"La violencia se está haciendo común", dijo José Gil a días de la muerte de su padre tras un asalto

Redacción de La Nueva.

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   —La violencia se está haciendo común —dijo esta mañana José Luis Gil, hijo de Néstor quien murió el 24 del mes pasado luego de ser asaltado 10 días antes.

   El exbasquetbolista de Estudiantes agregó que le hace mal hablar del tema y que aún están esperando para poder cremar el cuerpo de su padre.

   —Todavía no lo pudimos hacer porque la causa penal está abierta.

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   Néstor murió por un paro cardíaco, aunque para la familia fue consecuencia del violento asalto ocurrido el 14 de julio en su casa de Rojas al 1.700.

   —Yo soy abogado y entiendo las pruebas que necesita la justicia. Pero mi papá nunca tuvo problemas cardíacos y había vuelto de Buenos Aires con todos los estudios bien. Evidentemente un pequeño trauma ocasiona haber perdido un ojo y medio y tener fracturas de mandibula y de nariz.

   "Josi" manifestó además que “esperemos que si aparecen los culpables tengan la condena que merecen y que podamos cremar a mi papá para poder terminar un poco con esta locura”. (LU2 y La Nueva.)