Estos productos se suman a la captura tradicional de camarón y langostino, que en esta época tiene como epicentro la zona de Riacho Azul.


 Entre los precios que llegaron a las nubes figuran los del camarón pelado ($20 el kilo); langostino ($12) y cornalitos ($7,50).


 De todos modos, un consejo para los consumidores es caminar y observar detenidamente los precios, ya que en algunos casos, la brecha para un mismo producto, entre supermercados y comercios tradicionales, supera el 50%.


 De las góndolas de los principales hipermercados también desaparecieron productos como: berberecho, vieiras, mejillones, cholgas, según los comerciantes, porque fueron los primeros en encontrar mercado en el exterior.

Los precios, cada vez más lejos de los ingresos




 Protagonista de la cocina de Vigilia, el precio del pescado promoverá seguramente esta Semana Santa más de un comentario entre los consumidores.


 ¿Por qué sube su precio?. Pués porque como el aceite, la harina o la carne, el pescado es un commodity cuyo valor se fija en dólares en la plaza internacional. Y Argentina exporta más del 90% de su producción pesquera, principalmente calamar, langostino y merluza.


 Ayer, la recorrida por algunos comercios de Bahía Blanca e Ingeniero White permitió comprobar, por ejemplo, que para adquirir un kilo de lenguado, que en 2002 costaba 9 pesos, habrá que estar dispuesto a pagar $14.. Otro tanto ocurre con el filet de merluza, que pasó de $3,90 a 8 pesos.


 Otras causas esgrimidas por los comerciantes para justificar los aumentos fueron las condiciones poco propicias para la pesca, los bajos rindes y el alto costo que incorpora el flete al precio final.


 Paradójicamente, el principal elemento que incide sobre la estabilidad de precios: la demanda, aún no se ha hecho presente, y a juzgar por la opinión de los propios operadores, las perspectivas no son demasiado alentadoras.


 Domingo Caserma, propietario de Costas Argentinas, en la localidad whitense, le dijo ayer a "La Nueva Provincia" que este año sus ventas decaerán, y atribuyó los aumentos a los efectos de la devaluación, además de los fletes que paga el comercio por proveerse, básicamente, desde San Antonio Oeste, Puerto Madryn y Mar del Plata.


 Por su parte, Delmiro Rouco, integrante de la sociedad Pesquera Roucomar, dedicada al segmento mayorista, aseguró que sus ventas habían decaído un 30%, respecto a 2002.


 Un incremento en los precios al público del 20% al 30%, durante la última semana, y del 80%, con respecto a 2002, reportaron en la pescadería Rolando, ubicada en el mercado Municipal de nuestra ciudad.


 Con ventas "flojas" hasta el momento, los valores de algunos productos migraron en este comercio de $3,80 a $6,20, para la pescadilla; de 3,90 a 8,50, la merluza, y 9 a 12 pesos el lenguado, siempre respecto al año anterior.


 En tanto, en Moby Dick aseguraron que "los aumentos rondan el 80%" y que la merluza es el pez que más busca la gente, dentro de una marcada tranquilidad en lo que a demanda se refiere.