Siempre se vuelve al primer amor

Redacción de La Nueva.

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 La vida es así. En un momento te quita y en otro te da.

 Leandro Ginóbili formó parte del equipo de Bahiense del Norte campeón de Primera en 1989. Al año siguiente, con apenas 20 años de edad, se sumó a Quilmes (Mar del Plata) para jugar la Liga.

 Sufrió el desarraigo. En total, disputó 7 temporadas en el máximo nivel liguero. Actuó en 323 juegos y señaló 4.691 puntos (promediando 14,5).

 En 2003 retoma el romance con el club de siempre: Bahiense del Norte.

 Sí, el mayor de los hermanos Ginóbili, que el próximo 17 cumplirá 33 años, esta temporada volverá a vestir la casaca tricolor en el certamen de Primera división del básquetbol local.

 El último plantel que integró fue el de Conarpesa (Puerto Madryn), en el TNA de la temporada 2001-2002. Hace casi un año que no juega oficialmente.

 --¿Por qué la vuelta a Bahiense?

 --Nunca me alejé. De no haber pasado al profesionalismo no me hubiese ido nunca de Bahiense. El año pasado no pude, pero ahora me hice un lugar para jugar como me gusta: solamente por diversión y sin cobrar un peso.

 --¿Cómo ves a Bahiense del Norte para 2003?

 --El club siempre se caracterizó por armar buenos equipos. Hay chicos con proyección y este año van a darle más participación. En lo personal, que haya jugado en Liga "A" o el TNA no significa que juegue de taquito en el torneo local. No es así. Seguí a Bahiense el año pasado y vi que acá se juega fuerte y bien.

 --¿Cuál es la meta este año?

 --En Bahiense nunca se fijan objetivos. La idea histórica es la de formar jugadores...

 --(Interrumpiendo) Pero a Alejandro Navallo le gusta ganar...

 --¡Ah, por supuesto! Cuando la bola va al aire, tanto él como todos querremos ganar. La institución no apunta a ser campeón.

"Soy una foca"

 --¿Cuántos años más seguirás en actividad?

 --(Risas) No sé... Los que tenga ganas, hasta que me aburra de hacer el bolso...

 --¿Y si este año consiguen el título?

 --Vos sugerís que me podría retirar campeón, ¿no? ¡Como el "Beto" Alonso! (risas). Voy a jugar hasta que me siga "picando" el bichito, me siga divirtiendo y la pase bien. Esto lo tomo con la máxima seriedad posible, pero no voy a exigirme demás. Me conozco y sé que me voy a "calentar" con uno y otro, pero quiero jugar por la esencia del juego en sí.

 --¿Qué dicen Sebastián y Emanuel, tus hermanos, respecto de que volvés al básquetbol y a Bahiense del Norte?

 --De todo. ¡Retiráte! ¡Estás gordo y no te podés mover! ¡Sos una foca!... Además, día a día les tengo que pasar por mail cuánto estoy pesando. Hasta ahora bajé 17 gramos, así que están contentos con mi avance (risas)... Y cuando vengan a ver algún partido voy a tener que taparme los oídos porque me van a "torturar".

 --¿La idea de los tres Ginóbili es terminar en Bahiense?

 --Siempre lo dijimos como un anhelo, pero no creo que Emanuel termine jugando acá, aunque nunca se sabe dónde te llevará la vida. Lo mío, por ejemplo, nunca estuvo planificado. Se dio así.

 --Van a cambiar el reglamento este año porque van a tener que jugar con dos pelotas...

 --¿Por qué? ¿Quién más la puede tirar?

 --Mauricio Vago y Diego González, por ejemplo.

 --No, no tienen chances (risas).

 --¿Vas a ser el máximo triplero del torneo de Primera?

 --En cuanto a triples tirados, sí. Encestados... no sé. Tengo que volver a "conocer" los aros de Bahiense.

Luciano Mutti